— ¡Kazu! ¡Ya es hora!
Hoy iríamos a la revisión, se supone que deberíamos salir ya, pero..., no lo estamos haciendo, nuestro niño había estado entusiasmado con la idea de tener a alguien a quien enseñar nuevas cosas, había enternecido definitivamente mi corazón.
Pero, no podía venir con nosotros, el tenía escuela, mamá y papá también estaban felices por ello, al parecer se quedarían un tiempo más antes de empezar su nueva travesía.
En cuanto a mi hermano..., bueno, al menos llama para saludar a Shin, es lo mínimo que hace, y no me molesta.
— Cariño, ¿estas bien? Estas tardando mucho – entré a nuestra habitación, pero, sólo se veía al espejo, como no me di cuenta antes.
— Seré papá nuevamente, yo..., no puedo..., y si..., no, Laila está aquí, pero...
— Kazu – lo tomé del hombro para que me miré, ha tenido esa maña de hacerse daño el sólo en sus pensamientos, pero, ha logrado sobreponerse mucho en este tiempo – todo estará bien, ¿de acuerdo? No hay nada que temer.
— Yo..., tengo miedo que algo salga mal.
— Saldrá igual a como salió Shin, sabes el procedimiento, podemos hacerlo cariño, eres un gran esposo, un gran padre, y el mejor hombre que pude haber conocido.
— Me da mucho mérito.
— Porque te lo mereces.
Debes en cuando, Kazu suele ser inseguro, pero, son pocas las veces que esto pasa, Baji me lo había mencionado, se alegra de que me tenga, y, aun así, viene un par de veces a vernos.
Como hoy...
— ¡Oigan! ¡se hace tarde! Dejen las cochinadas para después – también había aprendido que no puede entrar a la habitación de golpe, en caso de que estemos en intimidad.
— ¡No seas aguafiestas Baji!
— Cállate, enserio se hace tarde – reí levemente para ver a Kazu más calmado.
— Vamos, o Baji se comerá nuestra alacena, todo estará bien, ¿de acuerdo?
— Bien...
Salimos de casa con las quejas de Baji de por medio, Kazu enserio estaba feliz de tenerlo, y no haberlo perdido ese día, algo que anda presumiendo mucho en la playa cada que alguien se acerca a preguntarle la razón de su cicatriz, aunque como es obvio, Draken también se lleva merito por tener una igual, pero..., es otro cuento.
— Veamos señora Hanemiya, sentirá algo frío, sabe el procedimiento – hice caso a las indicaciones de mi ginecóloga, mientras Kazu estaba a mi lado sosteniendo mi mano mientras Baji trataba de ver el monitor – veamos..., oh que maravilla.
— ¿Qué? ¿Qué sucede? – Baji también veía la imagen y sonreía como desquiciado - ¿Qué es Baji?
— Soy veterinario, no ginecólogo, apenas entiendo el cuerpo humano Kazutora – lo miré mal por ello, ilusionó un poco a Kazu.
— Todo está orden, este de aquí, se mueve mucho, por eso se siente más movimiento al lado izquierdo, pero, este de aquí, se ve más tranquilo – la miré por un momento – felicidades, serán mellizos.
— ¿Me-mellizos? ¿Dos?
— ¡Le atinaste Kazutora! – miré a Kazu a mi lado, y como la primera vez se cayó de sentón, mientras empezaba a llorar, pero, ahora, lloraba con una sonrisa asustada – no debes preocuparte, tendrás tiempo a solas con Laila, Ryusei vendrá pronto, asiqué cada uno nos haremos cargo de cada niño, será genial..., seremos el trio de tíos guapos, con sobrinos hermosos, sólo esperemos que saquen la belleza de Laila.
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Ojos Dulces - Kazutora Hanemiya
FanficUna historia de Kazutora Hanemiya. - Kazu, eres un tonto, de alguna manera cuando te vi, tenías unos ojos dulces que me cautivaron al instante. - Tu también los tenías, pero, el que me recibieras siempre con un abrazo, me sentía mejor. - Aun lo sig...