2.

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Me acerqué hacia Finn y Gwen con mi bicicleta mientras ellos se daban vuelta para ver quién les había gritado–Spoiler; había sido yo–.

—Hola —los saludo. Ellos me responden de la misma manera. Me acerco hacia el árbol de siempre, y dejo mi bicicleta ahí—, ¿Que onda?

—Nada del otro mundo —me dice Finn. Veo como Gwen rodea los ojos para después desviar su mirada hacia mi.

—Tuve otro sueño —me dice—, sobre... Una chica.

Levanté mis cejas con curiosidad—¿Que chica?

—No la reconozco —me responde, antes de chasquear su lengua pensativa—, su cara se veía borrosa.

Asentí con más curiosidad aún. Gwen solía tener sueños con los secuestros que ocurrían en esta ciudad, y en la mayoría de casos, lograba saber quiénes eran las víctimas y lo que les había pasado. Su papá me contó que a su madre le pasaba lo mismo que a ella. Eso de soñar con cosas que van a pasar en el futuro.

Su papá piensa que no es real.

Ella les contó a los alguaciles también sobre esto de los sueños y, sorprendentemente, le creen y siempre que hay otro secuestro, la llaman. Yo también le creí en cuanto me contó, pero fuí la primera entre Finn, su padre y yo en decirle que no les diga nada a los policías porque seguramente no le creerían. No quería que la tratarán cómo una mentirosa, o peor aún, como si tuviese problemas mentales.

—¿Será alguien que van a secuestrar? O tal vez, alguien que ya secuestraron —digo. Jugando con la pulsera gris que llevaba en mi mano.

—Lo segundo —dice Finn, frenando el paso hacia un cartel de papel con una foto de una chica de nuestra edad. Gwen y yo nos acercamos con curiosidad para ver de quién se trataba.

-¿Amybeth McCall? -pregunta Gwen, con el ceño fruncido-. No creo que haya sido ella la persona con la que soñé.

-¿Y por qué no? -le pregunto, poniéndome a su lado.

Gwen me mira mientras pone sus manos dentro de los bolsillos de su campera-No le ví la cara a la chica, pero... No llevaba el pelo corto. Además, lo mismo paso con Billy, y en cuanto ví su cartel me dí cuenta de que era él con quién había soñado. A Amybeth McCall no la recuerdo para nada.

-Pero quizás sea ella -dice Finn-. Quizás la vayas recordando con el tiempo.

Gwen suelta un suspiro-Eso espero.

Los tres comenzamos a caminar lejos del cartel, yendo hacia la entrada de la escuela. A Finn y a mí se nos hacía interesante hablar sobre los sueños de Gwen, pero a ella no tanto.

Creo que se estresaba cuando no reconocía o no brindaba nada que pueda ayudar a resolver los casos de los secuestros-la mayoría de veces ocurría-.

Estaba tan concentrada en lo que pasaba en mi mente que no me dí cuenta de toda la gente gritando que había a mi alrededor.

Salí de mi burbuja en cuanto Gwen me tocó el brazo y me llevó a rastras hacia un círculo de personas.

-¡Pelea! ¡Pelea! ¡Pelea! -decían todos al unisono. Finn, Gwen y yo nos acercamos a ver qué sucedía, y en cuanto estuvimos lo suficientemente cerca, pudimos ver a Munson y a Robin peleando.

No estaban peleandose a golpes-no por ahora-, se estaban peleando "verbalmente".

-Demuestralo -le dice Robin. Fruncí el ceño al ver lo perdida que estaba con los diálogos entre ellos, me estaba perdiendo todo el chisme por haberme quedado hipnotizada en mi mente.

De igual manera, después se lo podría preguntar a Gwen.

Munson se acercó indisimuladamente hacia Robin para dar el primer golpe. El cuál éste supo esquivar.

See U Later, Bruce YamadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora