Os doy la bienvenida a este círculo donde se le rinde culto a la verdad,
sí... una reminiscencia de todo lo que ha rechazado la sociedad actual,
aquellos que han abandonado su lado espiritual; para ser únicamente
leales a los instintos más superficiales de su humanidad y, es que...
¡Fácil es no luchar!, relajarse y dejarte llevar por la marabunta popular,
ahí donde la fama no significa talento, y la poesía ya no es un referente
de culto he intelecto como lo fue en los viejos tiempos; pues en efecto,
yo vengo representando todo lo que niegan y mantienen en la sombra
del pensamiento, lo cual es un concepto que claramente no entienden;
pero, ¿quiénes?, los buenos poetas, herederos del sofisma de la Grecia.
Verán... es cierto que he vivido lo suficiente entre letras y,
a la luz de la luna llena, para ser consagrado como bestia
por los malditos; hoy promuevo aquel placer por el pecado:
no al castigo, y es que mis delirios como poeta, ya no son
los mismos; pues... ahora condeno a las almas por todo, sí,
pero por todo aquello que nunca han sido; ¡y sí... ya lo sé!:
Yo también me enamoré: fui joven,
vendido a los vicios, por ocio vague;
ebrio... sin ningún gesto de vergüenza.
Y así llegue a esa fría lluvia de marzo,
sí, la que atravesó el sol de mi mirada;
apago los goces que proceden del alma
matando todo el ímpetu de mi espíritu.
Me sumergí en un profundo odio,
el que le dio al reflejo de mis ojos,
ese brillo tan voraz de la luna llena.
Desde entonces he estado navegando
por la larga noche, siempre buscando
las sombras que abrasen a mi corazón,
y sanen las heridas; que dejo el amor.
Por eso, es que mis letras no se prostituyen, no;
ya no están hechas para el ojo alegre, no generan
un público a mi alrededor que me bese los pies y,
me llene de laureles: sé que tú no lo puedes ver...
Pero ambos vamos al sentido opuesto del mismo camino,
en esta esfera poética, si es que logras avanzar suficiente;
estarás topándote de frente conmigo: todo tiene un ciclo y,
si aún no has entendido, soy símbolo del amor corrompido.
Hoy los mejores versos que escribo son solamente para mí,
repletos con la sinceridad que a las musas lastima en el oído,
pues el poeta entrega flores hasta que se convierte en Narciso
y sólo buscara inspiración; hasta que se encuentre a sí mismo.
Sí, tú puedes pensar que lo mío es puro egoísmo y...
lo siento, pero yo no puedo aceptar ser codependiente;
para tratar de entender el gran enigma de tus estupideces.
Sé que muchos populistas me temen, no quieren leerme,
porque mis versos son los portadores del ¨Arjé¨ maldito;
que actúa como un virus en lo profundo de sus mentes...
Y ellos, no quieren revelarse contra los dioses:
no, no tienen, ni cumplen con esas condiciones;
al leer sus temas puedo darme cuenta, de que:
¡Solamente quieren fama, quieren ventas!
y por eso sus letras son tan comerciales:
simples, sin filosofía ni blasfemias: ¿ves?.
Bien... déjame decirte, que hoy en nuestros días, su poesía;
la hace cualquiera, eso de andar usando títulos amarillistas
para atraer a la audiencia, proyectando imágenes de lujuria
para niñas quinceañeras, que ellos sigan hablando de amor
que yo estoy dando guerra; tengo ideales que debo levantar
como si fueran mi bandera, pero ellos solamente aparentan:
¿Porque no lo aceptan?
Tienen complejos de falso profeta, pues seguro creen
que sus letras tienen el poder de mover conciencias,
pero es un simple sueño del que no quieren despertar:
entiendan, el poder de las palabras es para los Ascetas.
Ellos más bien son otro pastor que guía a sus ovejas,
y de entre ellas creían que yo era la negra, pero no...
pues hasta que reconocieron al lobo que ahora está
hablándoles de frente; se dieron cuenta, que mi arte,
hacen de su existencia una moraleja; pero descuida:
Es muy probable, que eso... tampoco lo entiendan.
ESTÁS LEYENDO
Mimetismo nocturno.
PoesíaHe pedido misericordia; si, pero no del día, sino de la larga noche: ¿y porque?; pues, es en la oscuridad, donde las sombras abrasan la luz purpurea que emana de mi alma; misma que el resplandor del alba sofoca, y después simplemente rechaza... To...