Capítulo 13

279 21 6
                                    

Paso una hora desde que perdimos a aquel hombre que le salvo la vida a Kiara, nos enteramos que se llamaba Bruno. Había perdido a todo su familia hace cinco días y decía que no tenía nada porque vivir.


En estos momentos viajamos por la carretera con dos nuevos integrantes. La mujer se llama Lucia, era madre del chico llamado Mateo.


Nuestro rumbo sigue siendo ir hasta Canadá con la idea de que tal vez los infectados no puedan resistir su clima. Pero como van las cosas cada vez tengo más dudas de si va a funcionar. Se vuelven más fuertes con el paso del tiempo, más resistentes.


Mateo parece estarse llevando demasiado bien con Gemma, no paran de hablar de lo fabuloso que es él. Le cuenta de que estuvo en África y ayudo a una tribu que tenía problemas con el agua potable. Que fue abanderado, trabajo en un asilo de ancianos y que era ayudante en una clínica de animales. También de que gano un concurso de sonrisas y uno de pesas. En resumen hablan de que es perfecto. No puedo evitar sentir un nudo en la garganta cada vez que Gemma lo mira con admiración.


Finalmente no aguanto más los coqueteos de Mateo hacia Gemma. Las discusiones de Lucia con Brian y el silencio de Kiara . Se encontraba muy callada desde el incidente con Bruno.


-Tengo que ir al baño- Digo como escusa, necesito desvelarme.


-¿No puedes esperar? - Dijo Brian


-Podría intentarlo, pero por seguridad me pondré al lado tuyo- Dije sonriendo, estoy seguro que con eso me dejara bajar.


-Vamos, deja bajar al pobre chico que no se aguanta. No seas malo. Déjalo bajar por mi ¿quieres?- Dijo Lucia provocando que Mateo, Gemma y Kiara se rieran muy fuerte. Creo que me puse colorado.


Al bajar, me interno entre unos grandes árboles y arbustos. Cuando ya no puedo ver la camioneta me detengo. Me bajo el cierre del pantalón y hago mis necesidades. Al terminar me lavo las manos en un arroyo que pasaba junto a mí. De pronto siento unas pisadas, que se acercan lentamente hacia mí.


-Ya voy- Digo pensando que es alguno de los chicos de la camioneta, pero nadie responde.


-¿Hola? Vamos solo me fui por unos minutos, dije que ya voy- Digo


-Matías- Dice una voz extrañamente familiar. Una voz que parecía haber sido dulce en su pasado y ya no.


-Matías ven- Dice la voz. Comienzo a asustarme, creo que reconozco a quien pertenece pero no puede ser verdad.


La voz cada vez está más cerca y no deja de repetir mi nombre. Comienzo a buscar algo con que defenderme, tomo un palo bastante largo y fuerte. Luego aparece aquella voz


Aparece mi madre totalmente desfigurada, su rostro angulado y huesudo, sus ojo están hinchados y sangrando. Su brazo que había sido mordido ya no está, solo quedan algunos tejidos podridos colgando. Tiene la ropa echa desastre y solo le cubre lo necesario. Se me acerca lentamente, pero por algún motivo se que puede moverse más rápido.


-Ven con mamá- Dice, sé que no debería acercarme, pero a pesar de su apariencia media muerta, todavía veo a la mujer dulce que me crió y que me dio la vida.


InfectadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora