⚠︎Este capítulo se encuentra en edición.
El salón guardó unos segundos de calma mientras la esbelta mujer solo se dedicaba a reparar en las expresiones de su hija.
—¿Qué?— preguntó incrédula.— ¿Bruce? ¿Estás segura?
Está última pregunta fue hecha para no convencerse de aquello.
Eloise le mostró la cartelera que habían estado pegando los Yamada a lo largo de Denver.
En caligrafía oscura y mayúscula, daba a conocer el trágico suceso.MISSING CHILD
Bruce YamadaAdemás tenía una foto del niño con su amigable sonrisa característica que casi diario mostraba.
A la castaña le pasaron los pocos recuerdos que había tenido con él como una cinta de vídeo, seguidamente arrugó el papel y lo dejó caer.—¿Ha sido él, el raptor?
—Aún no han encontrado al culpable.
Sus amarillentos ojos tomados por la angustia e inexpresividad se volvieron a su acompañante, quien le veía en silencio.
—Perdón, hoy no te puedo ayudar. ¿Quieres regresar mañana?
—No te preocupes. Estoy seguro de que lo encontrarán.
Nos vemos, señora Blade.La situación se encontraba fuera de su alcance. No podía discernir entre el plano real y el de los sueños:—lo que también podía considerar visiones— porque claro estaba que no había otra forma de llamar a esos últimos acontecimientos.
Tenía la claridad de que aquel singular hombre se pudo colar con facilidad al partido arrastrándola por el bosque, no obstante no hallaba explicación a su aparición en los baños de la escuela.Bien, ¿era real? ¿O el apodo de loca le quedaba perfecto?
Fuera como fuese a la pequeña Riley no le quedaban fuerzas para seguir reparando en preguntas que posiblemente no tuvieran solución. Apenas cumplía unos cuatro días en Denver a un año de perder a su hermano sumándole ahora su primer amigo, Bruce.
No.Bruce y los otros niños desaparecidos no acabarían como Morgan. No permitirá que los dieran por muertos o abandonaran el caso.
Está vez aseguraría aquello.El último rayo de luz solar se perdió más allá de las moradas de Denver. Las estrellas cubrieron el cielo dando una linda noche a la ojimiel que miraba desde su ventana.
Luces rojas y azules con sus estridentes ruidos acompañados del motor que avanzaba a toda velocidad al hogar Yamada interrumpieron el paisaje.
La familia esperaba respuestas del paradero de su hijo anhelando encontrarlo con vida.Ray pasó con delicadeza la yema de su dedo sobre la cicatriz, sintiendo la textura rugosa que la diferenciaba del resto de su piel. Recordando aquella vez que los mal amarrados cordones de sus zapatillas terminaron dejándola sobre la cera.
Delineó una sonrisa torcida antes de que una agria lágrima se escapara.—Te encontraré.
~•~•~•~
Por la mañana las primeras chispas de luz tenues se colaron por los huecos que las cortinas no alcanzaban a cubrir. La castaña yacía en el comedor dando probadas a regañadientes al desayuno.
El dulzón del cereal combinado con la leche pudo si quiera rozar su paladar antes de que ella intentara regresarlo al plato.
Abandonó tazón moviéndolo unos centímetros.
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𝐓wo 𝐁lack 𝐁alloons → R. Arellano
Fanfiction𝓡丨❝𝖲𝗂 𝗇𝗈 𝗌𝖺𝗅𝗀𝗈 𝖼𝗈𝗇𝗍𝗂𝗀𝗈 𝗉𝗋𝖾𝖿𝗂𝖾𝗋𝗈 𝗇𝗈 𝗌𝖺𝗅𝗂𝗋❞ 𝐃onde Riley se muda para olvidar su pasado. 𝐎 𝐃onde Robin se aferra a no perder lo que más ama. ⚠...