¿Cómo lo puedo describir?

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Cambio de final

Algunas personas se confiesan, yo decido dedicarle un capítulo a la persona que me llama la atención y que nunca lo sabrá 

Nunca he entendido mis sentimientos por lo que constantemente cuando hablo de lo que opino o siento sobre algo, tengo dos reacciones, justificar cada cosa, diciendo "aunque realmente no me escuches, no tiene sentido, porque ni yo entiendo el por qué lo siento" o preguntar a cualquier persona a mi alrededor que significa lo que me está pasando, normalmente eso no funciona para que los entienda mejor, sin embargo de alguna manera me ayuda a calmar los nervios que siento respecto a la incerteza que me es generada al no entenderlos.

El no comprenderlos, tampoco es que me generaba grandes problemas, normalmente siempre trato de actuar con racionalidad, es por eso que me generaste un problema cuando te conocí, o bueno quien realmente eras, y no la percepción que tenia de ti.

Al principio no te había tomado en cuenta, solo eras una persona más de mi clase de biología, a la que no prestaba atención, tú te sentabas en el fondo, por lo cual era imposible que te viera desde mi puesto en el frente, no compartimos muchas clases, por lo que no te recordaba de haber visto.

Luego un día, cuando llegue tarde y lo primero con lo que me encuentro es la profesora pasando lista y tu nombre saliendo de su voz "Timothee", me causo curiosidad, pues la profe se detuvo a mirarte para saber si había pronunciado bien tu nombre, tú le contestaste que era correcto [unos meses después descubriría, que no era así, solamente querías salir de eso rápido] tu voz no me llamaba la atención, era normal, sin embargo era raro, eras muy lindo, el típico personaje que tiende a destacar; teníamos varios de esos en nuestra clase; y ocupa su belleza a su favor. Ante mi primer pensamiento de que tu fueras como los demás, descarte todo interés, ya había conocido una persona así que me decepciono, no valía la pena arriesgarse por otra que me llenara de esperanza de ser diferente.

Pasaban los meses, tu nombre dejaba de tomar relevancia, no importaba cuanto el universo quería que lo escuchara donde quiera que fuera, no me interesaba. Hasta que nuestros amigos poco a poco me empezaron a hablar más de ti, sin que supiera que eras la misma persona; te llamaban Tim, hablaban de como tú eras la persona más introvertida que ellos conocían, y como les complico mucho llegar a ti, poco a poco me daba más curiosidad este tal Tim, pues quien podría ser tan introvertido.

Hasta que nos juntamos contigo, mi reacción inicial, fue sentirme estúpida por no sumar dos más dos, y notar que eras tu todo este tiempo, te analice durante las primeras semanas, quería saber si valía la pena arriesgarme, lo cual era difícil calcular, pues tu no me hablabas, y me daba vergüenza iniciar una conversación que probablemente no durara nada, al final lo que me hizo cambiar mi percepción de ti, no fueron tus palabras; las cuales eran pocas o nulas; si no fue tu forma de tratarme.

Siempre me saludabas, y te despedías, todo eso con una sonrisa, pese a que tu cara normalmente era neutra, tu accionar frente a mí, me dejaba sin palabras, siempre me ayudabas, pese a que yo era un desastre viviente, me guardabas un asiento a tu lado, recogías mis cosas cuando se me caían; lo cual a causa de mi torpeza eran más veces de lo que me gustaría admitir; me ayudabas a encontrar mis audífonos, cada que los perdía, todo esto sin yo pedírtelo y sin tu decir algo, mi corazón por alguna razón empezaba a alterarse estando tu cerca.

Un día intente hablarte, para mi sorpresa, a pesar de que tus respuestas eran cortas más que nada eran amables, me incitabas a hablar más... pero yo no lo hacía, siempre terminábamos los intercambios cortos de palabras con una sonrisa.

¿Eso significaba que me gustabas?, no, era imposible, tal vez me agradaba la idea de tu siendo un amigo, pero entonces ¿por qué me gustaba cuando tú te emocionabas por algo?, ¿por qué quería preguntarte de tu equipo de basquetbol favorito, pese a mi odio por el deporte?, ¿por qué quería saber más di ti?, ¿por qué me guastaba cuando frente a nuestros amigos, te ponías a hablar de cualquier cosa que pasara por tu mente?, o ¿Por qué me emocionaba cuando te dedicabas a enseñarnos materia?, ¿por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿por qué quería que lo hicieras más seguido?, ¿por qué buscaba escuchar tu voz con más ansias?, ¿Cuál era la razón de que mis orejas se calentaran al escuchar tu risa?

