Aurora
Borro y escribo, vuelvo a borrar y vuelvo a escribir.
Esta mañana en el trabajo no está siendo nada fácil para mí.
Me he reunido con Liam, que se ha puesto muy insistente con el tema de mi reportaje, me ha exigido saber cuando estará listo, pero no le he podido dar una fecha.
Las grabaciones empezaran pronto, una vez el videoclip sea publicado debería publicar mi reportaje ya que desde ese punto ya no estaré unida a Moonshine, bueno al menos se supone que debería ser así.
Han pasado dos días desde que Nathaniel y yo nos besamos y es un tema que no para de dar vueltas por mi cabeza.
No puedo decir que me arrepiento de lo que pasó entre nosotros porque eso sería mentir, pero está mal, está muy mal, se supone que no debes encariñarte de alguien que forma parte de un grupo al cual pretendes exponer y yo he hecho totalmente lo contrario.
Ayer ni siquiera vine a trabajar porque no me veía con fuerzas como para afrontar preguntas por parte de Liam, hoy no es que tenga más fuerzas que ayer, pero tampoco puedo desaparecer de la faz de la tierra.
No me gusta sentirme así, en otras condiciones estaría super contenta de haber podido cumplir con mi objetivo, es decir, tengo la primicia de que el cantante de Moonshine es una estafa, Matt no canta las canciones del grupo y no lo ha hecho nunca, sinó que siempre ha sido Nathaniel. En otros momentos de mi carrera estaría saltando de emoción, estaría emocionadisima pensando en el reportaje y en todo lo bueno que me va a aportar eso a mi trabajo como periodista, pero esta vez no me siento así, no me siento así para nada.
No puedo parar de pensar en el ojiazul, no puedo sacarlo de mi cabeza, no puedo parar de pensar en cómo le estoy mintiendo, como le estoy haciendo creer que mi colaboración en el videoclip no tiene ninguna razón detrás. No puedo parar de pensar en cómo me hace sentir y en cómo me gustaría que todo esto fuera diferente, me gustaría que lo nuestro pudiera significar algo, pero no es así, nunca lo será, cuando descubra lo que he escrito sobre él y su grupo me va a odiar, voy a exponer a su grupo y eso va a hacer que mi carrera como periodista de un salto hacia adelante al haber conseguido algo que nadie más ha logrado, pero todo eso, ¿a qué precio? Nathaniel me va a detestar, me va a odiar y lo peor de todo es que va pensar que lo que está surgiendo entre nosotros no es real, cuando sí que lo es.
Me levanto de mi asiento para así poder ir al baño, una vez allí suspiro un poco y después procedo a lavarme la cara con agua fría en un intento de que eso haga que el guitarrista salga de mi cabeza y me pueda centrar en lo que debo hacer, a pesar de que siento un nudo en el pecho.
Al terminar me miro en el espejo una última vez, no tengo demasiado buen aspecto y siento que cualquier persona que me conozca mínimamente es capaz de darse cuenta de que algo no va bien.
Vuelvo a mi mesa y me acomodo.
Busco mis auriculares y una vez puestos subo el volumen en un intento de que eso me aisle de la realidad, como si de esa manera todo fuera a estar bien.
Sigo escribiendo el reportaje y siento como voy a una velocidad terriblemente lenta, no hago más que escribir y borrar, las palabras se me encallan como si no quisieran salir.
El día se me hace larguísimo, me he pasado el rato intentando escribir con coherencia y mirando el reloj como si así se fuera a terminar la jornada más rápido.
Hoy no tengo que ir a ensayar con los chicos de Moonshine y la verdad es que lo agradezco.
Cuando las puertas del ascensor se cierran, mi amiga Emily me mira.
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Exponiendo al grupo Moonshine
Teen FictionMoonshine es el grupo de música más popular del país, pero sus cuatro integrantes son más bien misteriosos. Nada de entrevistas, nada de información pública, nadie sabe más allá de sus nombres. Es por eso que Aurora Johnson está dispuesta a desvelar...