Nothing Is Forever

Capítulo 29

~Leer nota IMPORTANTE al final~

6 meses de embarazo.

Mis pies están hinchados, me duele la espalda y lo único que quiero es que este ma... hermoso bebé salga, YA.
Esteban sigue igual de alterado desde que nos dieron esa pequeña mala noticia...

Flashback.

—No les gustara mucho esto —dijo el doctor cuando pasaba esa máquina extraña por mí vientre.
—¿A qué se refiere? —preguntó alterado mi adorado marido.
—Por lo que veo, es posible que se adelante el parto.
—¿¡QUÉ!? —si, ese fue Esteban, con voz de anciana indignada.
—Hey, tranquilo —tome su mano— si eso pasará, ¿en que mes o parte del embarazo sería? —me dirigí al doctor.
—Por lo que veo —dijo anotando algo en su expediente— sería en el séptimo u octavo mes de embarazo.
—¡No puede decirme que sólo me quedan dos o tres meses con mi esposa! —en ese momento juraba que a Esteban le estaba saliendo una segunda cabeza.
—Esteban, juró que si no cierras el hocico te largas de aquí. —había dicho lo más firme que me propuse.
—Bien, bien, siempre soy el malo aquí —balbuceó como niño regañado.

Fin del flashback.

Ahora me encontraba en casa, como una princesa prisionera, ya que, después de ese incidente, Esteban enloqueció y me encerró aquí, literalmente.
Después de que Esteban supiera el sexo del bebé, todo cambio.
Jennifer se encuentra en Europa por un intercambio. Emma logró lo que quería y entró a la selección nacional femenil. Cleo consiguió su debut a nivel internacional en ballet y ahora vive en Francia. En cuanto a Angie, tuvo que volver a África. Su madre había sido atacada por una serpiente realmente peligrosa y tuvo una muerte instantánea.
Anthony y Emma dieron fin a su romance, ella no tenía demasiado tiempo después de haber sido seleccionada y él, había conocido a alguien.
En cuanto a Josh y Gabriela, también quedaron embarazados. Jennifer se lo tomó mejor de lo que esperaba, ahora sale con un nuevo chico, Raymond. Louis por su parte, conoció a otra chica, olvidando su enamoramiento hacia Gabriela. Por lo que ahora, él y Gaby son unos grandes amigos.
Me duele no tenerlos aquí, pero yo les pedí que se alejaran. En cuanto todos consiguieron lo que querían o triunfaron como personas, me aseguraron que ellos se negarían a las propuestas para quedarse conmigo hasta que el bebé naciera. Pero, yo sabía la verdad y preferí alejarlos, les dije a todos que no quería ser un obstáculo en su camino. Pero en realidad los estaba despidiendo, sabía que en cuanto menos me vieran, ellos sufrirían menos.
En cuanto a mi, lamentablemente el cáncer volvió y las posibilidades de que muriera en el parto eran de 100%.
¿Me siento triste? No, en absoluto.
Mi preciosa hija esta triunfando a su modo y estoy orgullosa de ella. Mi bebé es sano, sin posibilidades de cáncer, aunque todavía no estamos seguros. Tengo un esposo al que amo y que no cambiaría por nada en el mundo. Estoy feliz y satisfecha conmigo misma.

