Ley de Atracción | Steve Harrington

46.En el banquillo.

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Capítulo Nueve

La puerta

Primera Parte

***

La reaparición de Once provocó una ola de conmoción en todo el grupo. Lily, Steve y Max miraron a la chica con curiosidad, por primera vez. Luego, no pasó mucho tiempo antes de que se desatara el infierno. Mike, que sentía debilidad por Eleven, se dio cuenta de que Hopper había estado ocultando a la chica durante un año y perdió completamente los nervios.

Mientras los dos se gritaban desde otra habitación, Dustin presentó a Lily y Steve a Once, que les sonrió amablemente. Max, en cambio, fue rechazada por la chica, para su confusión.

Una vez que Mike se calmó, el grupo, ahora con Once, se reunió de nuevo en la cocina. Esperando que no hubiera más interrupciones, reanudaron la conversación sobre el mensaje de Will. Ahora sabían que la forma de poner fin a todo era cerrar la puerta del Revés.

—"Ya no es como antes. Ha crecido"— suspiró Hopper, con cara de acoso, —"Y eso teniendo en cuenta que podemos entrar ahí, el lugar está plagado de esos perros-"

—"Demodogs" —corrigió Dustin, —"Como demogorgon y perros. Si los pones juntos, suenan bastante mal-"

—"¿Qué importancia tiene eso?" — Intervino Hopper.

—"No lo es. Lo siento" murmuró el adolescente más joven.

—"Entonces, ¿cómo cerramos la puerta esta vez?"— preguntó Lily.

Hopper volvió a suspirar:— "No lo sé, chico".

—"Yo puedo hacerlo" —habló Once, tomando a los demás por sorpresa. Hasta ahora, apenas había pronunciado dos palabras.

—"No me estás escuchando" —dijo Hopper,— "Esta cosa ha crecido, no es como el año pasado".

—"Te estoy oyendo" —perseveró Eleven, —"puedo hacerlo".

—"Pero incluso si El puede, todavía hay otro problema" —Mike intervino,— "Si el cerebro muere, el cuerpo muere".

—"Pensé que ese era el objetivo"— Max frunció el ceño.

—"Lo es", —asintió Mike, —"Pero, si El cierra la puerta y mata al ejército de Azotamentes...".

Los ojos de Lucas se abrieron de par en par, —"Will es parte de ese ejército".

—"Entonces, cerrar la puerta lo matará" —dijo Mike, lentamente.

Al oír esto, se hizo un frío silencio en la sala. Finalmente, Joyce se levantó de su silla y se dirigió al dormitorio más cercano, donde Will yacía inconsciente. Al darse cuenta de que estaba en algo, los demás la siguieron.

—"Le gusta el frío. Es lo que me decía", —murmuró Joyce, cruzando la habitación y cerrando la ventana,— "Seguimos dándole lo que quiere".

—"Si esto es un virus, y Will es el huésped, entonces..." —Nancy comenzó.

—"Entonces tenemos que hacer que el huésped sea inhabitable" —terminó Jonathan por ella, con los ojos abiertos.