Su día no comenzaba de buena manera, después de haber tenido la tarde más maravillosa el día anterior, ahora no se podía levantar de su pequeño nido.
Cada extremidad dolía, su garganta se sentía como el más árido de los desiertos, así como el picante más doloroso de tragar.
Sus ojos ardían, apenas y podía abrirlos ligeramente para volver a cerrarlos con desesperación. Deseaba pararse del nido que había formado la noche anterior, orgulloso de que su alfa lo quisiera entre sus brazos.
Todo su cuerpo ardía en fiebre, además de pequeñas gotas de sudor y sangre que además de adornar su piel, adornaban sus sábanas de color ébano.
Su Omega se sentía lastimado y no deseaba salir de su pequeño escondrijo, aunque deseaba la presencia de aquel alfa, besando su frente y acariciando sus cabellos, que se acurrucara a su lado en su pequeño nido, y que le felicitara por tan buen trabajo para sus pequeños cachorros aún no nacidos.
Con mucha lentitud, en honor a sus extremidades, tomó su teléfono y llamó al pequeño alfa híbrido, deseando que estuviera desocupado.
Sabía que no había entrado en celo, no sentía deseo sexual ni la calor habitual, solo sentía dolor y soledad en su pequeño cuerpo angelical.
El menor de la pareja, al enterarse de los malestares del castaño, prácticamente voló al hogar del mayor, con una mochila llena de cosas que podría necesitar el chico, desde medicamentos hasta ropa de sí mismo, marcada con su aroma.
Aún agitado por la prisa con la que había abandonado su hogar, llegó a la puerta del hogar de Luzu, el mayor le había concedido el permiso de entrar a su hogar, puesto que no se sentía bien para siquiera abrirse la. Entró con lentitud, no sin antes pedir permiso al dueño del hogar, un sin fin de aromas invadieron su nariz, desde los lirios, hasta los frutos rojos que simbolizaban al mayor.
Cerró la puerta con suavidad y dejó su mochila en algún lugar cercano, sin más preámbulos fué a buscar al mayor a su habitación. Lo encontró acurrucado en la cama, completamente cubierto por una manta.
"Lusu... Permiso Lusu ¿Me dejas entrar a tu cuevita?" Lo dijo con el tono menos nervioso posible, aún cuando prácticamente se estaba haciendo en los pantalones.
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Celestial
Fanfiction¿Que harías si el amor de tu vida solo juega con tus sentimientos? Exacto, morir. •Cubitos, no streamers. •Si no te gusta, tienes la libertad de no leer. •Enfermedad ficticia. •Omegaverse. -Luzu Omega Tigre -Veg Alfa Lobo -Quacks Alfa Pato -Rub Omeg...