¿final feliz?

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Después de esto, las salidas con Elísabet eran frecuentes y durante unos meses el amor se empezó a demostrar de parte de los dos, pero ninguno fue capas de decirlo, cada ves que nos veíamos nos mirábamos mutuamente con el deseo de consumirnos en uno solo, de sentir nuestros labios rozar, sentir nuestros cuerpos, pero el miedo nos separaba, vivimos mucho tiempo con esa intriga de saber "¿que pasaría si......? ".

Al tiempo me salió una beca para estudiar psicología en Canadá, donde mi vida daría una vuelta de 180°, mis oportunidades allá eran muy elevadas pero tenía que sacrificar algo muy grande, importante en mi vida, Elísabet, mi corazón dolía pero lo mejor que pude hacer fue dejarla ir; preparé mis maletas y programé el vuelo para la siguiente semana, pensé "entre mas rápido me valla menos doloroso será".

faltaba un día antes de viajar, durante la semana evité hablar con Elísabet y no le conté acerca del viaje pues lo mejor era que ella se olvidara de mí del todo, pero no la iba abandonar sin antes dejarle un mensaje por Whatsapp ( lo sé es la peor forma de mandar un mensaje de despedida pero volverla a ver me lastimaría demasiado), con dolor en mi corazón le escribí: "lo siento Elísabet tienes que olvidarte de mí, fue muy bonito el tiempo vivido contigo pero tienes que olvidarme, adiós".

al momento me responde:

E: -¿Que?, ¿Porqué?-

A:- no te puedo decir solo adiós-

cerré mi cuenta, ella me pediría explicaciones haciéndome mas difícil mi partida, de repente sonó el teléfono.

A:-¿hola?-

E:-¿Como así que tu te irás a Canadá mañana y tu no me ibas a decir?-

A:- No me lo hagas mas difícil Elísabet  solo sigue tu vida gracias por tu amistad pero sencillamente no podemos volver a vernos-

E:- ¡¡NOOO ALBERT TU NO TE PUEDES IR Y DEJARME !!, Albert yo te........-

A:-¿tu que?-

E:-Te amo Albert-.

Mi corazón se detuvo..... ¿porque tenia que ser esto mas difícil? yo la amaba realmente la amaba pero ella debía coger otro camino, eramos dos seres destinados a vivir separados por diferentes caminos.

A:- yo a ti Elísabet que te valla bien en tu camino.......-

E:-"Albert espera....."-

con mucho dolor colgué el teléfono lo desconecté, quité el chip a mi teléfono y caí a mi cama en llanto, era dejar una parte de mi vida así que el dolor era intenso.

15 de agosto del 2015.
Me levanté, me  vestí, cojí mis maletas y salí de mi casa, un taxi me esperaba al frente, mi madre se despidió de mí con lagrimas, igual que el resto de mi familia. Al llegar al Aeropuerto llegue al check in y registré mis maletas, ya solo tenía mi maleta de mano, el vuelo salía en una hora así que me senté en la sala de espera de la zona de abordaje; de repente a lo lejos vi esa chica reconocible de ojos marrones, corrí a abrazarla y las lagrimas corrieron como una caída de agua, ella lloraba.

A:-¿como carajos supiste donde estaba?-

E:- llamé a tu madre y ella me dio indicaciones -

A:- "tonta" porque viniste, me haces todo mas difícil ¿porque lo hiciste? -

E:- Porque se va una parte de mi vida, por eso-

A:- y yo dejo una parte de la mía......-

 

Nos miramos fijamente y lentamente nos acercamos hasta sentir nuestro aliento y por primera vez, sentí rozar esos suaves y deliciosos labios de ella, era un momento que quedaría marcado de por vida en mi ser, un beso el cual fue apasionante, bello e indescriptible;

al acabar, suavemente cojí su rostro para poder verla por última vez y le pregunté:

-¿porque me haces esto?-

E:-porque siempre quise hacer esto-

en esa hora Elísabet me acompañó hasta que entrara el avión, fue doloroso, muy doloroso  pero quería disfrutarla la última hora que estaría con ella.

El tiempo se pasó rápido, la despedida fue aniquilante, nos dimos el último beso, un beso agridulce, pero mas amargo que dulce, Entré al avión y mientras despegaba sentía como media parte de mí, se fue con ella, fue desgarrador.

Las cosas no siempre salen como uno quiere y el dolor es parte de nuestras vidas, La vida es como un piano, Las teclas blancas son los momentos felices y las teclas negras los momentos de dolor, pero al final se necesitaran de ambas para hacer música, ¿acaso Querían un final feliz? nunca les prometí que sería así.

ElísabetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora