En Gusu la vida ya estaba arreglada para algunas personas. Todos sabían lo que tenían que hacer, hacían las mismas cosas todos los días, era como una eterna rutina que seguir a diario. Jiang Wanyin ya se había acostumbrado a esa vida, le había costado mucho porque él venía de una ciudad muy lejana a Gusu dónde las rutinas eran muy variadas, la gente era amable y se conocían todos en la ciudad, por eso jamás sabías lo que harías, un día podías estar en la casa de tus padres festejando con tus vecinos y al día siguiente salir con todos los jóvenes a visitar el muelle de lotos de la ciudad que quedaba bastante cerca de la casa donde el Jiang creció.
Cuando se mudó a Gusu para estudiar tenía solamente 16 años. Se había mudado junto a su hermana y hermano adoptivo, él era el menor de los tres y había sido sobreprotegido por ellos. Casi no tenía la necesidad de batallar por nada, su rutina era ir a la escuela y volver a comer y hacer deberes a casa. Solo cuando cumplió 18 empezó a trabajar, le gustaba leer y también le gustaban las ciencias. Comenzó a trabajar como bibliotecario en su escuela mientras aprovechaba para leer libros de química preparándose para su examen universitario. Aun le faltaban años para tomar ese examen pero él quería estar preparado.
En ese tiempo fue cuando conoció a quien consideró su único y más grande amor. Lo había visto ir a solicitar libros durante todo su primer semestre como bibliotecario, el joven era mayor que él por dos años, pero a Wanyin no le importaba. Siempre estaba mirándolo y disfrutando de verlo sonreirle, era solo un crush y jamás pensó que pasaría algo más entre ellos. Pero pasó.
Cerca del último mes de clases de su primer semestre en la escuela Wanyin estaba vuelto loco con las evaluaciones. Pasaba todo su tiempo en la biblioteca leyendo libros y estudiando fuerte, a veces no dormía bien y se veía bastante decaído, sus hermanos intentaban motivarlo diciendo que debía relajarse, pero Wanyin no quería... Siempre se había exigido demasiado, siempre quiso ser perfecto. Aún cuando sus padres lo aceptaban cómo era y lo amaban con defectos él siempre quiso darles lo mejor de sí, siempre quiso demostrarles que podían estar orgullosos de él. Por eso se mataba tanto.
Todos lo miraban extraño porque se veía cansado, él pensaba que solo sería un mes y luego podría volver a relajarse, realmente no estaba para hablar con nadie, hasta que ese joven le habló un día.
« — hey —había saludado el joven blanco de apariencia tranquila. Jiang Cheng no había reconocido esa voz, no era alguien que le hubiera dirigido la palabra antes, así que apartó el libro de sus ojos y miró la figura masculina frente a él. Cuando vio de quién se trataba sintió que se quedaba sin aire... Le estaba dirigiendo la palabra, a él.
— ¿Necesitas ayuda para encontrar algún libro en especial? —cuestionó y miró la pantalla de su computador listo para buscar lo que ese joven estuviese buscando. No pensaba que podría estarle hablando con otro fin.
— No, en realidad necesitaba encontrar la manera de atreverme a hablarte, mis amigos me empujaron hasta aquí y bueno... Hola —saludó. Wanyin estaba impactado, no creyó que ese chico estaría hablando con él alguna vez.
— Hola —saludó de vuelta.
— Bien... Soy Xichen, Lan Xichen —el chico se notaba nervioso y no era para menos, había estado muy atraído de ese joven que solía vestir de morado y cuyos ojos azules grisáceos le hacían perderse... Por mucho tiempo había querido hablar con él.
— Jiang Cheng —estiró su mano para estrecharla con la del otro. Pudo sentir la suavidad de la piel de ese tal Xichen, era increíble.— Salgo en 20 minutos, ¿Te gustaría tomar un café conmigo? —preguntó. Sí, era un joven que se podía poner nervioso, pero jamás había sido un introvertido a quien le costaba invitar a alguien a salir.
— me encantaría —respondió el otro y se sentó a esperar cerca del loto mientras hablaban de lo que habían estado leyendo. Esa tarde los dos habían pasado muchas hablando, realmente se habían agradado"

ESTÁS LEYENDO
Regrets - Xicheng.
FanficLan Xichen estaba confundido, ni siquiera sabía bien lo que quería pero aún así actuó por instinto. Había estado más de 3 años en una relación que no sabía si quería y se sintió agotado... por eso buscó alguien más pensando que no pasaría nada. Pero...