Enrollada en sus piernas, varias lágrimas se asomaban por sus párpados dando a ver lo asustada que se encontraba, respecto a lo que estaba apunto de hacer con su vida.Simplemente estaba asustada y indecisa, algo normal en ella la cual pensaba las cosas muy rápido y no las procesaba hasta el momento clímax de la historia.Recostando la espalda al borde de su cama reclamaba la presencia de alguno de sus familiares con la mente, no los aprecio ni tuvo en cuenta su gran importancia en la vida, y ahora estaba pagando las consecuencias.
¿Qué iba a pasar?
Esa pregunta saciaba un hambre de respuesta cortantes e injustificables en su mente portadora del fatalismo pronunciado que le podría promover esta situación, quizás moriría y nunca volvería nada, no vivió lo suficiente y dejaría de existir siendo una cobarde, pero si ganaba, nada bueno tampoco podría traer, pues era imposible.
—¿Ya paraste con tus pensamientos pesimistas de lo que piensas que va a pasar cuando te subas a esa escalera?Y lo más importante,¿Acaso sabes qué es lo que vas hacer?—Silvia preguntó desde el otro lado de la habitación.
Esta misma agarraría una lata de gaseosa y se la alcanzó desinteresadamente a Melani, la contraria respondería tomándola con su mano temblorosa, tanto que siquiera podía abrir la lata siendo Silvia al final quien se le abrió.
—Me... Me pasa algo extraño..—informó Melani tomando un trago de la gaseosa.
—¿Se puede saber que?
A la derecha de la habitación el póster de BTS hizo un poco de ruido debido al aire que había, y como si tuviera un sexto sentido al pendiente de los pequeños detalles, Melani dirigió su mano inconscientemente a esa dirección tumbando sin saber cómo el poster.
—E- eso...
—Mmm,dejaré que lo descubras sola,por ahora toma esto.Por cierto debes tener algo en cuenta, en este lugar el dolor es tres veces peor que en el mundo normal, solo te digo.
—Por eso cuando me corte el pelo me dolió tanto.—dedujo sola.
—Mira.—Silvia llamó su atención nuevamente
Del bolsillo presente en su prenda dio a ver una máscara, pero no era cualquiera, era la misma a la cual Melani fue atraída en la perfumería de Atenea y con la que sintió una gran atracción.
—D... ¿De donde la sacaste?
—¿Acaso eso importa?—sonriendo se la pasó.
Temblorosa agarró el objeto y miró el interior de esta antes de ponérsela, un brillo absolutamente impersectible se hizo presente allí, y sin más que mirar levantó la vista.
—Vamos allá.
Ambas salieron de la habitación en dirección a donde se iba a llevar a cabo aquella actividad, pudieron saber la ubicación por la multitud visible a lo lejos, y una vez llegaron Melani vio cara a cara a May enfrente a la aglomeración de adolescentes por ver.
—Viniste,pensé que te habías acobardado.—se burló la pelinegra.
—No soy una cobarde.—le respondió.
—Bueno,que ma-
A May se le agarraría del brazo una pequeña chica, a pesar de tener la misma edad de los otros en el sitio,le faltaba un pie y era pequeña.
—Por favor señora May, no permita que mi primo suba allí, es lo único que me queda aquí,por favor.—Pidió clemencia con ojos llorozos.
—Su hermano eligió ese camino, yo no soy quien para cambiar ese pensamiento.—le respondió mientras la ayudaba a incorporarse.
—Pero... Él..
Melani presenciando eso apretó su puño y camino al frente, lista para presentarse allí, no sin antes colocarse la máscara captando completamente la atención May.
—¿Acaso esto es una fiesta de disfraces para ti?—recriminó.
—Jodete.—Le sacó el dedo del medio para al instante ser transportada a las escaleras.
Como un pequeño desmayo abrió los ojos parada arriba de los escalones, y a su lado muchos chicos listos para morir, sin embargo que triste para ellos que se los iba a impedir.
May miraba desde su posición a quien había mandado a librarse de Melani, el tipo también la miró y se daría cuenta de su presa pues era la única entre los demás que llevaba una máscara.
Llega el momento que cae una gota de sudor,marcando el principio y empezaron a apretarse todos.Una presión intensa recorrió cada lateral del cuerpo de la azabache, si esto continuaba así iba a ser afixiada entre tanto calor corporal.
—¡¡Saquense!!
Abriendo los brazos, la chica impidió ser expremida por tantos cuerpos, y al revés a todos repartió par de puñetazos a quienes estaban participando, al estar en una escalera debía mantener constantemente el equilibrio esperando lo caerse de uno, dos y así hasta el último escalón, era un lugar raro, una pirámide invertida y que al final de los escalones un agujero podría tragarse el alma de un ser humano con tan solo mirarlos fijamente, algunos empezaban a agonizar ya, pero ella misma se juró salvar a todos, nadie iba a morir si ella estaba allí, ese pensamiento de héroe fue inculcado por alguien especial, y no iba a cesar en su meta, por tanto su objetivo era noquearlos a todos, haciendo que ninguno pudiera caer.
Dentro de un abismo irreflexivo,
Con mucho más que perder que de ganar,
Buscando un camino de progreso,
Y unos golpes bien derechos,
En los que buscaba la ventaja por la cual debía avanzar.
Bajando un escalón con su codo impacto sobre la espalda de uno logrando desmayarlo y apoyándose en la misma del inconsciente dio una patada a su izquierda derrumbando la gran ilera de chicos a ese lado en concreto.
—Que poca estabilidad tienen.—Comentó al ver lo débil que eran muchos allí,y aún en esas ,querían suicidarse.
Un ambiente deprimente,
Su ser inconsciente, estaba realmente fuerte e inerte sin saber bien que es lo verdadero, debía realizar para al final, cambiar el curso de este lugar repleto de muerte, debe obtener el título y alzarse como el ser benevolente que pondría fin al curso infinitivo que a este hormiguero opacaba constantemente.De la nada una punzada interrumpió los movimientos que ejercía contra los rivales y esquivaria nueva e inconscientemente un puñalada que venía a su espalda.
—¿Qué mierda?—Se incorporó a su posición viendo a la misma persona que masacro a Frank,enfrente de ella.
—Al fin te veo.—apuntó aquel con un cuchillo.
—Acaso esto es un ¿Veo veo?—Se burló.
—Te voy a quitar lo chistoso de una puñalada.—Se abalanza contra ella.
Arqueando su cuerpo completamente hacia atrás ,dios varías vueltas mortales y cayó sobre sus pies agachada esperando al atacante.
—Yo no voy a morir aquí...
Un calor impaciente en el pedestal,
Postrado como el umbral de personas peleando alrededor,
No existía un sol en la zona,
Más bien el insoportable ardor que en su corazón se aploma.Hablando como siempre de más, recibió un gran entroncazo por la espalda de parte de otro de los parcipantes, la estaban rodeando todos, pensando que ella también los iba a matar como ya era costumbre, obviamente se estaban confundiendo, pero quien no pensaría de esa manera cuando esta apunto de ser asesinado o apunto de matarse.
—Ahg... No me van a vencer,aún no.—Con ese dolor empotrado en su espalda, trataba de salir de ese rodeo tan peligroso.
Era raro que nadie haya usado algún poder en su contra, siendo sincera eso era suerte, pero debía haber una razón más allá en específico.
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El hormiguero
Teen FictionUna adolescente es trasladada en un nuevo estilo de vida donde arriesgara su propia existencia y humanidad con tal de volver a ser como antes.