-Kagome, cruzaste la línea. - regañó Bankotsu una vez dentro de la suite, caminando de un lado a otro.
-Perdóname Bankotsu, no supe cómo reaccionar. - trató de excusarse sentada en el sofá.
-No contándoles casi toda la vida de Sesshomaru hubiera sido buena opción. - respondió irónico.
-Pero es que era lo que quería esa bruja. Si yo vi como se tragaba con la mirada a Sesshomaru, Bankotsu y a Miroku. - Añadió Sango igual de molesta, Kagome frunció el ceño recordando a esa descarada mujer.
-No te pongas celosa, Sanguito, yo solamente tengo ojos para ti. - dijo Miroku queriendo acercarse a la castaña.
-Aléjese de mí, prevertido.
Sesshomaru en cambio se encontraba divertido viendo la escena de los primos. Sirvió cinco copas de vino rosado, el favorito de su princesa, y le acercó una copa a cada uno de los ahí presentes. Se sentó junto a la azabache y la abrazó por encima de los hombros.
-La entrevista parecía más referente a la vida de Sesshomaru que a la de tu carrera, Kagome. ¿Por qué lo permitiste? - preguntó el ojiazul.
-Porque si el chisme es lo que nos dará popularidad y venderé más boletos en los conciertos, tenía que aprovecharlo. A Sesshomaru y a mí nos favorecía. Que hablen bien o mal ya no importa, a la gente de por aquí con nada los tienes contentos.
-No lo has entendido ¡expusiste a Sesshomaru! - recalcó el primo.
-Por mí no se preocupen, mientras esto no afecte a Kag, a mí no me importa lo que digan. - respondió antes de beber de su copa y dejar un beso en la cabellera negra de su amada.
-Esto traerá consecuencias, lo sé. Tengo que pensar cómo voy a solucionar cualquier cosa que resulte de esto. - Suspiró cansado y se acercó a darle un beso en la mejilla a la chica. - Me voy pequeña, mantente tranquila, mañana será una noche pesada ya que es tu primer concierto del Tour. Vamos Sesshomaru, dejemos a mi prima descansar.
-Amm, bueno... Sobre eso... - dijo ella nerviosa. Bankotsu viajaba la mirada entre Kagome y el chico, pero cuando Sesshomaru se llevó la copa a la boca tratando de disimular una sonrisa, cayó en cuenta de lo que estaba pasando.
-¡Oh no! Esto será más difícil. ¡Ustedes hacen mi trabajo más difícil! - Expresó dramático saliendo de la habitación.
Miroku se despidió de todos y salió atrás de Bankotsu, tenían asuntos que arreglar para dejar todo listo para el concierto. Sango también se retiraba a la casa de sus padres, pero su salida pareció más bien una huida cuando se vio sola con la pajera.
-¿Qué le sucede a Sango? - preguntó la azabache al platinado. - Todo el día la he visto rara.
-Quizás es por lo de hoy en la mañana. - respondió él acercándose a su cuello para besarle.
-¿A qué te refieres?
-Tu prima entró cuando tú aún dormías y nos encontró a ambos en la cama, aunque no haciendo nada indebido, entendió rápidamente lo que había sucedido. Quizás se siente avergonzada. - Explicó Sesshomaru como si nada.
-¡¿Sango nos vio?! Ay no, que vergüenza, soy yo la que no debería poder verla a los ojos. - respondió completamente roja de pena.
-Somos adultos, Kag y somos una pareja, eso es completamente normal, ni ella ni tú deberían estar apenadas por algo tan normal como lo es hacer el amor. Por cierto ¿cómo te sientes? - preguntó acariciando su bajo vientre.
-Estoy bien, gracias por preguntar. - respondió sonriendo, le encantaba sentirse cuidada aunque sea de manera exagerada. Besó a su novio con la intención de repetir la actividad sexual que tuvieron en el baño pero Sesshomaru la abrazó y aún sobre sus labios le explicó.
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Paparazzi
Fanfiction"Ese día había conseguido algunas fotos de su azabache que valían completamente la pena, esa mujer era un ángel en la tierra, tan hermosa y perfecta. Verla con su uniforme escolar era una fantasía, su cuerpo perfectamente bien formado dentro de ese...