Amanda Red

Capítulo 15

Un nuevo plan surgió, y lo primero que hice fue tomar el viejo pizarrón de mi papá, el cual utilizaba para diseñar sus proyectos. Esto agregaba un valor sentimental muy fuerte, porque de alguna forma sentiría que estaba apoyándome. Comencé a escribir todas las cosas que podrían incriminar a Almendra, también agregué las muertes de Mauro y Siena. Presentía que esa era la clave de todo, si resolvía sus crímenes terminaría con Bermellón. Flavio también formaba parte de la ecuación, desde mi punto de vista compartía cierto grado de complicidad; no era mi objetivo, pero me gustaría que pagara por sus actos. Solo tenía que cuidarme, mas no centrarme en él, porque al final de todo, sería  parte de la consecuencia del efecto domino.   Analicé cada uno de los hechos y comprendí que las redes sociales tendrían gran importancia. Por un tiempo me mantuve alejada, sin embargo, esta vez se convertirían en mis más fuertes aliadas. 

Encendí mi laptop y eché un vistazo a los perfiles de Almendra y Flavio, fue decepcionante no encontrar nada en su contra. Bermellón solo compartía temas de motivación y cultura, además, tomó gran popularidad con su papel de víctima después del encuentro que tuvimos. La publicación que tenía mayor interacción era justo en la que contaba su versión de los hechos. Por un momento pensé en hacer lo mismo, pero al final esperé un poco, consideré que todavía no era el momento. Si deseaba sabotear su imagen tendría que ser más inteligente. Flavio solo publicaba su día a día en un perfil lleno de pretensiones en el que presumía todo lo bueno que le pasaba y después del juicio tomó gran popularidad. 
Me cuestioné sobre la posibilidad de tener éxito, el panorama no era nada alentador. Parecía casi imposible dañar su imagen, y yo no tenía ni la menor idea de cómo mejorar la mía.

Otro tema que preocupaba era como iba a ocultar todo esto, nadie podía saber mis planes, ni siquiera mi madre. El pizarrón por si solo ya llamaba demasiado la atención, así que lo oculté en mi armario. Le puse pausa a mi investigación porque, de alguna forma, mi avance estaba truncado.

El desánimo se hizo presente. Dudé en continuar. Me tiré a la cama y lancé varios suspiros. Quería que todo se solucionara de un día a otro, pero eso era imposible, y más estando sola. Necesitaba un aliado, sin embargo, nadie odiaba a Almendra tanto como yo, incluso yo tenía más enemigos que ella. Con mi credibilidad por los suelos parecía imposible tener éxito con un plan lleno de ilusiones y cero realista.
En un acto de desesperación saqué nuevamente el pizarrón y me dispuse a borrar todo lo que había escrito. Justo en ese momento sonó la alerta de un correo electrónico. No había una razón por lo cual recibirlo, además, era un cuenta que utilizaba exclusivamente para la universidad. Dejé de darle vueltas a la situación y me dispuse a revisarlo.

De: Cuenta desconocida
Para: Amanda Red

No me voy a presentar porque no es necesario. Antes de que decidas bloquearme, solo quiero decirte que me necesitas. Si quieres continuar, solo responde este correo, de lo contrario seguirás sola. No tardes.

¿Será verdad que muchas veces atraemos lo que necesitamos o el destino solo es una broma macabra? Esto estaba demasiado raro, pero qué más podía perder. El miedo y la desconfianza eran inevitables, aun así decidí responder.

De: Amanda Red
Para: Cuenta desconocida

De momento no me interesa saber quién eres. Solo dime cómo me puedes ayudar.

Traté de imitar su frialdad, consideré que era bueno manejarnos desde un principio en un mismo canal de comunicación. No mostré las ansias de saber quién estaba detrás del ordenador, ya habría tiempo para investigarlo.

De: Cuenta desconocida
Para: Amanda Red

Conozco el odio que tienes en contra de Almendra Bermellón y Flavio Malva. Hasta cierto punto, lo comparto. Yo puedo conseguir información que puedes utilizar en su contra y te la puedo compartir por este medio. Solo responde, en el siguiente correo, si aceptas, no necesito más palabras por el momento. Si tu respuesta es afirmativa te contactaré más adelante.