Jimin estaba recostado en la cama de su habitación, esperando a que Jungkook llegara. Tenía algo de sueño, pero estaba seguro de que cuando su animado novio apareciera no habría rastro de este, escuchó el sonido del código de la puerta y sonrió.
Se colocó de lado y cerró los ojos colocándose la manta encima.
—Minnie —canturreó entrando por la puerta.
Pero no abrió los ojos. Lo escucho caminar y luego sintió la cama hundirse a su lado.
Acarició el cabello castaño de Park sonriendo levemente, después de eso se inclinó para besarlo.—¡Ya basta! —Jimin lo empujó lejos cuando sintió la lengua de Jungkook meterse sin permiso en su boca.
Escuchó la sonora risa del pelinegro.
—Sabía que solo estabas actuando —se acosto con él en la estrecha cama.
Lo abrazó para que entraran mejor, el castaño recostó su cabeza en el pecho de Jeon.
—Traje la cena —dijo acariciando su espalda—. Y me quedaré a dormir.
Se volvió a reír cuando sintió un pellizco del contrario.
—¿Le has dicho a tus padres? —el castaño hizo un puchero.
—Claro —le restó importancia con un ademán—. Me dieron permiso con tal de regresar temprano, pero no lo haré.
Esta vez Jimin se levantó para verlo a la cara.
—Si haces eso, no te dejarán venir de nuevo —le dio una palmada en el pecho.
Ya que el pelinegro no parecía prestarle atención.
—Minnie —le dio un beso en la frente—. Si hacen eso me mudaré contigo.
—Recuerda que solo puedes hacer eso cuando seas mayor de edad —rodó los ojos fastidiado.
—Que bueno entonces que mi cumpleaños ya está cerca —sonrió.
Jeon volvió a darle otro beso, pero esta vez en la boca.
—Dejemos el tema de lado —se levantó—. Vamos a cenar.
Park suspiró sin darle muchas vueltas al asunto; camino fuera de su habitación y fue directo a la cocina. Su departamento era pequeño, pero tenía lo necesario; lo pagaba con el suelo que ganaba como bellboy en un hotel algo reconocido de Corea.
Jimin era huérfano... Y tristemente no había sido adoptado por ninguna familia; debido a eso nunca pudo estudiar ya que se la pasaba viajando a diferentes casas hogares. Cuando cumplió la mayoría de edad, el gobierno le había asignado su pequeño departamento y después de eso comenzó a buscar un trabajo, afortunadamente era el que tenía.
Después de un tiempo; se encontró con Jungkook en una tienda de libros. Su lindo y amable novio estaba tratando de alcanzar un libro; él se lo pasó y cuando sus miradas se encontraron, ambos se habían enamorado a primera vista. Desde ese encuentro los dos comenzaron con una amistad hasta que eso pasó a ser más fuerte y así fue como ya habían pasado dos años de noviazgo.
Todo había estado bien, hasta que tuvo que conocer a los padres de Jeon; no quería sonar como un tonto. Pero se sintió un poco intimidado al enterarse que él provenía de una familia muy bien posicionada; sus padres tenían dos grandes empresas. Un banco y una despachó de abogados, para ser exactos.
Su relación como suegros-yerno no era mala, pero no podría decirse que fueran los más afectuosos.
Nunca habían mostrado alguna desaprobación hacia su relación con Jungkook, pero era muy estrictos a veces.—Traje algo de ramen —sacó los envases de la bolsa—. Onigiris y algo de papas fritas.
—Hace mucho tiempo que no pruebo una papa —llevo una a su boca degustándola—. Siempre como comida chatarra contigo.
—¡Hey! Dame algo de crédito —le pasó un bowl de ramen—. Debo consentirte un poco.
—Mi héroe —dijo burlón mientras le daba un beso.
Cenaron gustosamente, todo estaba muy bueno y ambos estaban muy felices.
—¿Cómo vas con los finales? —comentó lavando los platos que utilizaron.
—Son un martirio —lo abrazo desde la espalda—. Papá me atosiga con las estúpidas matemáticas y mamá me ahoga con las leyes.
—Quieren que seas tan bueno como ellos —se encogió de hombros.
—¿Para que necesito dos títulos? —recargó su mentón en el hombro del castaño.
—Para ser importante como ellos —rio terminando de secar lo trastes.
—Solo me interesa ser importante para ti Minnie —llevo sus manos a las caderas de su novio—. Y eso es todo.
—Tu ya eres importante para mi —el llevo sus brazos a su cuello—. Solo resiste un poco más.
Asintió mientras le daba otro beso.
—Vamos a la cama —mostró sus lindos dientes de conejo—. Quiero dormir.
—De acuerdo —le dio un beso en la nariz—. Pero cárgame.
Jeon río bastante y cargó a su novio de regreso a su habitación.
—¡Pero no es justo! —Jungkook se levantó de la silla frenético.
Estaban en el despacho de su padre.
—Se que te molesta —siguió firmando algunos papeles—. Pero tienes que hacerlo.
—¡Por qué debo ir a un estúpido curso de matemáticas en mi cumpleaños! —miro molesto a su madre que también estaba leyendo un contrato.
—Falta poco para que te gradúes y debes ser el primero en tu clase —le dedico una mirada sobre sus lentes—. No debes holgazanear.
—Tengo las mejores notas y siempre he acatado todos los tratos que hemos hecho —soltó desesperado—. Solo les estoy pidiendo un día... Mi día especial para estar con Minnie.
—Siempre estás con él —contradijo su madre—. No veo que tiene de especial.
Agitó su cabeza frustrando.
—Por favor... Mamá... Papá —esta vez ambos lo miraban—. Sean razonables.
Vio a su padre quitarse los lentes mientras se levantaba.
—Escucha... —se recargó en el escritorio cruzando los brazos—. Ve al curso en tu cumpleaños y cuando regreses te daremos permiso de estar toda una semana con tu novio.
—Pero Hyun... —vio a su padre levantar una mano callando a su madre.
Maldita sea, lo habían tentado. De nuevo, quería decir que no, pero una semana completa solo con Jimin. Sabia que su dulce novio se molestaría; pero era una semana y debía aprovecharlo.
—¿Trato? —su padre le extendió la mano.
—Toda una semana —volvió a recalcar estrechando su mano.
Su padre asintió y sin más cerraron el trato.
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歴史; ゴーン
Fanfiction彼らは歴史を楽しんでいます。 Jungkook y Jimin eran dos enamorados jóvenes que fueron obligados a ser separados. 乂ggukmin 乂mini fic 乂cliché ¿?