La primera vez que me hablaste tu primero me emocione, estaba ganando tu amistad, quien no se emocionaría, me hablaste de lo emocionado que estabas por las vacaciones, de cuanto extrañabas a tu familia, y juro que al igual que todas las anteriores veces, te quería responder, hablarte decirte que yo también me emocionaba, pero mi voz estaba atorada, porque realmente no sabía que decir, todo me sonaba sin sentido, por lo que al igual que las otras veces me quede callada. Aunque eso en ese momento no me importo, pues el hecho de que tú me hayas hablado primero me emociono, y sobre todo porque fue nuestra primera conversación fuera de un tema escolar.

Durante las vacaciones no pare de pensar en ti, en cómo me gustaría verte, salir contigo a un lado, tal vez si tuviera confianza en mí, te invitaría, estaba decidida, me había cansado de no hablarte, de no responderte esta vez lo haría, tu escucharías mi voz, y sobre todo tendríamos una mejor amistad... ni es necesario decir que todo fue mal.

Llegando el primer día te salude con una sonrisa que tu correspondiste, pero sentía que era diferente, algo había cambiado y yo no sabía que era, últimamente ya no eras el mismo... era como si volviéramos al proceso de solo saludarnos y despedirnos.

Durante todo ese mes escuche como nuestros amigos hablaban de que los habías cambiado por una chica.

No podía evitar mirarla, ella era todo aquello que yo no soy, era amable, tierna, ella no necesitaba 10 permisos de su mente para hablarte, ella simplemente lo hacía, te abrazaba como si fuera lo más normal, y a ti no te molestaba te gustaba tanto que constantemente ibas donde ella, y eso por alguna razón me dolía... no sé qué pensaba.

Por todo ese tiempo me dedique a ignorar el dolor, solo te sonreía y saludaba como normalmente, si lo ignoraba no volvería, no importaba. Aunque poco duro pues rápidamente volviste a ser el mismo, aunque con una excepción, siempre hablabas de ella, decías que no te gustaba, decías que no eran nada, pero yo sabía que era mentira, nadie te creía, los amigos no se miraban como ustedes, y eso me dolía.

Pero no sabía que decir, no era mi lugar para decir algo, no era mi lugar para sentir algo, sin embargo, no podía controlarlo, mi garganta cada vez que me hablabas quería gritártelo en la cara, que te dieras cuento, más mi mente me retenía de hacerlo, de cometer una estupidez, hasta que un día no pude más.

Estábamos estudiando para nuestra disertación de biología; lo cual se me hace irónico, la materia que inicio todo, fue con la que termine arruinándolo; me preguntaste algo sobre si prefería iniciar o ser quien terminara la presentación, quería decirte que no me importaba, que prefería que tu eligieras por mí, esas palabras nuca llegaron a salir, mi voz salió antes de que fuera detenida, salió revelando lo que con tanto esfuerzo trataba de ignorar, de no creer.

- Me gustas- 

Me hubiera gustado que esas palabras fueran reciprocas, me gustaría tantas cosas imposibles, pero tus ojos verdosos no están en mí, y lo peor es que lo sé, tus ojos que tanto me gustan están puestos en la cabellera rubia de la chica que apareció por la puerta

- Lo siento, ¿dijiste algo? –

- No, nada tranquilo - 

Algo gracioso, algo triste de este capitulo 

En un inicio terminaba en el me gustas, por una semana mientras veía a esta persona lo único que pensaba era en confesarme, total ¿Qué es lo peor que puede pasar?

Algo triste, soy el personaje secundario, literalmente, soy ese típico personaje que ayuda al protagonista a estar con la persona que le gusta 

Algo aun mas triste, siento que estoy perdiendo una gran amistad, y cada día que pasa es más doloroso 

update del chisme de este capitulo 

iniciamos con el chico del que me inspire es un mentiroso de mierda, que en todo el tiempo no era sincero con nadie del grupo con el que hablaba, (conmigo cabe recalcar que solo me hablaba para hacer los trabajos y de vez en cuando algo mas), se intento comer a alguien del grupo, no pudo, iniciaron una relación de amistad mas toxica que la mierda, se intento comer a otra persona del grupo mientras se intentaba comer a otra persona CON LA QUE DIJO QUE NO LE HABLABA

lección de vida: que no les guste el fifas 


ONE SHOTS (Timothée Chalamet)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora