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Noviembre, 1976
Venus dejaba caer el agua por su rostro. Después de la pelea en los vestidores se había armado una tipo de guerra entre los merodeadores y Lucius, Regulus, Evan, Severus y Barty, quienes estos últimos habían dado el gane cuando cambiaron la ropa de los hombres por faldas—mas cortas de lo normal—camisas que apenas y les entraban los brazos, y tunicas de Slytherin. Obviamente se habían ganado un castigo pero había valido la pena.
Pasaba las manos por su cabello, suspiro tranquila, algo que se vio interrumpido cuando la puerta de su habitación se cerró. Cerró las llaves de la ducha, tomo una toalla para envolverse en ella. Sabía que Emma no podía haber sido, ya que se había ido con Regulus a Hosmeade, mientras que Narcissa había salido con Lucius fuera de Hogwarts a una cita.
Tomo su varita, la cual se encontraba encima del lavabo. Tomo la perilla de la puerta con cuidado.
—¡Desmaius!
—¡Protego!—se defendió. Venus reconoció la voz de quién se encontraba dentro de su habitación, por lo que salió del baño, aún enfundada en la toalla.
—¡Evan! ¡Maldita sea! ¿Que haces aquí?—pregunto la rubia, mirando a Rosier, quien estaba sentado en su cama.
—Regulus se fue con mi hermana. Lucius con Narcissa. Barty y Severus fueron a Hosmeade. En conclusión estaba aburrido.
—¿Y yo en dónde entro?—pregunto Venus mirándolo con una ceja alzada.
—Bueno, quería saber si...¿Te gustaría acompañarme a Hosmeade?
—Una cosa. ¿No crees que hubiera sido mejor que me lo preguntarás cuando saliera de ducharme y no cuando estoy en medio de ello? ¿Sabes que no tengo nada debajo, cierto?
ーSip, además, te vi desnuda no es nada.
Venus rodó los ojosーMe viste desnuda porque entraste sin tocar a mi habitación, cómo ahora lo hiciste. Además, mi cuerpo no es el mismo.
Evan la miro de pies a cabeza, siendo observado por Venus, quien lo miraba con una ceja alzada.
—Eso es muy obvio.
—Idiota.
—Entonces ¿Aceptas mi oferta de ir a una cita conmigo?
—Nunca mencionaste que sería una cita, pero acepto. —Evan sonrió.
Evan y Venus caminaba por las calles del pueblo de Hosmeade, de regreso al castillo. La rubia iba enganchada al brazo de Rosier, mientras observaba todo a su alrededor, y reía de las muecas que Evan hacía al ver que un hijo de muggle pasaba frente a el.
—¿Qué diría Walburga si estuviera aquí?—pregunto Evan mirando a Venus.
—Tenias que arruinar mi día mencionando a mi madre.
—Veo que la noticia de tu compromiso no te sentó muy bien—dijo Evan.
Venus rodó los ojos y se encogió de hombros: —Con tal de que no sea un imbécil, me conformo.
—Emma me comentó si no quería casarme contigo—Venus lo miro—Y aunque eso me gustaría, la respuesta es no. Disfruto de mi soltería, o al menos hasta que a mis padres se les ocurra comprometerme con alguien. Aunque...
Venus paro de caminar, posicionandose frente a el: —¿Aunque que?
Evan suspiro y negó con la cabeza: —Nada importante. —Venus asintio no muy convencida pero decidió no insistir. Nuevamente se puso a su lado enganchándose a su brazo para seguir su camino.
—¿Crees que es posible cambiar a las personas?—pregunto la rubia mirando al frente. Evan la miro confundido.
—¿A qué te refieres?
—¿No has pensado que tal vez somos las marionetas de nuestros padres?
—¿Por qué lo seríamos? Nosostros somos unos adolescentes que apenas y están aprendiendo a vivir la vida, ellos tiene más experiencia que nosotros, por no decir que son más viejos. Pero, contestando a tu primera pregunta, no estoy muy seguro de la respuesta ya que ese cambio sería de dos personas, no solo de una, depende de la persona a quien quieres cambiar está de acuerdo.
—Cierto...
—Te diré algo y espero no lo tomes a mal, aunque se que lo harás. —Venus lo miro con atención—Te importan mucho más las personas sin significado alguno de lo que dices. No tienes tan claro los ideales. —observando el rostro de la rubia, rápidamente se arrepintio de haberlo dicho.
El rostro de Venus se volvió serio y se posicionó frente a Evan de una manera amenazante. Tomo a Rosier de la camisa hasta dejar sus rostros a unos centímetros separados.
—Te diré algo Rosier. —Evan dio un paso atrás, soltándose de su agarré—No pienses que me conoces, no tienes ni idea de lo que soy o no soy capaz de hacer. He hecho cosas que no te imaginas ¿Tu porque crees que Sirius me odia? Soy una marioneta de mi madre.
Nota de la autora:
Recordemos que está es una duologia con msh_black y el capítulo del otro fic ya se encuentra en su perfil ❤️
