Capítulo 4

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Al ver que nos acercábamos, la soltó. Nos estudio y se acerco "amistosamente"


-Oigan está todo bien. ¿Verdad Gemma?- Dijo con una sonrisa arrogante en su rostro, mientras bajábamos nuestras patéticas armas. Gemma asintió lentamente.


-Presentémonos, mi nombre es Jasón, tutor de Gemma ¿Ustedes?- Dijo


-Soy Rebeca y este es mi hijo Matías- Dijo mi madre un poco nerviosa.


-Bien, será mejor que nos marchemos antes de que llamemos la atención de mas asquerosas criaturas- Dijo mientras más infectados comenzaban a llegar.


Con mi madre nos miramos y estuvimos de acuerdo con que seguiríamos con ellos un tiempo, hasta que encontremos comida y refugio. Era un buen plan. Además quería conocer más a Gemma y evitar que este tal Jasón la volviera a molestar.


-Y ¿A dónde vamos?- Pregunte.


-Estaba pensando en ir a un supermercado que está en la esquina. Todos a mi camioneta- Dijo


Yo me senté atrás con Gemma y mi madre en el asiento de al lado del conductor. Jasón fue el único que hablo durante todo el camino, nos contaba cuando él iba de caza por diversión con sus amigos.


No tengo la menor idea de cómo llegamos hasta el supermercado sanos y salvos. El plan era simple, entrar y sacar solo lo que podríamos llegar a necesitar. Nos dividimos en dos grupos, yo me encontraba con mi madre y Gemma lamentablemente con Jasón. Por lo menos él nos dio un arma.


El supermercado estaba destruido, los vidrios rotos y la mayoría de las luces no funcionaban correctamente. Además había un olor a podrido. Dejando eso de lado había unas cuantas cosas que nos podrían servir.


Agarre una bolsa y comencé a guardar latas de comida, una cuerda, fósforos, algunas botellas de agua. Cuando una mano fría y pegajosa me toco el tobillo. Al darme vuelta tenía a un infectado partido a la mitad intentando tirarme al suelo, saque mi pierna y di un paso atrás. En ese momento llego Gemma.


-¿Qué diablos?- Dijo al ver al infectado.


- ¡Muévete idiota que te va a morder!- Me dijo gritándome, este era un lado de ella que no conocía, bueno no la conozco. Al verla me había olvidado que estaban a punto de morderme.


El infectado se movía bastante rápido para tener solo la mitad de su cuerpo, se le podía ver la columna vertebral, era un asco. Gemma le disparo en medio de su asquerosa cara y se desplomo encima de mi zapato. La sangre se metió por mi zapato hasta en mi media.


En seguida vimos aparecer a mi madre y a Jasón corriendo con bolsas mientras eran perseguidos por tres infectados, dos de ellos eran mujeres. Una estaba embarazada. Mi madre mientras corría les disparaba, es una mujer maravillosa. Jasón hacia lo que podía.


-¡Corran, corran! ¡No miren atrás, corran!- Nos gritaba mi madre desesperada mientras seguía disparando.


Comenzamos a correr y vimos que atrás de esos tres infectados, aparecían cinco más. Jasón nos dijo que le cubriéramos la espalda, que tenía un plan.

Los tres intentábamos alejar a los infectados, logramos matar a dos. Uno de ellos era la mujer embarazada. Me pregunto si su bebe hubiera nacido también como un infectado. Fue el infectado que mas sangró. Ya estábamos perdiendo la fuerza, por suerte no eran tan rápidos


-Vamos salgan- Nos dijo Jasón


Mientras salíamos por la puerta vi como rociaba la salida con nafta y prendía fuego todo el lugar. Luego todo exploto y caímos al suelo. Una nube de polvo nos rodeo y perdí la conciencia.

InfectadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora