Vanilla Flavor Lips | Aidan Gallagher『+18』

Dos

___.

- Entonces, tuvieron... - Habló Liz con picardía.

- ¿Qué cosa? - Pregunté frunciendo las cejas.

- Sexo ___, sexo. - Dijo rodeando los ojos con obviedad.

- ¡No! Claro que no, solo me invitó a cenar. -

- Mjm... - Achicó los ojos.

- Es enserio. -

- Bien, te creo. - Murmuro.

- La que si debió tener sexo con esos dos chicos fuiste tú, ¿Verdad? - Dije y sus mejillas se pusieron rojizas al instante.

- No hablemos de eso. - Dijo, desviando la mirada con una pequeña sonrisa en el rostro.

- Entonces tuvieron un trío. - Dije sorprendida. - Dios, quien fuera tú. - Volví hablar, haciendo que amabas rieramos.

Después de hablar sobre la fiesta de dos días atrás comenzamos a hablar de otras cosas al azar. A pesar de conocerla de poco tiempo atrás me llevaba muy bien con ella, incluso me daba confianza para contarle algunas cosas personales.

Seguimos hablando cuando de repente vibró un celular, dando a entender que llegó un mensaje, llamando así nuestra atención.

Frunci las cejas al ver que se trataba del mío. Tomé el celular entre mis manos y lo encendí rápidamente.

Una pequeña sonrisa se formó en mis labios al ver que se trataba de Aidan pues en la noche que cenamos intercambiamos números.

"Hola ___, mando este mensaje para ver si quieres ir a tomar un café el día de hoy conmigo, claro, si tú gustas"

Terminé de leer el mensaje de texto mientras mordía ligeramente mi labio inferior, evitando gritar de emoción.

Luego de eso salí de la casa de Liz, explicándole de quién era aquel mensaje, ella entendió y pidió que usará condón, ¿Acaso esta mujer solo pensaba en sexo?

Fui a mi departamento para arreglarme un poco y esperar a Aidan, ya que él dijo que iría por mí. Después de unos minutos por fin llegó, lo salude con un beso en la mejilla y entre a su auto.

Al llegar ambos a la cafetería pude sentir la gran calidez del ambiente, junto con la tranquilidad que daba. Todo era muy lindo a decir verdad, los diseños del lugar eran normalmente grises con blanco y uno que otro café.

- Quelle sera votre commande? (¿Cuál será su pedido?) - Preguntó en francés una pelinegra frente a nosostros.

- Un café crème, pain aux noix... (Una crema de café, pan de nuez...) - Habló el ojiverde con su firme voz.

Dios, Aidan hablando en francés era más que perfecto, y es que su gruesa voz se escuchaba muy bien hablando en tal idioma.

Aidan alzó la mirada y me miró a los ojos, dando a entender que pidiera yo. Bajé la mirada al menú y pedí lo primero que ví.

- Et un café noir, s'il vous plait. (Y un café solo, por favor). - Murmure hacia la chica, la cuál anotó enseguida sobre una pequeña libreta y se retiró.

- ¿Solo un café? - Preguntó Aidan con el ceño levemente fruncido.

- Sí, realmente no tengo apetito, pero me alegra volver hablar contigo. - Dije cambiando sutilmente de tema.

- Realmente no sabía cómo decirte si querías venir. - Rió en voz baja. - Soy muy malo para las conversaciones por chat. - Volvió a hablar.

- Soy igual, por esa razón no me gusta hablar por mensaje. - Dije soltando una pequeña risa.

Y así no la pasamos el resto de la mañana, riendo y platicando. Hasta que tuve que regresar al departamento a hacer nada, ya que era domingo y eso significaba día de descanso total.

...

Caminaba con rapidez en dirección a la Universidad pues estaba llegando tarde y eso significaba que la profesora de Ciencias Sociales no me dejaría entrar a su clase.

Antes de siquiera dar un paso para cruzar la calle ví a alguien a lo lejos, haciéndome parar en seco al instante.

Miré atentamente hacia aquella persona y me pude percatar de que se trataba de Aidan, pero este no estaba solo, sino con una chica frente a él.

Hice una mueca de disgusto al ver que la chica rubia se acercó a él hasta cortar el espacio entre ambos.

Desvíe la mirada y traté de seguir con mi camino, quiero decir, no debería importarme si estaba con alguien o no.

Pero vamos, era imposible no sentir ciertos celos.

Sé que es muy corto, lo sientooo.