Alexia James y su grupo de música han vivido toda su vida en Oahu, una de las islas de Hawaii, concretamente en Honolulu. Viven una agradable vida mortal, cada uno con sus propios problemas. No saben nada de su origen.
Cuando un grupo de mestizos so...
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Álex
¿De verdad tengo que hacer esto? Bueno, ok.
Me llamo Alexia James, pero todos me dicen Álex. Tengo 16 años y vivo en Honolulu. Amo mi hogar, rodeado de hermosas playas y aguas cristalinas.
Desde niña he amado el agua. Y no sé quién fue el loco que experimentó con mis pulmones, pero puedo pasar muchísimo tiempo ahí abajo. Ni siquiera me escuecen los ojos por la salitre.
Asisto con mis amigos al Instituto de Honolulu. Mis maestros siempre me tienen en el punto de mira. Bueno, a mí y a mis amigos.
Creo que todos tenemos un grupo de amigos con los mismos problemas mentales, ¿no? Bueno, pues en mi grupo de amigos todos tenemos THDA. Y dislexia. Qué no se olvide la dislexia.
Pero aunque tengamos los mismos problemas, somos también muy listos. Somos disléxicos pero no daltónicos.
Me explico.
Tenemos una banda de música. Yo sé tocar la guitarra y un poco el piano, pero en el grupo solo canto. Mis colegas y yo creamos un código de colores que sustituían las notas y así podíamos entender las partituras.
Siempre cantamos covers ya que, si yo escucho mucho la misma canción, me acabo aprendiendo la letra, pero por culpa de la dislexia no podría leer un texto ni aunque yo lo hubiera escrito.
En aquellos momentos, mis amigos y yo estábamos en clase de Cultura clásica. A mí siempre me había gustado todo lo de dioses griegos y eso, pero es que la Srta. Rowel era demasiado repetitiva. Siempre el mismo mito, siempre.
Y yo estaba ahí, con la cabeza enterrada en los brazos junto a mi mejor amigo, Jeremy, dormitando y soñando con unicornios de colores.
—¡Srta. James! —la profesora exclamó. Me enderecé con la mano en la frente, como si estuviera en la mili, mientras Jeremy se reía de mí.
—¡Sí, señor! —anuncié con el ceño fruncido. La clase estalló en carcajadas.
—¡Silencio! —gritó la profesora con voz de Alvin y las ardillas—. Srta. James, dígame cuáles son los 6 hijos de Cronos.
—Hestia, Deméter, Hera, Hades, Poseidón y Zeus, en orden cronológico —respondí.
—Bien. ¿Y por qué Cronos los devoró?
—No sé, ¿porque se aburría?
La clase de nuevo empezó a reír.
En ese momento, sonó la campana de receso.
Jeremy y yo nos levantamos.
—Algún día te vas a meter en un problema, Álex —repitió de nuevo, mientras se despeinaba su cabello rubio dorado—. Tenemos ensayo tras la comida, recuerda.
—Cosas como esa no se me olvidan, Jer —le sonreí.
Él arrugó la nariz y entrecerró sus ojos, de un azul eléctrico. Su hermana gemela Caroline era igual a él.
