CAPÍTULO 22

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A la mañana siguiente/ Marzo.

Italia.

Shara.

Desperté bajo unas enormes sábanas, me removí entre ellas y un delicioso olor a perfume masculino lleno mis fosas nasales, comienzo a moverme e inconscientemente mis manos viajan al otro extremo de la cama y se posan en algo duro y cálido, acaricio esta superficie cuando detengo mis movimientos siento como sube y baja.

Abrí mis ojos de repente y me levante, Era alexander.

Sustos de los buenos.

Me le quede viendo por un rato, la verdad si estaba bueno, se le veía indefenso y tierno sus largas pestañas, sus gruesas cejas, y sus labios carnosos lo hacían ver perfecto, toque su mejilla acariciándola. Lastima que no tengamos padres normales y que las cosas no hayan sido perfectas para nosotros, pero eso no quita lo que hizo, lo que es y que me tiene secuestrada.

—Toma una foto muñeca.— Me exalte cuando hablo y abrió sus ojos. 

Moví mi mano quitándola de su mejilla y me Levanté de la cama, dirigí mis pasos hasta la salida de la habitación y dirigirme a la que estaba ocupando desde que me raptaron, me encerré ahí durante todo el día, lo que menos quería era que me jodieran.

Moví mi mano quitándola de su mejilla y me Levanté de la cama, dirigí mis pasos hasta la salida de la habitación y dirigirme a la que estaba ocupando desde que me raptaron, me encerré ahí durante todo el día, lo que menos quería era que me jodieran

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Alexander.

Creo que te estas saliendo de control.—Demandó Luciano caminando a mi lado.—Se que la quieres, pero no la puedes tener así.

—Lo se, pero si la dejo ir complicará las cosas, no quiero volver a perderla.

—Te entiendo hermano, pasó lo mismo con Fabrizio y Elizabeth y míralos se aman a muerte.

—Con Shara la cosa es diferente, Es hija de la mafia Rusa.

—Ay, eres un imbécil, de todas las muchachas que habían por ahí te viene a envolver esta y no es que me caiga mal adoró a Shara pero hermano, Pertenece a una familia muy fuerte.

—¿Y nosotros que?, ¿Se te olvida quienes somos?

—Alexander, tienes a una ivanova secuestrada, imagínate como debe estar el papá, su madre, sus hermanos y ¡ah! casi se me resbala lo más peligroso, su abuelo.

CADENAS DE PLACER. [#1] (EN EDICIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora