Mile High Club (SuperCorp)

Capítulo 85: Espera a la luz de la luna

"Quiero criarte". Lena gruñó.

"Oh, joder, sí".

Lena podía sentir su alfa ponerse a toda marcha. "¿Estás segura de que esto es lo que quieres?"

"Por supuesto, Lena." La voz de Kara había adquirido un tono muy sumiso que llamaba a su alfa. "Es todo lo que quiero".

Lena agarró el cuerpo de Kara para maniobrarla rápidamente sobre su estómago, luego levantó su torso para ponerla de rodillas en una posición perfecta para reproducirse. Su alfa estaba en plena ebullición y Lena no soportaba moverse despacio: quería tener a Kara lo antes posible. Quería tenerla repetidamente, tantas veces como Kara pudiera aguantar sin lastimarla.

Lena nunca había sentido algo tan intenso. Se dio cuenta de que esto significaba que su alfa y su corazón y mente pensantes se habían unido en la decisión de criar a Kara, y todo en su cuerpo estaba completamente a bordo para hacer todo lo posible para dejar embarazada a Kara. No importaba que las posibilidades no fueran altas, ya que no estaban en un ciclo de reproducción. Lo que importaba era que ella completara los actos tan completa y minuciosamente como pudiera.

Kara se quedó sin aliento, sorprendida, cuando de repente la pusieron en posición. No estaba donde esperaba minutos antes, pero estaba encantada con el giro de los acontecimientos. Tan pronto como Lena tuvo las caderas de Kara levantadas, inmediatamente cubrió su cuerpo, agarrando sus hombros como si tratara de mantenerla quieta, su polla ya presionando con urgencia entre las nalgas de Kara.

"Oh Dios mío, Lena..." Kara ya estaba sin aliento, su omega regocijándose al darse cuenta de lo plenamente que su alfa estaba abrazando la idea de criarla.

Lena apartó el pelo de Kara para poder acceder a su cuello. Empezó a besarla y a mordisquearla, preparándola para el dolor que le causaría otro mordisco fuerte, que Lena sabía que le daría en algún momento. Kara giró la cabeza para que Lena pudiera acceder mejor a su mordisco de apareamiento.

"Por favor, Lena..." Kara balbuceó. "Soy tuya... siempre seré tuya...".

Lena se limitó a gruñir de placer. Su alfa se estaba apoderando de ella tan plenamente que le costaba formular frases. Lena empujó las caderas hacia delante, frotando la polla entre las nalgas hasta el coño. Empujó bruscamente para arrastrar la punta de la polla por su clítoris.

"Oh Dios..." Kara gimió. "Oh, joder..."

Lena registró la reacción y detuvo su trabajo en el cuello de Kara por un momento. Se inclinó cerca, lamiendo alrededor de la concha de su oreja.

"¡Eres mía!" Casi aulló. "Kara... mía".

"Siiiii."

"Voy a darte un bebé". Lena gruñó. "Nuestro bebé".

"Siiii...." Kara comenzó a sollozar de deseo y felicidad.

Kara estaba respondiendo a las hormonas dominantes de Lena rodando fuera de ella, podía saborear lo cerca que estaba de conseguir lo que su cuerpo exigía, y lo que su corazón anhelaba.

"Kara..." Dijo Lena, pasando la lengua por el borde de la oreja de Kara y bajando por su cuello. "¿Estás segura... de que esto es lo que realmente quieres?" Dijo Lena con un fuerte pellizco en el lóbulo de la oreja. "Quieres que te folle. Que te crié".

"Dios, sí." Dijo Kara, sintiendo su cuerpo moverse contra el de Lena. Se empujó hacia atrás, rechinando contra la polla de Lena. "Quiero tener tu bebé".

Lena agarró el pelo de Kara y le dirigió la boca para que pudiera introducirle la lengua. Kara estaba encantada de recibir a Lena tan profundamente como ella quería. Ambas se deleitaron en el profundo beso con la boca abierta.