Capítulo 32.

186 17 0
                                    

Lo que hacía especial y única la relación de Jaehyun y Taeyong era que no importaba si habían o no problemas, siempre había comunicación y sobre todo amor, ambos estaban en una edad perfecta donde podían ser maduros pero eso no les quitaba el hecho ser cariñosos y derramar miel.

Justamente ahorita estaban ambos unidos por un abrazo bastante fuerte por parte de ambos en la cama, el reloj marcaba las seis con cuarenta de la mañana indicando que era hora de levantarse y correr para llegar a tiempo a sus lugares de trabajo o en este caso Jaehyun para la empresa y Taeyong para la universidad, ninguno de los dos quería soltar el agarre del cual estaban unidos, primero porque el menor estaba aún muy adormilado pues había dormido mal la noche anterior por todo lo que había ocurrido entre la pareja y el mayor aunque estaba bastante despierto y consciente que era tarde no le importaba, habían pasado casi veinticuatro horas sin ningún contacto con su pareja y eso para ambos había sido un castigo bastante difícil.

Al momento que el mayor decidió por fin levantarse y despertar delicada y cariñosamente con besitos regados por el rostro de Taeyong ya marcaba las siete con quince y es que si, ya iban a tarde y estaban conscientes de eso pero aprendieron a que debían aprovechar el tiempo de pareja cuando lo tenían, la vida, el tiempo y las personas pasan muy rápido y ambos estaban seguros que ninguno de los dos quería ser solo una persona pasajera por la vida de ellos, querían ser para siempre pero no querían estresarse por lo que pasaría más adelante, aprendieron también a que debían vivir y aprovechar el presente que estaban viviendo.

El día de hoy algo había sido claro y era que se habían despertado más pegas de lo normal, parecían un chicle que no se podían despegar, el baño fue juntos en el cual se les fueron unos minutos de solo mimos, abracitos, besitos nada morbosos de por medio y una buena ducha, el desayuno había sido peor de romántico que todo lo que habían hecho anteriormente, Jaehyun le ofrecía las fresas y terminaba dandoselas en la boca del contrario, por parte de Taeyong había hecho el desayuno de manera que fuera un corazoncito hecho de frutas lo que hizo que el corazón de Jaehyun latiera más de lo que había estado haciendo estas últimas horas, lo siguiente fue el viaje en auto hacia la universidad del menor y es que las canciones que sonaban por la radio no ayudaba nada a la situación y parecía que la sabían al sonar puras "canciones para dedicar a tu amor", o bueno así había dicho el locutor.

El problema que había pasado había quedado atrás y aunque Taeyong no hubiera superado eso aún y se sentía algo avergonzado Jaehyun estaba ayudando a eso demostrándole todo el amor que sentía hacia él y se había estado notando la efectividad por ambas partes, Taeyong poco a poco volvía a ser aquel que no le importaba demostrar su cariño hacia Jaehyun cuando quisiera sin importar el lugar, el menor era el típico chico que solía dar besitos tímidos cuando quisiera y Jaehyun no le importaba eso siempre y cuando viniera de Taeyong, ese pequeño había cambiado muchas cosas en él para bien y él estaba feliz y cómodo como estaba.

Al llegar a la universidad —tarde— luego de muchos besitos y ánimos Taeyong salió del auto caminando hacia la sala de práctica que le tocaba ese día, agradecía que a primera hora no se iba a topar con Doyoung porque juraba que si lo veía no iba a ser el Taeyong amable, idiota y despistado, se había dado cuenta solo de lo que le había hecho y como lo había visto con la cara de estúpido, nunca se lo iba a perdonar.

Por otro lado Jaehyun ese día parecía ser el hombre más feliz del mundo, no había superado las palabritas que le había dicho Taeyong antes de dormir y lo romántico que había sido aunque todo eso se le fue al llegar a la empresa y mirar como todos se le quedaban viendo ¿Que pasaba? Su paso se apresuró un poco aún manteniendo su postura yendo a su oficina, al llegar su secretaria se levantó indicando que había un mensaje para él.

—Buen día señor Jeong —hizo una reverencia apenas para continuar hablando. —Su padre me indicó que apenas llegara usted le indicara que pasara inmediatamente a su oficina, al parecer pasó algo no muy agradable para la compañía

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 18, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝑀𝓎 𝒪𝓃𝓁𝓎 𝐸𝓍𝒸𝑒𝓅𝓉𝒾𝑜𝓃 ||𝓙𝓪𝓮𝔂𝓸𝓷𝓰||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora