Capitulo 19

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  Capitulo +18. No me hago cargo si sos menor y lo lees. Recordá, jebus te ve, pecadora. 
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–Permiso –me aparté.
   –Espera, ______(tn). Por favor –cerró la puerta de la casa de Suga y corrió detrás de mí. No detuve mi paso. El pecho me dolía. Sabía, lo sentía, esto estaba mal. Yo estaba mal. Me alcanzó y tomó mi brazo–. Por favor, las cosas no fueron como tú creíste.
   –Déjame Taehyung –logré zafarme de su agarre–. Estoy cansada, quiero irme al departamento.
   –Ni creas que dejaré que te vayas sola.
   –Ni creas que dejaré que me acompañes o me lleves. No quiero estar contigo ahora.
Lo empuje hacía atrás y corrí hacía el ascensor. Me sentía terriblemente mal por haberlo empujado, por verlo de pie mientras las puertas se cerraban. Pero aún tenía heridas sin sanar y tenerlo cerca solo empeoraría todo.
   La noche oscura de verano se había convertido en una noche de diluvio y tormenta.
Tomé mi bolso y lo coloqué sobre mi cabeza para intentar cubrirme, pero luego de unos cuantos pasos ya estaba empapada.
   Miré a mí alrededor, era la única demente que caminaba por las calles de la ciudad con esta tormenta. No lograba ver con claridad. Me sentía perdida. No podía sacar mi celular. Tenía miedo, no conocía las calles, no conocía el idioma en el que estaban escritas las señales.
   Me quedé de pie mirando a la nada. A punto de llorar por rabia, tristeza, por un cumulo de sentimientos.
   Me vencí. Caminaría sin rumbo hasta que la lluvia parase y encuentre a alguien que me ayude.
De pronto un auto freno a mi lado. Bajo la ventanilla y era él.
   –Entra.
   –No.
   – ¿Puedes dejar tu orgullo? El cielo se cae. Entra o te haré entrar.
   –Atrévete –sonreí desafiante y continué caminando.
Mi cuerpo fue empujado hacia atrás. Tae me había tomado de la mano y me encaminó hacia su auto. Me colocó el cinturón de seguridad y manejó hasta su departamento.
   –Aquí no es donde vivo.
   –No. Es donde yo vivo –sonrió de lado.
   –Dije que quería ir a mi depar...
   –Namjoon está en tu departamento con tu prima. Créeme, no le gusta que lo despierten con ruidos. Es mejor que te quedes aquí. Tengo otra habitación.
   –Solo me quedaré hasta el amanecer y luego me iré.
Encendió las luces de su casa. Corrió hacia una habitación y volvió con ropa seca.
   –Te quedará un poco grande, pero será mejor que estar con esa ropa. Así no te enfermar...
   – ¿Dónde está el baño? –interrumpí. Él señaló.
Me cambie. Su ropa me quedaba enorme. Intente hacer algo para que el pantalón no se me caiga pero fue inútil.
   Me quede solo con la remera que a duras penas cubría parte de mis nalgas. Como si él nunca las hubiera visto.
   Salí del baño y sentí su mirada. Trate de no sonrojarme pero no lo logré. Escuché su risa a lo lejos.
   – ¿Quieres algo para comer?
   – ¿Dónde está la habitación?
   –Por aquí –caminó por un pasillo de su enorme departamento y señaló una puerta–. ¿Segura que no quieres algo para comer?
   –No –respondí de manera cortante y cerré la puerta.
   –_____(tn) –escuché su voz del otro lado–. Lamento tanto haberte lastimado...
   –Ve a dormir, Tae. No quiero hablar ahora.
   –No. Escúchame –suplicó–. Ella no ha sido nadie en mi vida. Habían comenzado los rumores sobre nosotros en las redes sociales y la empresa no quería que eso suceda. Querían proteger mi imagen...
   –Solo te preocupó tu bienestar, ¿verdad?
   –No. Pensé en ti todo el tiempo.
