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Ya estaba oscureciendo.
En la casa de Varian estaban terminando de recojer los pedazos de techo vidrios rotos.
Sacaron la mesa rota con cuidado de que sus manos no tocaran todo lo que estaba esparcido en ella.
Cuando terminaron reacomodaron todas las cosas que se habían caído por el terremoto.
Estaban todos muy cansados. No pensaron que arreglar todo eso les llevaría toda esa tarde, y aún faltaba reparar el techo.
Cuando dejaron todo en orden Quirin le ofreció algo de beber a Eugene y le preguntó si no quería quedarse a cenar.

-Realmente aprecio la propuesta señor, pero lamento tener que negarme, necesito regresar al castillo a ver si Rapunzel necesita mi ayuda-

-Está seguro capitán?-

-Estoy seguro, gracias, lamento todo esto Quirin. Despida a Varian de mi parte. Mañana vendré temprano para terminar de reparar el techo. Que tenga buena noche.-

-Gracias, igualmente alteza-

Así se despidieron Eugene y Quirin.
Eugene se fue rumbo al castillo mientras Quirin cerraba la puerta.
Estaba intentando pensar en lo que estaba pasando.

Empezó a poner la mesa para cenar con su hijo. Por todos los contratiempos, la cena sería simple esa noche.

-Varian! Baja a cenar!-

Gritó Quirin para llamar su atención. Era raro, normalmente solía responderle de inmediato, pero tuvo que llamarle una segunda vez, una tercera y una cuarta.

Varian! La cena!

Finalmente recibió una respuesta.

-No tengo hambre, papá!-

Pudo escucharse desde su habitación.

Varian estaba bastante enojado y no tenía ganas de hacer nada.
No solo estaba confundido si no que obtuvo un día de trabajo extra de la nada.
Nadie era el culpable de eso, pero no quería que su padre lo viera tan molesto.
Quirin se quedó viendo en dirección al cuarto de Varian, bajó la mirada y empezó a comer solo.

Mientras tanto en el castillo, danielle y Rapunzel seguían en la habitación.

Danielle volvió a guardar sus cosas dentro del saco y caminaba con él a todas partes.
Rapunzel le había pedido a Nigel que buscará un espacio libre para ella  que fuera reconfortante cómo un abrazo y estaba esperando una respuesta.
Debido a las rocas negras y su desaparición el orfanato se había destruido, al igual de muchas de las casas de gente del pueblo y viejo Corona que habían adaptado las construcciones a las rocas.
Así que el espacio en el castillo era limitado.
Incluso empezaron a poner colchones en las bodegas y el sótano.

Mientras ella intentaba distraerse, y aclarar su mente, danielle estaba deambulando por toda la habitación hasta que se paró frente a un espejo e hizo un sonido de impresión.

Su cabello estaba completamente quemado. Había pasado por tantas cosas ese día que ni siquiera lo notó a pesar de ser algo muy obvio.

Se acercó al espejo y comenzó a tocarlo.
Tenía una textura terrible, unas partes estaban tan quemadas que al tocarse se cayeron, otras estaban pegajosas y el resto era similar a tocar una cuerda desgastada.

Rapunzel la vió algo angustiada y se acercó a ella.

-No está tan mal, descuida, estoy segura de que se puede arreglar.-

Rapunzel no creía ni sus propias palabras, mientras Pascal confirmaba que se veía muy mal con una expresión en su cara.

-Un cepillo normal lo dejará bien-
Raps fingió no ver a danielle y Pascal levantar una ceja y sacó un cepillo de su tocador.
Ese cepillo había podido con 25 metros de cabello, Rapunzel lo consideraba mágico.

Mientras danielle se cepillaba tocaron la puerta.
Era Nigel.

-Oh Nigel! Que bueno que llegas! Realmente necesito buenas noticias ahora-

Me temo que no hay tan buenas noticias como las espera alteza.
He ido a cada habitación disponible en el castillo y me temo que no hay un lugar con las características que pidió.

Rapunzel solo se preguntó si algo más podría empeorar.

Está bien Nigel, gracias por tu esfuerzo.

Rapunzel ya no podía ocultar que se sentía cansada y algo desesperada.

Nigel notó eso y continuó:

-Pero, hay varios espacios disponibles en la bodega y el sótano majestad, solamente que hay varias familias ahí y mujeres en avanzado estado de embarazo.
Pero estoy seguro de que le darán un lugar.
Quiere que lleve a la niña ahí?-

Rapunzel se quedó pensando, por un lado eso solucionaba el problema del alojamiento, pero por otro no quería limitar aún más a esas familias y tampoco creía que danielle querría estar con una multitud que no conocía.
La volteó a ver y vió como se ponía nerviosa de nuevo por pensar que la enviaría ahí.

-Qué hay si se queda con alguna dama de compañía?-

Preguntó Rapunzel con la poca esperanza que le quedaba.

-Alteza, ya sabe que hay reglas que protegen la privacidad del personal del castillo, lamento decirle que no es una opción valida.-

Rapunzel volvió a ver a danielle y dijo:

-Gracias Nigel, pero creo que, yo la alojaré por mi cuenta.-

-Está segura majestad?-

Rapunzel asintió con la cabeza.

-Está bien, en ese caso, que tenga buena noche.-

Estas fueron las palabras finales de Nigel antes de irse.

-Igualmente Nigel-

Danielle se sintió aliviada de no tener que ir con el resto de personas.

-Gracias princesa-

-No hay problema danielle-

Dijo Raps con una sonrisa, pero con la misma mirada cansada. De igual manera, no dejaba de ser atenta.

-Hey, se que podría arreglar ese cabello, un buen baño, estás un poco sucia, quieres limpiarte?-

-Me.. serviría mucho, gracias-

Genial! Se que te hará sentir mejor, además, estamos usando el agua a corriente, un gran crédito de Corona.

Esto último lo dijo con una voz algo graciosa que hizo que danielle se riera.

let's dare to dream (español ;>)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora