Capítulo 24.

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Caline despertó aturdida, alguien tocaba el timbre de su departamento de forma frenética, no entendía quien podía estar molestandola a las cinco de la mañana, con pesadez abrió la puerta y ahí vio a su prima, con la mirada perdida y completamente exhausta.

─¡Nathalie Sancoeur, pero que es lo que te pasa!.

La ejecutiva se mete, Caline rodea sus ojos y cierra la puerta, al girarse ve a su prima sentandose en un sillón.

─¿Te acuerdas del tipo genial que te conté que conocí por la aplicación?─ ella asiente ─Es Gabriel

─¿¡Que!?.

─Lo que estás escuchando, Gabriel se enamoro de mi, pero no de mi, ¿entiendes eso?, perdón por la hora pero tuve que huir de allí, no podía verlo más.

─Pero eres tú la de la app.

─¿Y si no fuera?.

─Buen punto, pero si eres─ afirmó con decisión

─No estás entendiendo, hablamos de mi, mientras el fingía que era otra persona, no me ve como un mujer aunque se haya excusado de que no hablaba enserio─ hace una pausa ─Decidio olvidarse de su esposa pero no me busco a mi, salió al mundo a buscar a otra

─¿Que dijo sobre esto?.

─Esta emocionado, el piensa que todo puede funcionar, pero yo no puedo aceptarlo así, lo amo desde que nos vimos por primera vez y el ni siquiera se digno a querer intentarlo conmigo.

Su celular suena, ella lo toma y se lo lanza a Caline, la pelirroja lo atrapa de suerte y lo revisa.

La maestra sonrió, y decidió apagar el teléfono para que no sea una molestia, luego fue hasta su prima y la abrazo fuertemente

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La maestra sonrió, y decidió apagar el teléfono para que no sea una molestia, luego fue hasta su prima y la abrazo fuertemente.

─Tienes que ser sincera con el, por lo que se ambos hablaron de sus respectivas personas especiales en la app, no tenían forma de saber que eran el otro y aunque odie defender al hombre que te está lastimando, tampoco sabía de tus sentimientos, no lo culpes.

─Lo se, ¿pero como puedo enfrentarlo después de todo lo que pasó?, me abrí con el, le conté que estoy tontamente enamorada, incluso me consoló cuando estaba triste.

─Ya vas a encontrar el momento, solo mira el lado positivo, el quiere contigo.

─No quiere conmigo, soy su tercera opción─ suspira ─Solo soy una asistente para el, nada más

A todo esto Gabriel re leía toda la conversación que había tenido con Kitty desde el inicio, no entendía como jamás se dió cuenta que se trataba de ella, cuando conversaban, el no le prestaba atención a la distancia que ambos tenían, si lo hubiera hecho tal vez todo este mal entendido se habría ahorrado.

─Soy un idiota.

En eso Adrien entra en la habitación, la puerta estaba abierta y había sido testigo de todo lo que sucedió, este camino y se sentó al lado de su padre.

─¿Que paso?.

─Nada.

─Si eres sincero conmigo podrás arreglar todo más fácil.

Gabriel suspira, mira sus manos, medita un poco y decide que lo que su hijo decía era cierto, tenía que terminar con su lado mentiroso y manipulador para poder recuperar a Nathalie.

─Amaba a tu madre incondicionalmente, creía que su amor era el único que podía hacerme feliz. . .pero me equivoqué hijo─ hace una pausa ─Fui un tonto, por error me metí en una aplicación de citas; conocí a Nathalie sin saberlo, me enamore de ella, pensado que era otra persona, y le dije a Nathalie que tenía que prepararse porque pronto traería a mi novia a la casa y todo se descontroló cuando al fin ambos nos enteramos que estábamos hablando con el otro

─¿Los dos usaban perfiles falsos?.

─Yo no quería ser presa de la prensa por entrar ahí. . .intuyo que Nathalie tenía sus razones para ocultar su identidad.

─¿Ella te gusta?.

─Mucho─ inconscientemente sonríe

─Pero no te hablo de la chica del teléfono, te hablo de Nathalie─ el se gira y mira a su hijo ─El problema está ahí padre, Nathalie debe creer que ella te gusta porque es la persona que conociste en el teléfono y no la persona que conoces en la vida real. . .lo repito ¿ella te gusta?

─No voy a negar que tengo sentimientos encontrados, pero si me pongo a pensar en ella, automáticamente me siento feliz, Nathalie estuvo siempre para mí, me ayuda en todo, me aconseja, sabe exactamente lo que quiero, no comete errores y por sobre todas las cosas tiene ese toque rebelde que a pesar de aveces ser molesto no te impide rendirte ante ella

─La acabas de describir como tú asistente─ el hombre vuelve a ver el suelo ─Tienes que ser sincero padre, intentemoslo otra vez, ¿ella te gusta?

─Si, me gusta, es muy hermosa, me encanta su mechon que siempre está pulcro sobre su cabeza, me gusta su sonrisa, me encanta verla concentrada cuando cree que estoy lo suficientemente ocupado como para no verla, me quedo tonto cuando la encuentro dormida o distraída. . .hace unos días la encontré muy atenta disfrutando de un sándwich y aunque suene como un acosador me quedé viéndola sin entender la razón, pero no podía irme, estaba hechizado─ Adrien ríe

─Eso debes decirle.

─Se lo dije pero me odia.

─Padre tienes que entender que Nathalie te conoce mejor que nadie, es tu asistente pero sobre todas las cosas tu mano derecha, conoce tus movimientos, tus trucos, hasta creo que sabe lo que piensas, debes sorprenderla y confesarle todo esto que sientes.

─Tienes razón, debo sorprenderla─ lo abraza repentinamente ─Gracias hijo

Después de eso el menor se fue a su habitación, Gabriel se acostó, no podía hacer un escándalo a esta hora, pero apenas amaneciera iba descubrir dónde vive la señorita Bustier e iria a encarar a Nathalie, ahora que sabía que la amaba no tenía planeado dejarla ir.

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