   –Pues no se notó.
   –Esa chica solo fue una bomba de humo de la empresa. Nadie salió a confirmar ninguna relación. Solo fue para que olvidarán lo de nosotros.
   – ¿En serio crees que puedo perdonarte eso? –Abrí la puerta–. Nadie confirmo pero tampoco nadie desmintió. Te importó que no se dañará tu imagen, pero no te importó si rompías mi corazón.
   –He intentado comunicarme contigo, me bloqueaste de todos lados. Fue imposible, _______(tn).
   – ¿Y que querías? Me fui de tu lado y de pronto tenías una nueva pareja. ¿Qué podía pensar o sentir en un momento así? Claro que estaba enojada y dolida. Yo estaba ena... –me frené al darme cuenta de lo que estaba a punto de confesar.
   –Tú estabas... –él se acercó.
   –Nada.
   –Yo aún lo estoy –dio otro paso–. Aún estoy enamorado de ti, ______(tn).
   –Todavía me duele, Taehyung.
   –Me odio tanto por haberte lastimado. Si tan solo me dieras otra oportunidad, lo juro, no volvería a hacerlo. No me importaría pelear contra la empresa, lo gritaría a los cuatro vientos que yo... –acarició mi mejilla–. Que yo te amo, _____(tn).
   – ¿Me amas? –él asintió.
   –De verdad lo lamento –continuó acariciándome–. Jamás deje de pensar en ti, de extrañarte, de amarte. Cuando te vi llegar al departamento de Namjoon, solo quería correr a abrazarte, a besarte. Pero sabía que no podía. Si lo hacía tal vez recibiría una bofetada –rio por lo bajo. No pude evitar sonreír.
   –Lo hubiera hecho sin dudas. Taehyung, yo también te extrañé.
   –Pero...
   –Pero... –me quedé en silencio. Analicé la situación, mis sentimientos. Lo tenía frente a mí confesando todo lo que sentía. Lo amaba, aun lo hacía, incluso más que antes. No podía engañarme más–. Pero nada. Te amo, Taehyung.
   Di un pequeño salto para rodear su cuello con mis brazos. Uní nuestros labios en un beso apasionado. Rompí toda distancia que había intentado mantener con él. Aquellos besos se sentían como si mis heridas se sanaran poco a poco. Sus caricias y abrazos me trasmitían todo el amor que sentía por mí.
   Los relámpagos iluminaban la habitación cada tanto. Sin separase un segundo de mis labios, me llevo hacia la cama.
   Desnudé su torso, besé su cuello haciéndolo soltar pequeños gemidos. Su voz se había vuelto ronca, mucho más grave de lo normal.
   Me recosté suavemente en la cama y se colocó encima de mí. Bajó con sus delicados besos por el cuello. Metió su mano dentro de mi camiseta y apretó con fuerza uno de mis pechos.
   –Te haré mía una y mil veces más –susurró.
   Nos cubrimos con las sábanas, nuestros cuerpos semidesnudos. Su penetración era lenta al principio. Sujeto mis manos con fuerza. Me beso con desesperación mientras sus movimientos tomaban velocidad. Mordió mi cuello, mis pechos, mis labios.
   Se ahogó en mis labios, lo abracé con fuerza clavando mis uñas en su espalda. Gimiendo entre besos hasta llegar al orgasmo.
   Continuó dando besos delicados, llenos de amor, de pasión, de ternura.
   –Te amo tanto, _____(tn). No quiero volver a dejarte ir –acarició mi frente.
   –Te amo, Tae. Te necesito en mi vida para siempre.
Se colocó a mi lado, me cubrió con más sábanas y me abrazó para poder dormir, de nuevo, juntos. Escuchando la tormenta de fondo, sintiendo su aliento en mi cuello, el calor de su cuerpo junto al mío casi desnudos.
   Quería, necesitaba, estar toda mi vida así. Solo con él. 

Destino - (TN y Taehyung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora