Capitulo 4

1.2K 66 0
                                    

   –Disculpa, ¿tienes fuego?
   –Sí, ten –extendí el encendedor.
   –Gracias –sonrió y encendió su cigarro.
Supongo que había entendido la indirecta. Se sentía un poco raro. No habló por unos segundos que parecieron eternos. Yo debatía en mi mente si debía irme o quedarme.
   Taehyung caminó hacía el banco donde me había sentado hace minutos atrás. Observaba las luces de la ciudad y largaba el humo por su boca. Tomé el encendedor que él había dejado a su lado y caminé hacía la puerta.
   – ¿Te vas?
   – ¿Eh?
   – ¿Te vas a ir?
   –Lo siento. Quizá querías estar solo.
   –No. Me gusta tu compañía.
   –Bueno. Eso es bueno – caminé hacía él.
   –Ven, siéntate.
Se movió dejándome un lugar a su lado. Mi cuerpo no dejaba de temblar y mi pierna lo hacía notar. El corazón me latía a mil y no sabía que decir.
   –Esta vista es hermosa. ¿No lo crees? –asentí–. Buenos Aires es hermoso.
   –Vivo un poco lejos de aquí. Así que no siempre tengo este paisaje.
   –Yo vivo de ciudad en ciudad y sin dudas esta tiene algo muy particular y magnético.
   – ¿Tú crees?
   –Claro. La cultura. La comida. La música. La arquitectura... y la gente de aquí, es amable, generosa y hermosa –volteó a verme.
El corazón estaba a punto de salirse de mi pecho. Para mi suerte no había mucha luz donde estábamos, porque sentía mis mejillas arder.
   – ¿Te has sonrojado? –sacó el flash de su celular.
   – ¡No! –tomé su mano y le impedí que me alumbrará. Ambos nos echamos a reír.
   –Déjame verte –insistió.
   –No, no. Por favor. Soy un tomate ahora mismo –él largó una carcajada.
   –Está bien. No voy a alumbrarte –suspiro y nos quedamos en silencio por un segundo–. Te diré algo... –Mis nervios se habían ido cuando él me hizo reír, pero su seriedad repentina hizo que mi pierna volviera a temblar–. Cuando te vi llegar hoy, te reconocí de inmediato. Quizá lo notaste. No pude dejar de verte en el concierto –sonrió apenado–. Y me alegró mucho volverte a cruzar.
   – ¿En serio te alegró volverme a ver?
   – ¡Claro! No podría irme a dormir tranquilo sin saber tu nombre, al menos. Ya que pensé que jamás volvería a verte –observó mi pierna inquieta y colocó su mano en ella– Ya deja de temblar. Todo está bien –sonrió. Y esa sonrisa fue mi calma. Mi paz.
   Nos quedamos un poco más allí. Hablando sobre la música que yo hago. Sobre mi país y su cultura. Incluso sobre nuestras películas favoritas.
   –Tenemos mucho en común, ____(tn) –hizo una pausa– _____(tn), que bonito nombre.
   –Gracias. Nadie me había dicho que tengo bonito nombre.
   – ¿Soy el primero? Que honor.
   –Lo eres –respondí de forma juguetona.
Mantuvo su sonrisa cuadrada. Movía su cabeza de un lado a otro como si estuviera un poco avergonzado. Levantó la vista y me observó. Puso toda su atención en mis ojos. No hacía falta palabras. Su mirada lo decía todo. Me miró como nadie lo había hecho jamás. Con deseo, pero también con amor. Sin darnos cuenta estábamos tan cerca que sentía su respiración chocar con mi rostro. Su perfume caro mezclado con el olor a tabaco. Quería besarlo y estoy segura que él deseaba lo mismo. No volveríamos a verlo y tal vez esta sea la única oportunidad que me dé el universo para hacerlo. Cerré mis ojos y me dejé llevar. No vi lo que él hacía. No vi si también cerraba sus ojos o solo huía de allí.
   Sentí su presencia más cerca. Rozó mi barbilla con su dedo pulgar y supe que no saldría corriendo.
   – ¡Acá estas, Taehyung! –se escuchó la voz de Seokjin.
Nos separamos al instante. Taehyung pasó su mano por su cabello despeinándolo un poco. Volteé para ver a Jin y Yaz detrás de él.
   –Perdón –susurró.
   – ¿Interrumpimos algo?
   –No, solo hablábamos y quería ver si ella se había sonrojado –volvió a sacar el flash de su celular y esta vez logró alumbrarme. Cerré mis ojos al ver la luz–. Si, se sonrojó –apagó el flash y me sonrió–. Creo que será mejor que entremos.
Seokjin dejo salir su particular carcajada y caminó hacía la puerta. Taehyung lo siguió. Yaz se acercó a mí con una sonrisa picarona y me entrelazó su brazo con el mío, guiándome nuevamente hacía el departamento.

Destino - (TN y Taehyung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora