Conejita - Jenlisa [G!P]

SEGUNDA TEMPORADA: 🐰 5 🐰

Un mes después.

ㅡ¿Y mami? ㅡpreguntó Candela frunciendo el ceño.

ㅡDijo que no se sentía bien... nuevamente está enferma, ¿qué necesitas, cariño? ㅡpreguntó Lisa acariciando el cabello color negro de su hija.

ㅡ¿Mami estaba vomitando?

ㅡAja, pero no es nada gra...

ㅡ¡Mami está embarazada! ㅡgritó la pequeña pelinegra con entusiasmo y felicidadㅡ ¡Voy a tener a mi primer hermanito!... ¡Sí!

ㅡCandela. ¿Quién te enseñó sobre esas cosas?

ㅡLa tía Jisoo

ㅡCreo que hablaré sobre ciertas cosas con la enana esa... ㅡaseguró Lisaㅡ Amorcito, iré a cuidar a mami... ¿me acompañas o prefieres quedarte aquí?

ㅡ¿Yo tendré un hermanito? ㅡpreguntó la niña agarrando la mano de Lisa y empezando a subir las escalerasㅡ yo de verdad quiero un hermano, no me gusta jugar sola... tampoco me molestaría tener una hermana, dile a mami que se embaracé ㅡdijo ella y Lisa no pudo evitar soltar una risa. ¿Cómo se suponía que le diría eso a Jennie? Terminaron de subir las escaleras y entraron a la habitación. La rubia estaba durmiendo tranquilamente, Lisa sintió su corazón palpitar ante tal escena: Jennie es demasiado tierna. Y realmente deseaba tener otro hijo con ella, deseaba que nuevamente se embarazara. Así le da un hermano a Candela y otro hijo a ella.

La pelinegra caminó lentamente hasta la cama y se sentó en aquel lugar. Empezó a acariciar la mejilla de su esposa, y luego quitó un mechón de su rostro para poder observarla mejor. Simplemente era hermosa, y estaba orgullosa de que sea su esposa, solamente de ella. Empezó a acariciar su cabello color rubio de forma lenta y suave, dejando un beso en aquella zona. Candela intentó hacer lo mismo, también empezó a acariciar el suave cabello de su madre.

Madre e hija se miraron y sonrieron al mismo tiempo, las dos querían otro integrante en la familia. Lo anhelaban demasiado, los ojos de Jennie se fueron abriendo de forma lenta.

ㅡ¿Qué sucede? ㅡpreguntó refregándose los ojosㅡ ¿por qué están mirándome tan fijamente?

ㅡHas estado vomitando ㅡaseguró Lisa.

ㅡTambién has estado enferma ㅡdijo está vez Candela.

ㅡ¿Y? ㅡpreguntó Jennie rodando los ojos y volviendo a taparse con las sábanas.

ㅡQuiero que te hagas el test de embarazo. Hay probabilidades de que estés embarazada, Nini ㅡmurmuró Lisa sobre la mejilla de su esposaㅡ Puede que me des otro hijo... ¡Hazte el test de embarazo, mujer!

ㅡYa voy... ㅡse quejó, poniéndose de pieㅡ ¿Hay un test de embarazo en la casa?

ㅡClaro, siempre hay uno. Sana siempre me los da, ella desea tanto que tengamos otro hijo... en la mesa de luz hay un test de embarazo ㅡdijo Lisaㅡ yo y Cande te esperaremos aquí, esperaremos que sea una buena noticia.

ㅡMami, yo sí quiero un hermanito

ㅡEntonces, espero que salga positivo ㅡrespondió Jennie alzando ambas cejasㅡ Las amo a las dos. Quiero que me esperen aquí...

ㅡLo haremos ㅡdijeron Lisa y la pequeña al mismo tiempo.

[...]

ㅡ¿Cuánto más tardará, mami?

ㅡSupongo que ya debe estar lista para decirnos la noticia... espero que sea positivo, cariño.

ㅡOjalá que sí, mamá.

La puerta del baño se abrió, y Lisa se puso de pie inmediatamente. La mirada de Jennie estaba en el suelo, la pelinegra supuso que era negativo, por lo que la abrazó fuertemente, y entre lágrimas dijo:

ㅡAmor... ¿qué sucedió? ¿Por qué te ves triste?... ¿Salió negativo?

ㅡMa, ¿tendré un hermanito? ㅡpreguntó Candela estirando del pantalón de la rubia intentando captar su atención. Jennie alzó a su pequeña hija entre sus brazos y soltó un largo suspiro. Una lágrima empezó a caer por su mejilla, y eso fue más preocupante para Lisa.

ㅡFelicidades Lalisa Manoban. Vamos a tener otro hijo.

ㅡ¿Qué?... ¡Voy a volver a ser mamá! ㅡgritó con entusiasmo abrazando nuevamente a su esposa y a su hijaㅡ ¡Vamos a ser mamás!

ㅡ¡Voy a tener un hermanito!

ㅡTendremos un nuevo integrante ㅡaseguró Jennie acariciando su vientre suavemente y dejando un rápido beso en los labios de su esposa, y uno en la mejilla de su hija.

ㅡGracias por darme la familia que tenemos, JenJen.

Jennie se acercó al oído de Lisa y le susurró algo poco audible, pero que aún así, ambas entendieron a la perfección:

ㅡTe amo, conejita.