—¿Qué es lo que pasa cariño? —pregunta en un tono preocupado.
—Yo… Me odiaras cuando te lo diga…
—Jamás te odiaría —me dice muy seguro plantando un beso en mi sien.
Suspiro y lo abrazo más fuerte, no quiero que esto acabe.
—He hablado con Carlos sobre el embarazo…
—¿Y?
—Me ha dicho que al dar a luz tengo 15% de posibilidad de sobrevivir.
Él se tensa y siento como sus pulmones dejan de funcionar.
Me tenso igual y lo miro, no es la mirada de odio que imagine, es más una mirada de perdición.
—No, no, no —susurra contra mi cabello apretándome más a él.
—Esteban…
—Abortaras.
—¿Qué? ¡NO! —me suelto de un empujón y lo miro con horror.
—Yo… Lo siento —baja la cabeza y suspira— es solo que… no quiero perderte…—solloza y me abraza. Sus lágrimas empapan mi blusón, esto era lo que no quería, él y Amanda son todo para mí, pero también Ashley o Nathan, sea lo que sea, son lo que más amo en esta vida, mis amigos, mis amigas, mis padres… Allison.
Ahora yo era quien sollozaba, nuestras lágrimas se unieron y estampo sus labios en los míos. No era un beso dulce y delicado que siempre me daba, era un beso apasionado y desesperado.
Pero mi estómago, o mejor dicho, alguien se quejó por hambre, me reí mientras continuaba el beso y el sonrió de oreja a oreja.
—Disfrutare cada segundo a tu lado —muerde mi labio y lo jala cuidadosamente.
Gruño y le devuelvo el mordisco.
—Al igual que yo cariño, pero Ashley tiene hambre —le doy mi mejor sonrisa y lo saco de la cama.
—¿Ashley?
—Sera niña, lo sé —me encojo de hombros dándole poca importancia al asunto.
—Nathan será —me guiña un ojo y me carga de caballito al llegar a las escaleras.
—¿Tiene alguna preferencia Sr. Hunter? —le muerdo el lóbulo de la oreja y sonríe.
—En absoluto Sra. Hunter —ríe y corre por las escaleras.
Somos los jóvenes que siempre solíamos ser, como si nada hubiera cambiado.
* * *
—Y… ¿Qué dijo?
—Se le ocurrió decir que abortara —sonrió.
Ella me mira horrorizada ante mi sonrisa.
—Dijo que no quería perderme…
—Ahh, ya, pero... ¿Lo harás?
—¿QUE? ¡No! —ahora soy yo la horrorizada, ¿por qué todos tienen pensamientos así?
—Perdon, perdón —rie— es solo que es algo a lo que casi todas acudirían —hace una mueca incomoda con el tema y yo capto la indirecta.
—Creo que será niña —sonrío y acaricio mi pequeña pansita.
—Yo también —dice orgullosa.
De un segundo a otro el celular de Jennifer comienza a sonar, ella lo saca de su bolso y se va a un lugar más alejado.
En lo que ella habla, yo saco mi celular y veo la hora.
2:30 pm¡Demonios! ¡Amanda!
—¡JENNIFER! ¡ME VOY! ¡TENGO QUE IR POR AMANDA!
Todos en el café me miran raro, pero Jennifer se limita a asentir y seguir en su platica.
Todos me siguen mirando de una manera extraña.
—¡Si! Soy madre, señoras y señores, tengo 18 años, no es la gran cosa, hay madres mas jóvenes que yo, y ah, estoy embarazada.
Todos me miran con las mandíbulas en el suelo y yo me voy satisfecha de ahí.
* * *
Estoy preparando la cena, cuando Esteban llega.
Él le da un beso a Amanda en la frente y la deja viendo sus caricaturas.
Entra a la cocina y rodea mi cintura con sus brazos. Besandome el cuello.
—Hola mi reina.
—Hola mi Rey.
—¿Como esta Nathan?
—Ashley, es Ashley, Esteban.
—¿Apuestas?
—¿Qué? ¿Ahora eres Travis Maddox?
—¿Y tú Abby Abernathy?
—Ja, ja, que risa.
—Ya no te enojes mi amor.
—Eres un tonto.
—Tú tonto.
—Mi tonto.
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Corto capítulo por hoy! Nos vemos el Sábado!❤
El sábado editó :)

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Nothing Is Forever
Novela JuvenilMi nombre es Gisel Wold, no soy aquella típica adolescente que sale de fiesta todas las noches y baila hasta que amanezca, desearía que así fuera, pero, esa no es mi realidad, esta es mi realidad. Me detectaron este extraño cáncer a los 13 años, es...