"Haz muerto 5 veces, Yuno... 5 veces, y de todas ellas... Tú sigues aquí."
"¿Qué harás cuando tus pies no puedan salvarte?"
"Y lo ví. El hombre humano que no era humano en absoluto; Él... El que me llevará al infierno."
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Mientras alguien llenaba sus pulmones de aire, ellos eran tragados por magia espacial.
-Oye... Tu también vendrás con nosotros!- La chica me habló a mi.
Yo todavía esta atónito. No tuve tiempo para realizar lo que acaba de pasar: Solo llegaron y se los llevaron; Llegaron y se fueron.
-Vamos, ''su alteza'', no esté tan asustado, nuestro benefactor lo tratará con un ligero dolor.- Mencionó el encadenado.
-Valtos.
El otro hombre que permaneció callado en todo momento, abrió un portal bajo mio.
Esta vez fue evidente que yo era el siguiente.
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Así como todo pasó, llegué a un lugar raro.
Era el reino del trébol, pero no se exactamente que parte. Era como un bosque y había una especie de guarida enfrente de mi.
Pronto aparecieron lo otros.
-¡Eres un idiota, por eso te atraparon rades!
-¡¿A quien llamas idiota, científica desquiciada?! ¡Yo solo actúe por lo que creí correcto, no como tú qué solo actúas desde las sombras!
La chica lo ignoró por completo.- ¡AHHH! ¡SABIA QUE NO SERIAS TAN ESTUPIDO COMO PARA ESCAPAR!- chilló de emocion.
"?"
-¡Oh, cierto! ¡Mi nombre es Sally, el otro se llama Valtos y el idiota debilucho que atrapaste se llama rades!
Ahhh... Era rades.
-¿Y tú, como te llamas? ¿¡Me ayudarás en mis investigaciones!? ¡Quiero diseccionarte!
Ni me di cuenta cuando una luz empezó a inundar el lugar.
Una luz cegadora, y de ella emergió un hombre. Todos los presentes se callaron y arrodillaron.
Yo por mi parte, me encontraba confundido.
En cuanto la luz cesó, vi claramente al hombre: Era delgado, su cara tenía marcas rojas, y dos círculos del mismo color por cejas. Portaba dos aretes y en su cabeza un accesorio. Su cabello blanco peinado en trenzas y una túnica holgada. Sin mencionar que tenía la piel más pálida que haya visto.
Su apariencia era muy delicada, incluso se veía algo afeminado.
-Licht-sama, tenemos un rehén de los humanos del trébol.
-¡Licht-sama, déjeme hacer experimentos con el! ¡Tiene sangre noble, déjeme usarla para mis investigaciones!
-Asi que... ¿Un noble? Si es así, hicieron un gran trabajo.- Su voz era serena y amable. Una voz suave, que a pesar de las circunstancias, no me hacía temer demasiado.- ¿De que familia noble, exactamente?