× × ×

—¡Gisel! Estoy en casa —grita lo obvio mi listo esposo.
—No me digas —grito con sarcasmo.
—Ja, ja.
—¡Mami! —escucho la voz de mi pequeña.
Ella corre hacia mi, pero le digo que no lo haga porque se puede lastimar además de que estoy cortando las verduras y no quiero accidentes.
—Hola a ti —susurra Esteban depositando besos en mi cuello abrazandome por la cintura y dejando sus manos en mi abultado vientre.
—Hola —digo mirándolo para luego besarlo delicadamente.
—¿Qué hay de comer para hoy?
—Pues comida, lo obvio —digo irónica pero burlonamente.
—Ya lo se bobita, pero quiero que especifiques.
—Ahh, si lo dices así te entiendo mejor —rio inocentemente, <si, claro> — Son milanesas de puerco en mayonesa, puré de papa y la ensalada que de mi dieta. También hice tu sopa favorita.
—¿Sopa de letras? —pregunta emocionado, parece un niño en navidad.
—¿Cuál más seria?
—¡Oh! Te amo, te amo, te amo. —dice mientras deposita besos por todo mi rostro.
—Y yo a ti, pero dejame terminar o no habrá sopa de letras. —lo apunto con el cuchillo.
—Si, mama —frunce el ceño.
—¡Mami! —demanda mi hija, por segunda vez.
Esteban la sienta en el mesón para poder estar a mi altura y poder conversar con ella.
—Te hiche un dibubo —dice tiernamente extendiendo su obra de arte.
—¡Es precioso cariño! —beso su regordeta mejilla.
En la hoja de papel se pueden ver a dos adultos, que supongo que somos Esteban y yo, al lado de Esteban está ella tomando su mano y en mis brazos esta una hermosa bebé.
—¿Quién es ella, pequeña?
—Hemanita —dice mientras señala mi vientre.
—¿Crees qué es niña? —pregunto con ilusión, el que ella piense en eso en serio me emociona.
—Papi, el dijo que shelia una niña, que yo la amalia mucho mami. —dice mientras su hermosa hilerita de dientes me sonríe.
—Asi que será una niña, eh —miro a Esteban burlonamente y él simplemente no sale del shock, creo que no esperaba que Amanda recordará eso.
—Yo...
—¡Gane! ¡Te lo dije! Sabía que mi bebé iba a ser una preciosa niña como su hermana, ¿no es así mi cielo? —beso la mejilla de mi pequeña.
—Shi mami, monita como mami —dice mientras aplaude con sus pequeñas manitas.
—Ire a mi cuarto, nadie me entiende —dice mi dramático marido.
—Venga, no seas ridículo, la comida ya esta lista y tienes que sentarte a comer. —digo autoritaria.
Él toma en brazos a Amanda mientras le susurra cosas como "¿verdad que prefieres a papi?".
—¡Te escuche! —grito entre risas.
—¡Ella me prefiere a mi!
—¡Mami! —aplaude ella.
Lo miró con mi mejor mirada de victoria y el se sienta en la mesa sin decir una palabra más.

× × ×

—Tengo miedo —le susurro a Esteban después de arroparnos con las mantas de la cama.
—¿De qué, cariño? —pregunta él cuando me recuesto en su pecho.
—De que se aferre a mi, me di cueta en la comida. No quiero que sufra cuando me vaya. —digo al borde de las lagrimas.
—Hey, shh, tranquila, falta mucho para eso.
—Seamos realistas Esteban, sabemos que eso no es verdad —las lágrimas comienzan a descender.
—Olvida eso, disfruta esto, yo estoy peor, creeme, pero prefiero disfrutar esto a hundirme en la miseria del tan sólo pensar en perderte. —besa mis lágrimas.
—Te amo tanto Esteban, mi corazón es pequeño pero si necesitará guardar mi amor por ti, no habría tanto espacio para eso, ni en el mismo universo cabría mi amor por ti.
—Oh, me va doler tanto perderte —solloza contra mi cuello— todavía no te he perdido y ya me duele.
—Te amo Esteban.
—Y yo te amo a ti Gisel, más de lo que alguien podría amar.

× ∆ × ∆ ×
SI, aunque sea imposible de creerlo, ¡he vuelto!
Con muy malas noticias, ggg.
Este es el penúltimo capítulo. Se que prometí muchas cosas pero aquí están las razones.
-Empecé esta novela como forma de escapar de lo que estaba viviendo en ese momento.
-No había madurado como escritora como ya lo he hecho.
-Estoy en proceso de escribir una novela, esta vez un poco más sería y más planeada.
Así que, NO HABRA SEGUNDA TEMPORADA.
Nos queda el último capítulo y el epílogo.
Estaba a punto de cancelar la novela pero mis hermanitas leen mis novelas y me rogaron que por lo menos le de un final.
Así que, pueden agradecérselo a Estefania y Daniela Nogueira;)
Son las 4:19 de la mañana, jamás me había esforzado tanto en un capítulo.
¡Se me olvidaba! Pasesnse a la novela "Intentando ser... ¿normal?" Es de unas amigas y yo soy la editora de la novela. Esta muy buena la trama. El usuario es Our-Paradise.
Con esto me despido❤
Los amo☝❤