MI OMEGA (omega verse)

diez

Taehyung se detuvo en el pasillo con el Omega corriendo hacía la sala. Él enorme lobo se detuvo gruñendo al alfa qué intentaba controlarlo.

—¡Ahhhhh! JUNGKOOK DETENLO!—gritó SeokJin tirándole las hoyas y todo lo qué tenía a su alcance—¡ Taehyung usa a tu bestia!—Gritaba el Omega corriendo siendo seguido por el lobo.

Momo corrió con sus hombres encontrando a los Kim corriendo en círculos por el lobo. —¡Gohs!—Bufó—¡SEÑOR DETENGASE!—gritó. La bestia se detuvo aún segundo de tomar a SeokJin de su abrigo. Él Omega se arrastraba del suelo gritando como loco. Taehyung se había tirado de la ventana, escondiéndose en el pasto mientras miraba al Omega.

—Jin me matara—musitó al saber que el Omega lo mataría por no a verle cuidado.

La bestia gruño alejándose del Omega, caminando pesadamente hasta la alfa con su ira aún latente.

Momo tragó pesado moviéndose suavemente con los alfas alejándose con miedo—¡Todos muévanse despacio, ya le arrancó la cabeza a una persona, a si que no dudará en hacerlo de nuevo!—dijo retrocediendo.

Sus hombres jadearon alejándose. Taehyung, entró llamando la atención del enorme animal. —¡TAE NO SEAS IDIOTA!—Gritó Jin escondido en los muebles.

Las fauces del animal temblaban al gruñir; todos temieron cuando la bestia saltó contra el moreno.

Taehyung saltó al piso haciendo que el animal caiga en las ventanas, cayendo en la bajada del pasto rodando hasta los árboles. SeokJin se levantó con rapidez ayudando al moreno con Momo elevando su arma.

—!Por qué nadie hace nada para qué ese animal nos deje en paz!—Dijo SeokJin asustado.

La bestia sacudió su cabeza levantándose del suelo. Todos corrieron hasta la puerta. Momo elevó su arma, su única salida era ir con su jefe.

Ji-eun se arrastraba en el suelo con sus ojos llenos de pintura, la Omega sollozaba deteniéndose en la puerta rota solo para ver a un alfa y Omega consumiendo su acto sexual. La morena apretó sus cabellos soltando un grito.

Jungkook sonrió en los labios del menor, sus manos apresaban las manitas del peli-rosa besando la piel que enloquecía su nariz. Las mantas rotas apenas cubrían lo necesario. Jimin con sus ojitos perdidos, no sabía si estaba en la realidad, todo en su cabeza daba vueltas, estaba caliente como el sol en primavera.

—¡¿A CASO NO ME ESCUCHAS, INFELIZ!?—ji-Eun estaba por entrar pero un gruñido en su espalda la hizo paralizar.—¡h-ah y-yo!—giró su rostro encontrando una nariz roja y fauces más grandes qué había visto.—¡AHHHHHH!!!.

Momo y los demás escucharon los gritos de la Omega. La alfa corrió por los pasillos escuchando los gritos de la morena. Ji-Eun  cayó al suelo negando con terror, retrocediendo.

—¡AYUDAME, JUNGKOOK, OPPA, AHHH, QUE NO ESCUCHAS!—gritó tirándole lo que fuese a la bestia de pelaje rosado y blanco. Él lobo media mucho más que el negro, parecía un monstruo andante con sus ojos azules brillantes.

Momo se detuvo llamando la atención del animal—¡Por la luna!—dijo anonadada.

—¡AYUDAME!—gritó ji-Eun —¡POR FAVOR, ME QUIERE COMER!.

Momo suspiró recobrando su postura; a diferencia del lobo negro, el teñido parecía más tranquilo y solo protegía algo, eso intuía su bestia.

—¡mi señor!—dijo haciendo una reverencia. La bestia se apartó de la Omega acercándose a la alfa. Kim mantuvo su postura, no debería mostrar miedo—¡Por favor señorita Ji-Eun le pido que se levante, y se vaya. Como le dije, no es bienvenida a esta casa!—dijo soportando el aliento de la bestia en su rostro. Lee jaló sus cabellos levantándose, ella caminó deslizándose por la pared hasta que paso a la alfa. La bestia le gruño haciéndola correr. Momo tragó pesado cuando el animal le miró a los ojos.