Mile High Club (SuperCorp)

Capítulo 6 : Con o sin ti

Lena se dejó caer en el asiento trasero de su largo coche negro, sintiéndose exhausta y nerviosa.

"A casa, por favor, Vaz". Lena suspiró y levantó la ventana entre ella y su conductor. A pesar de ser una beta, Lena quería evitarle el olor en el espacio reducidos del vehículo tanto como fuera posible. Sacó su teléfono y comenzó a desplazarse por sus contactos. Ya podía sentir que se preparaba para su próximo ciclo y necesitaba encontrar una solución rápidamente.
Tenía alrededor de 30 horas antes de la reunión de la junta y una excusa perfecta para dejar que los doctores de negocios siguieran manejando las cosas hasta entonces. ¿Por qué no disfrutar el resto de su rutina?.

El primer nombre en el que se detuvo fue Andrea. Ella siempre fue una compañera de rutina confiable, y siempre se las habían arreglado no solo para seguir siendo aamigas sino también colegas profesionales cada vez que sus respectivas empresas trabajaban juntas.
Pero antes de marcar, Lena recordó que Andrea estaba en medio de un gran lanzamiento de producto en Obsidian Tech y estaría demasiado ocupada para desaparecer en ese momento.

Luego, sonrió cuando se acercó a Veronica, su antigua amiga-enemiga de sus días de internado en la Academia Wicklow. Su relación de amor y odio con ella siempre les sirvió a ambas cuando se sentía especialmente agresiva. Y en este momento debido a la gran decepción de no poder terminar su rutina con la encantadora omega que conoció en el avión, estaba de tal humor. Veronica también disfrutó particularmente anudarse cuando no estaba en celo, algo que no todos los omegas estaban dispuestos a hacer con alguien tan grande como Lena.

'Perfecto' Lena pensó por un momento, antes de que una imagen de sorprendentes ojos azules mirando hacia arriba desde los párpados caídos, la boca moviéndose para tomar más de su polla, brilló ante sus ojos.

Mientras el pensamiento pasaba, Lena siguió desplazándose hasta que encontró otro nombre y se sorprendió marcando de inmediato. La saludaron al otro lado del teléfono después de solo dos timbrazos.

"Hola, Tina. Gracias por atender mi llamada, estoy segura de que estás ocupada".

"Nunca demasiada ocupada para ti, Lena. ¿Cómo puedo ayudarte?"

"Necesito obtener una receta para bloqueadores de emergencia. Tuve un cambio inesperado en mi rutina..."

"Por supuesto, lo obtendré de inmediato. ¿Su farmacia habitual?"

"Eso sería perfecto, gracias."

"Es un placer. Sabes que puedes llamarme en cualquier momento".

Lena sonrió ante el tono de su voz. Siempre notó un coqueteo subyacente con la bella doctora, pero la valoraba demasiado profesionalmente como para buscar algo más.

"¡Gracias, Tina, eres una estrella!" Rápidamente colgó y se quedó atónita por un minuto por la rápida decisión de terminar con su rutina.

Finalmente, comenzó a desplazarse de nuevo y llamó a su asistente.

"Hola, Sra. Luthor. Bienvenida de nuevo".

"Gracias, Jess. Acabo de aterrizar y estoy completamente exhausta. El Dr. McGee está llamando para darme una receta y necesito que la recojas y la entregues en el ático. Tan pronto como sea posible, por favor".

"De inmediato, Sra. Luthor. ¿La farmacia habitual?"

"Si gracias." Lena suspiró aliviada, sabiendo que todo lo que tenía que hacer ahora era volver a su lugar, esperar la entrega y sumergirse en el agua más caliente que pudiera soportar. Sabía que tendría algunas horas difíciles esperando que los bloqueadores hicieran efecto.

'¿Por qué te haces esto a ti mismo cuando podrías estar experimentando los placeres de tu rutina con un omega agradecido?' Pero en el fondo sabía que en ese momento cualquiera palidecería en comparación con lo que ella acababa de experimentar.