𝓪 𝓽𝓻𝓪𝓿é𝓼 𝓭𝓮 𝓵𝓸𝓼 𝓻𝓮𝓬𝓾𝓮𝓻𝓭𝓸𝓼

5.

Punto de vista de Mei:
Ya casi era la hora de la fiesta, enserio, no tenia ganas de hacer nada, yo solo quería dormir y mi hermano no me dejaba, que asco le tenia en estos momentos.
-Canija, deja de quejarte y ayúdame con esto.- Tendrá cara, encima de que la idea había sido suya, tenia yo que ayudar a prepararlo todo, no mi querido Luke, hoy no. -¿Qué haces? ¡vamos!
-Mi querido Luke, si te piensas que te voy a ayudar en tu entupida fiesta lo
llevas claro. -Con las mismas me giré y me fui para el piso de arriba, no iba a soportar a un millón de personas borrachas en mi salón.
-Mei, ni se te predijo subir por esas escaleras, baja ahora mismo.- Yo tan solo le saque el dedo, con eso le había dejado más que claro que por esta vez no le haría caso, y menos sabiendo que es por una fiesta .
-Eres imbécil Smith. -Poco después de eso alcance a oír el sonido del timbre, menos mal que ya había llegado a mi habitación, si no le mataba ahí mismo.
-Pasad todos, estáis en vuestra casa. - Vale lo admito, soy una maldita cotilla, pero es que me podía la curiosidad.
Punto de vista de Rhys:
-Rhys, ¡vámonos!. - Mi hermana chillaba como loca desde el piso de abajo, estaba ella más nerviosa que yo, y ya era decir, porque lo nervioso que estaba no era ni medio normal.
-¡Ya bajo! - No podía con las prisas, lo odiaba demasiado.
-¿Lleváis todo los dos? - Pegunto por quinta vez mi madre, la que realmente estaba nerviosa era ella, y no iba en bromas.
-Que siii- Contestamos al unísono Bethany y yo, no me podía crear que mi madre a estas alturas de la vida no se fiara de nosotros.
Venid aquí. - Hizo un gesto con las manos para que nos acercáramos. Creo que quería un abrazo de ambos. - ¡Mis niños! - Nos apretujó a los dos junto a ella, era bastante incómodo el estar tan cerca de mi hermana, y más cuando toda la noche la iba a tener cerca mía, porque de normal cuando terminábamos de cenar, o bien yo me iba a mi cuarto y ella al suyo, o yo me quedé en el salón viendo la tele y ella a se subía a su cuarto.
-Basta mamá. - Se quejó mi hermana, y la verdad es que lo agradeció bastante, porque después de eso mi madre nos soltó a ambos.
-Iros, que me vais a hacer llorar.- Ya se estaba poniendo bastante dramático, cosa que no me gustó nada.
-Mama, nos vamos a la casa de en frente, no a la otra punta del pueblo. - Le tuve que frenar un poco su estrés, porque si no al final me iba a amargar la noche, y ni si quisiera había comenzado.
-Bueno, a las dos como muy tarde os quiero aquí, ni una hora más os dejo. - Ya se puso firme y marcó la hora de llegada, no estaba mal para ser la primera vez que saldría yo solo, bueno "solo".
-¡Pero mamá!- Se quejó mi hermana, no podía callarse nunca, siempre tenía que poner alguna queja, si no, no era ella.
-No hay peros, esto es lo que hay, a la próxima ya veremos, bueno, si es que hay próxima.
-Tranquila mamá, a las dos estaremos aquí ambos, ya me ocupo yo. -Porque si se tenia que ocupar Bethany, no llegábamos hasta el día siguiente.
-¿Os vais ya? - Mi padre bajo del piso de arriba, la verdad es que estaba mejor donde estaba, porque para decir chorradas. -Portaros bien, no volváis muy tarde. - Apestaba a alcohol, yo seguía sin entender el porqué mi madre seguía con el.
-Vámonos Rhys. - Me cogió del brazo mi hermana, había una sola explicación de ello, y era porque ahora mi padre empezaría a gritar a mi madre, como de costumbre, cosa a la que ya estaban acostumbrados tanto yo como Bethany, pero no era agradable el verlo y mucho menos el escucharlo.
Nada más salir de casa, mis amigos y los de Bethany nos esperaban para ir todos juntos hacia la fiesta, aunque a mi me seguía pareciendo una chorrada el que no esperasen en mi casa, porque total, al fin y al cabo acabaríamos todos en la casa de enfrente, a si que era chorrada, pero bueno, mi hermana había decidido ya así las cosas, y cualquiera la llevaba la contraria.
-Rhys. - Me llamó mi hermana antes de alcanzar a los chicos.
