Cámara Secreta

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Los merodeadores caminaban por un pasillo desolado escuchando al castaño licántropo hablar sobre las tantas flores que se encuentran en el bosque prohibido.

—Hay desde Sanguinaria hasta Acónito

—Y te nos vas alejando de esa área—. Ordenó Sirius al girar hacia el pasillo derecho.

—¿Porque?

El Acónito y tu ni de diez metros de distancia—. Ordenó James, seguido por el asentimiento de parte de Peter y Sirius.

Aburridos—. Susurró empezando una pequeña rabieta.

—Más bien rasonables

—Inteligentes

—Increibles

—Guapos

—Encantadores

—No se les olvide lo patéticos—. Interrumpio Lucius a Peter, al posarse frente estos.

—Con excepciones claro—. Hablo Barty colocando su codo en el hombro del platinado.

—¿A qué viene su interrupción?

—Nada que ver contigo Black, en cambio con Potter si—. Contestó Barty, al ver a Lucius perdido en Remus cero disimulado si le preguntan a el, y dicen que es despistado.

—¿Con-migo?—. Separo sin dar crédito a lo dicho.

—Si, verás, hay un gran y molesto problema en nuestra sala común—. Explico Barty, antes de que Remus les golpeara a los dos junto a el.

—¡No fue nuestra culpa!—. Contestaron los tres, al terminar Remus giro hacia ellos con una interrogante plasmada en su cara.

—Queremos, no. Te ordeno que hables con Riddle—. Hablo al fin Lucius posandose frente al castaño de cabello rebelde, doblando un poco su cuello para juntar miradas.

—¡¿Y crees que no he querido hacer?!

—No me interesa si has querido o no hacerlo pero en este momento vas a ir a hablar con el—. Ordenó antes de caminar hacia el final del pasillo pasando de largo a Black y Pettigrew, sonriendo un poco a Remus antes de perderse al doblar el pasillo hacia la izquierda.

—Potter, yo no te obligaré a hacerlo, pero si nos harías un gran favor, Tom está con el carácter peor que a cuando Cissa se le mancha una blusa blanca.

—Lo he intentado Crouch, y no me hace caso, me cansé de rogarle.

—¿Le quieres gritar, insultar?, Porque tengo el lugar perfecto, ven acá, acércate—. Sonrió recargado en el barrandal viendo por encima de su hombro las escaleras moverse.

¿Me acerco?

Estoy seguro que Crouch no te hará nada—. Aseguro Remus.

—¡Y si te hace algo lo golpearé!—. Amenazó en voz alta Sirius, ocasionado que Barty girara los ojos con diversión.

—Te vemos en herbolaria le inventaremos a McGonagall que ocurrió algo—. Apoyo Peter.

—De acuerdo—. James vio a sus amigos marcharse por dónde anteriormente se había ido Malfoy—. ¿Y, para que soy bueno Crouch?

—Lo repetiré una sola vez, ¿Estás de acuerdo?

Seh

—Baños de niñas, tercer piso—. James se sorprendió por la autoridad con la que hablo Barty, y más sorprendido al ver el radical cambio en sus facciones—. Nos vemos en el comedor, ¡Suerte!

Gracias—. James se dudaba, ¿El baño de niñas?, Se iba a ver cómo un pervertido, pero, si Tom está ahí, alto ¿Que carajos hacia Tom en un baño de niñas?, Fue más un arranque que decisión de James de ir hacia las habitaciones, tomar el mapa del merodeador y la capa de invisibilidad para ir hacia los baños.

Al llegar se le fue toda la decisión con la que había llegado, soltó un suspiro derrotado, no, no podía. Cuando estaba dispuesto a girar y irse, se sorprendió de ver a una pelirroja frente a el.

—Alecto Carrow, un gusto conocerte, espero volver a verte—. Sonrió, mientras lo empujaba hacia adentro del baño, guiñando el ojo antes de cerrar las puertas de golpe, antes de lo que James pudo decir Alohamora una voz se colo en el silencio del salón.

—James Potter, ¿Cómo te escuentras?—. Sonrió Bellatrix Black, rodeando a paso sensual los lavamanos.

—Black, Aah, no entiendo que están haciendo pero me largo—. Rodo los ojos al girar para intentar lanzar de nuevo el hechizo pero freno al escuchar un extraño murmuró de la azabache, al girar se topo con la Black señalando con su fina mano el ahora hueco entre los lavamanos.

»¿Que carajos?—. Sus ojos no se creían lo que miraban, ¿Había un pasadizo subterráneo y el no lo sabía?

Fai un buon viaggio—. Lo último que vio James antes de caer, fue a tres siluetas de damas, viendo hacia el, antes de perderlas de vista.

»—¿No va a salir lastimado cierto?—. Se preocupo Lía, aunque había disfrutado lanzar a Potter de ahí, porque se lo debía, tembien cabía la posibilidad que Tom la asesinara.

—Ante todo, yo no lo lance—. Aclaró Alecto, no quería problemas con Riddle, ese carnal enojado daba miedo.

—Aaah, hay una posibilidad que se lastime—. Bella, mordió levemente su labio inferior pensando—. Nos la debe—. Justifico—. Y si a Riddle se le pone ponerse salvaje, Malfoy me deba algo—. Sonrió inocente antes de irse.

—Ya no quiero deberte algo a Malfoy—. Hizo rabieta Alecto.

—Es deberle algo a Lucius o que Tom nos mate, por muncho prefiero a mi rubio

SILENCIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora