Epílogo

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El gran camión se estacionaba en la entrada de nuestra nueva casa.
Habíamos vendido nuestras casas de vecinos y habíamos comprado una mucho más grande en un sector rural, queríamos aire limpio y paz, además de un jardín de juegos.

Naruto: cariño solo siéntate junto a Boruto, nosotros nos encargamos de descargar el camión y acomodar todo.

Mi panza ya estaba que explotaba, mi segundo bebe venia en camino y ahora mismo pateaba como loca, es por eso que decidimos comprar una casa con más espacio y habitaciones.

Nuestro primer hijo, Boruto ya tenía 3 años, nació justo 9 meses después de nuestra boda,(que puntería la de Naruto), estaba creciendo y cada día más curioso pronto querrá salir a explorar y que mejor que tener un patio gigante para hacerlo.

Sai e Ino vinieron a ayudarnos, su hijo Inojin se lleva muy bien con Boruto, aunque era un poco mayor, en ellos casi no se notaba, se estimaban muchísimos.
La idea de venirnos también, era estar más cerca de mi amiga, quien luego de todo lo que vivimos decidió alejarse de la ciudad, dejó el trabajo y busco uno nuevo por estos sectores. Ahora nos veríamos mucho más seguido... eso me ponía feliz, no quería estar lejos de la única amiga que me quedaba, ella me apoyaba en los días difíciles y recordábamos con amor y nostalgia, cuando eramos cuatro.

La noche cayó y las cosas ya estaban en su lugar, solo faltaba organizar los utensilios de cocina y la ropa, pero mañana vendría Hanabi a ayudarme a terminar con esos detalles. Ya me quedaban 2 semanas para el parto, no debía hacer fuerza, así que prácticamente estaba como reina.

Naruto: amor estoy muy cansado
Estaba recostado en la cama con su cabeza apoyada en mi pecho mientras acariciaba mi barriga.

Hinata: lo se, lo siento.. quisiera poder ayudar.

Naruto: no no, suficiente haces cargar a nuestro hijo, además no quiero que te pase nada...

Hinata: mañana te dolerá la espalda, amor

Naruto: no importa, todo sea por ti y los niños

Estaba realmente cansado

Hinata: descansa

Naruto: tee... mo

Balbuceo esas últimas palabras y cayó en un profundo sueño

Hinata: yo tambien te amo

Lo miré con ternura, mientras acariciaba su pelo.
quien hubiera pensado que mi vecino "borracho" terminaría siendo mi hombre perfecto.

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Hemos llegado al fin, les agradecería me dejaran su feedback de la historia.
Cariños ❤️

Lean mi otra historia " a un centímetro de tu boca" y la nueva que estoy escribiendo " la oportunidad".

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