Human |JeffBarcode|

16

—¿Estás loco? —Dijo Apo en cuanto entraron en la antigua habitación de Barcode —. Si hubiera sabido de esto, nunca te hubiera llevado a la Tierra conmigo.

El estómago de Barcode se sacudió con nervios. Cruzó los brazos sobre su pecho.

—No sé de qué estás hablando.
Apo le dio una bofetada telepática.

Barcode apretó sus escudos mentales y lo fulminó con la mirada. Apo le devolvió la mirada.

—No te hagas el tonto. ¿Qué estás haciendo, Barcode?

Barcode desvió su mirada.

—No sé a qué te refieres.

—Correcto —Apo suspiró—. Sabes que es inútil. No importa lo apegado que estés a este humano, nunca podrás ser tú mismo con él. Nunca se te permitirá quedarte aquí. No se nos permite permanecer indefinidamente en los mundos pre-TTCI.

—Nadie sabe dónde estamos, excepto por tu amigo —dijo Barcode con fuerza.

—No te engañes. Puede que no lo sepan ahora, pero eventualmente lo descubrirán —Apo negó con la cabeza, mirándolo con tanta pena que le revolvió el estómago a Barcode.

—No te apegues demasiado a él, Barcde. Trata de mantener una distancia razonable. Ya eres demasiado cariñoso con él —Apo lo miró fijamente—. ¿Era realmente necesario sentarte en su regazo y dejar que te besara el cuello? ¿Es otra costumbre humana que no conocía?

Barcode parpadeó. ¿Realmente Apo no se había dado cuenta de que su relación con Jeff era menos que platónica? ¿Era él genuinamente ajeno? Era difícil de creer. Pero, de nuevo, Apo estaba vinculado y las áreas de su cerebro responsables de la atracción sexual fueron suprimidas por el vínculo. A pesar de la audaz conversación de Apo, no tenía experiencia en lo que respecta al sexo y las relaciones. Apo no tenía idea de cómo se sentía la atracción. Tal vez él no podía reconocerla. Barcode casi lo envidiaba. Las cosas habían sido mucho más fáciles cuando su cuerpo no se comportaba de forma tan extraña, atraído por Jeff como un imán. Había sido adicto al toque de Jeff y a la atención de Jeff mucho antes de que se rompiera su vínculo, pero ahora era mucho peor. Ahora había otra dimensión en sus sentimientos, una que era más difícil de suprimir.

—Prométeme que pondrás algo de distancia entre él y tú — dijo Apo, mirándolo fijamente.

—Lo prometo —dijo Barcode, sintiéndose como el peor tipo de mentiroso.

Haría lo mejor que pudiera, pero sabía que era demasiado débil en lo que a Jeff se refería. Para alivio de Barcode , después de eso, Apo cambió de tema.
Apo pasó la siguiente hora preguntándole a Barcode sobre las costumbres humanas y algunas cosas que Jeff había mencionado que lo confundían. Finalmente, después de lo que pareció una eternidad, soltó a Barcode.

Barcode tomó una ducha rápida en el baño y se puso ropa limpia, feliz de descubrir que Jeff no había quitado la ropa de Barcode de su guardarropa. Para cuando abandonó su antigua habitación, el resto del apartamento ya estaba oscuro.

Barcode abrió la puerta del dormitorio de Jeff y entró. Jeff había dejado las ventanas francesas abiertas y la luz de la luna iluminaba bastante bien la habitación. Junto con la mejoría de la vista de Barcode, podía ver todo perfectamente. Jeff parecía dormir rápido, su pecho subía y bajaba uniformemente. Solo estaba en sus bóxer. Barcode apartó los ojos y se quitó la ropa interior tan silenciosamente como pudo. Estaba un poco decepcionado de que Jeff estuviera dormido, pero tal vez fue lo mejor. No creía que pudiera cumplir su promesa a Apo si Jeff estaba despierto y lo tomaran desde donde lo dejaron. Barcode se metió en la cama y se puso de costado, mirando a Jeff.