-¿Que pasa? - Sabia que me diría algo como: "No te me acerques mucho en toda la fiesta" o "Que no se note que eres mi hermano" Pero bueno, que se le iba a hacer, ella estaba a mi cargo ahora mismo.
-Quiero a ti ya tus amigos lejos de mi esta noche, espero que no nos crucemos, porque si no, no te llevaré nunca mas a ningún sitio, ¿estamos?- Sabia que me diría eso, era muy mandona en ese sentido, pero oye, yo tampoco quería tenerla cerca durante la noche, a si que saliéramos ganando los dos.
-Lo que tú quieras, pero no creo que mamá te deje salir más veces sola sin mi.- Me encogí de hombros y con las mismas me fui donde mis amigos, tampoco me iba a poner a discutir con ella ahora, no era plan.
-¡Eres un imbécil!
Punto de vista de Mei:
Había comenzado la fiesta tan solo hacía unos minutos y ya estaba hasta los huevos, no podía más, quería a todo el mundo fuera de mi casa, ¿tanto pedir era?
-*Toc toc*- Alguien llamó a la puerta, supuse que era mi hermano, tampoco creo que el bobo de mi Luke dejara subir a cualquiera al piso de arriba, aunque ya con lo de la fiesta, me esperaba cualquier cosa, y no buena precisamente. - ¿El baño?
-La siguiente puerta.- No me digne ni a mirar quién era esa persona, solo iba buscando el baño, a si que tampoco hacía falta mucho más.
-¿Mei?- Esa voz me resultó familiar, pero era curioso, ya que solo me pareció a la hora de nombrar mi nombre, hasta entonces. no me lo había parecido.
Con las mimas, levante un poco la cabeza y ahí se encontró.
-¿No-Noah?- Estaba paralizada, no me podía creer lo que mis ojos estaban viendo.
Este tan solo camino hacia mi para sentarse a mi lado, y yo con las mismas le abracé, no sabias las ganas que tenia de que este momento llegara, por fin me reencontré con mi mejor amigo, y encima en la estúpida fiesta de mi hermano , esto si que no me lo esperaba.
-¿Que haces aquí?- Pregunto confuso, lo comprendo, podría haberle avisado de que había vuelto, pero por la vergüenza no lo hice.
-Volvimos hace un par de semanas mi hermano y yo.- Sonreí lo más que pude, enserio, no podía dejar de abrazarlo y sonreírle.
-¿Por qué no avisaste?
-No se, supongo que me dio vergüenza..- Supones no Mei, te dio vergüenza.- Lo siento.
-No te disculpes, son cosas que pasan, pero ¿vergüenza de que? Somos mejores amigos de siempre, ¿no?- Tenía razón, fui una estúpida de no decir nada, y ahora me sentí mal, muy mal a ser verdad.
Con las mismas le volví a abrazar, no podía ni hablar de la vergüenza que estaba pasando, y eso que él era mi mejor amigo, no me quería ni imaginar si me llegase a ver con los demás, y sobre todo con Rhys.
-Bueno, yo me tengo que ir ya, me esperan abajo.- No quería que se fuera, pero tampoco podía pretender que se quedara aquí sabiendo que tenía una gente esperándole en la fiesta.
-Esta bien, ve.- Enserio, nunca llegue a pensar que mi rencuentro con mi mejor amigo fuera a ser así, en la fiesta de mi hermano.- ¿Puedo preguntar algo?- Me podía la curiosidad de saber si estaba aquí Rhys Anderson , porque si Noah estaba aquí, todos los demás también estarían.
-Claro dime.- Estaba muy nerviosa, no sabia si de verdad quería preguntárselo.
-¿Me echaste de menos?- ¿Por qué le pregunté otra cosa? Fácil, no estaba del todo preparado para saber de Rhys.
-Claro que te eche de menos, nunca perdí la esperanza de que volvieras a FieldHiss-Tuve que evitar las ganas de llorar, porque aunque fuera mi mejor amigo, no sabía en qué punto de amistad estábamos en estos momentos.- Bueno, ahora sí que me voy, espero verte abajo.- Tan solo asentí, no tenia claro aún de si bajaría a la fiesta, pero la verdad es que me dejo con la intriga de con quien se encontraba, pero eso no era lo que mas me "preocupaba", por decirlo de alguna manera, lo que realmente necesitaba saber era simple: ¿Rhys Anderson estaba aquí, en mi casa?

-¡Ay!, si al final no he ido al baño.- Noah retrocedió por el pasillo, lo cual me produjo bastante gracia, la verdad es que le había extrañado bastante, y gracias a ello, me había dado cuenta de que nunca mas me iría de su lado, pasase lo que pasase.

-Bobo.- Susurre en mis adentros, no pude evitar sonreír como estúpida.