Change {Harry Potter}

Prologo

Harry Potter andaba los por oscuros y solitarios pasillos de Grimmauld Place, esta siendo la única testigo de las lagrimas que caían por aquellos ojos verdes.

Se acababa de enterar de todo.

Toda su vida era una completa mentira.

Al enterarse consiguió salir de la madriguera sin ser escuchado, ayudado por Fred y George, claramente. Se apareció en Grimmauld Place y bloqueo la entrada a todos.

No sabía en quien confiar.

Molly, Ginny, Ron, Hermione y Dumbledore, prácticamente habían controlado su vida.

Le habían mentido.

Le habían manipulado.

Le pretendían y le estaban dando Amortentia para que se casará con Ginebra para que así ella se convirtiera en Lady Potter y que él luego misteriosamente moriría.

- ¿Qué vas a hacer niño? -La voz de Walburga salió del cuadro colgado encima de la chimenea. La mujer de la pintura pretendía parecer indiferente pero estaba furiosa por dentro, habían intentado manipular a alguien de su familia, aunque fuera un mestizo

Harry la miro, en silencio.

¿Qué podía hacer?

- No se que hacer, Lady Black -Le respondió cortésmente

La mujer en el cuadro miro callada al chico enfrente de ella, reconocía perfectamente esos ojos- Ve a la biblioteca, chico, allí encontrarás lo que necesitas, en un libro con la portada echa de cuero, con runas dibujadas en el lomo, cuando lo encuentres vuelve aquí, te ayudaré ha hacer el ritual

- ¿Ritual? ¿Cuál ritual? -Cuestiono confundido Harry

- Tu ve a por el libro,  ahora -Ordeno con voz severa

Harry asintió, temeroso de que Walburga empezará a gritar. El retrato miro como Harry se iba. Deseaba haber podido ayudarle antes, pero le fue imposible, esas personas nunca le dejaban estar solo y siempre la mujer pelirroja la tapaba con una sucia luna ¡A ella! ¡A Walburga Black! ¡A la bruja más poderosa y bella de la familia Black! ¡Fue indignante!

- Kreacher -Llamo al elfo

- Kreacher hará lo que la preciosa ama Walburga deseé -Dijo el elfo nada más aparecerse delante del cuadro

- Ayuda al mocoso -Le ordenó

El elfo asintió, y se apareció en la biblioteca para ayudar a Harry a encontrar el libro que describió su antigua ama, Walburga.

Incluso con la ayuda de Kreacher, duraron dos semanas en encontrar dicho libro. En ese tiempo, Harry no salió de Grimmauld Place, ignorando los llamados de los que fueron sus amigos, los intentos de entrar a Grimmauld Place y las cartas y vociferadores que les enviaban.

- Niño, escucha atentamente a lo que te voy a decir, coloca esos cristales en el suelo, creando una circunferencia, después dibuja las runas que te están descritas esos libros, Kreacher recitará el ritual

Harry hizo todo lo que le ordenó Walburga, después se colocó en el medio de dicho círculo, en ese momento sus ojos se cerraron y solo podía escuchar la voz de Kreacher, no entendía lo que decía, el ritual estaba en latín.

(Lo que esta en latín, esta puesto mediante un traductor)

- Reverse tempus, a futuro in praeteritum, quando omnia incipiunt. Fatum et Mortem mutem, quod non fuit factum. Ex futuro ad praeteritum, iter triginta octo annorum revertir -Recitaba una y otra vez el elfo de la familia Black

Walburga escuchaba atentamente lo que decía el elfo, empujando un poco de la magia de la ancestral familia Black, para ayudar a que saliera bien. Traduciendo lo que decía Kreacher en su mente; "Revierte el tiempo, de futuro a pasado, cuando todo empezó. Destino y Muerte, permíteme cambar, lo que no debió ocurrir. De futuro a pasado, un viaje de treinta y ocho años hacia atrás."

Walburga de antemano le pidió a Kreacher que hiciera otro ritual, uno en el que enviaría a Harry a la época donde los Mereoradores eran jóvenes, pensando que así lograría mejor su objetivo.

Y que así obtendría la familia que tanto deseaba

Destiny miro al joven mago, accedió a su deseo, pero cambiando un poco las cosas, sabia que el joven mago necesitaría ayuda, así que, hizo lo mismo con otra bruja. Dicha bruja no se preocupo al ver un remolino a su alrededor, sabia lo que iba a ocurrir de ante mano y ya estaba preparada. En cambio la muerte hizo otro pequeño cambio.

Así sucedió, un mago y una bruja volvieron 38 años al pasado.

Harry sabia que había actuado precipitadamente, sin pensar mucho en el plan o en las consecuencias. Lo único que le entristecía era dejar a sus únicos y verdaderos amigos y a su ahijado detrás. Cerro fuertemente los ojos cuando un remolino de viento lo envolvió. Cuando sintió algo realmente cómodo, abrió los ojos, no logro reconocer la habitación en la que estaba, todo estaba oscuro y en silencio, pero lo que si pudo identificar era que estaba en una gran cama con sábanas tan cómodas que no pudo evitar volverse a dormir.

El ritual había funcionado.