...All Starts With You... -Manuel Ríos-

-Capítulo 38-

Pov T/n

Por fin íbamos a salir del hospital. Faltaba firmar la hoja para que nos dieran de alta. La nena estaba bien y yo casi recuperada del todo. Por lo tanto yo y Manuel estábamos super felices de volver a casa con nuestra pequeña.

Manu: Bueno ya he acabado de empacar lo que quedaba -dijo sonriendo- Nos iremos a casa en unos momentos.

T/n: Por fin! -dije aliviada- Estuve cómoda aquí pero echo de menos mi casa.

Manu: Me imagino amor. -dejo un beso en mi frente- Voy a ver si ya tienen listo el papel para firmar el alta ¿ok?

T/n: Ok, ve tranquilo -dije sonriendo mientras sostenía a Aria-

Después de unos minutos vinieron, firmamos el alta y nos fuimos a casa. El viaje a casa fue un poco ruidoso ya que Aria se la pasó llorando. Era la primera vez que iba en coche así que me imagine que era normal y que se acostumbraría.

Al llegar a casa lo primero que hice fue subir al cuarto y darle pecho a Aria ya que estaba hambrienta. Mientras yo me ocupaba que Aria comiera bien Manu instalo la cuna en nuestra habitación y trajo lo necesario para ella. De momento ella estaría con nosotros hasta que creciera un poco y pudiera estar en su habitación.

Finalmente dejamos a Aria durmiendo en su nueva cuna y nos relajamos un poco. Así que nos metimos a bañar por turnos para ir vigilando a la bebé. Luego al acabar estuve ordenando todo para tener a mano todo. Seguidamente encendí el monitor para la bebé y bajamos a comer algo al la cocina. La teníamos vigilada desde el monitor para bebés. Esta seguía durmiendo, el camino a casa fue muy ajetreado para ella.

Manu: Vamos a comer. Luego subimos con ella. Aprovechemos mientras duerme. -dijo sonriendo- Esto de tener un bebé es más agotador de lo que pensaba.

T/n: Que lo sepas, no es nada fácil. Pero es lo más bonito que nos ha ocurrido, nuestra familia esta completa ahora ¿no? -sonreí-

Manu: Si, la verdad la amo tanto -dijo mirando el monitor y viéndola dormir-

Finalmente pudimos comer y conversar los dos a solas. Tuvimos algo de tiempo juntos, realmente lo echábamos de menos.

Al acabar todas las cosas subimos rápidamente arriba con la nena. Ya estaba anocheciendo así que íbamos a descansar.

Al entrar a la habitación la nena seguía durmiendo.

Manu: Ella sigue durmiendo, porque no aprovechamos y nos quedamos juntos -dijo abrazándome por detrás-

T/n: Uy que dualidad que tienes a veces -dije sonriendo-

Manu: Puede ser, pero te echaba de menos la verdad. Echaba de menos que estuviéramos en casa como antes.

T/n: Realmente yo también -dije girándome para darle un beso-

Mientras nos estábamos besando Aria comenzó a llorar interrumpiéndonos y haciéndonos reír de lo ocurrido.

Manu: Pues para otro día quedará -ríe- Ni besitos podemos darnos ahora -sigue riendo-

T/n: Que esperabas -dije riendo también-

Manu: Que pasa Aria, ahora viene papá a cogerte. Ven aquí princesita. -dijo para cogerla en brazos- Porque lloras tanto ¿eh? Eres preciosa cuando sonríes. A papá no le gusta que llores. -dijo para besar su manita-

Esta le dio una pequeña sonrisita pero se quedo mirándole atentamente. Se ve que le gusta estar con su papá.

Justo en ese momento el móvil de Manu sonó. Así que cogí yo a Aria en brazos y él contestó.