Marvel: La Casa Del Veneno

Capitulo 59.Tiempos preocupantes

MJ se gritó a sí misma al llegar a casa, hoy no había sido un buen día. Su turno en el restaurante, una antigua hamburguesería de estilo pop y mamá, había sido frustrante, no porque el trabajo fuera difícil, sino porque realmente quería que alguien se comiera las bandejas de plata que traían comida a las mesas y no podía.

Él le había tocado el trasero mientras ella pasaba, un "lo siento, señorita" accidental mientras ella lo miraba, luchando contra el impulso de romperle el plato en la cabeza, pero captó las risitas y los comentarios en voz baja sobre su apariencia. Su número garabateado en lugar de una propina hizo que ella pusiera los ojos en blanco, y después de cobrar su cuenta, tomó nota. Seguro que no podía hacer nada en el trabajo, pero más tarde, podría dejar algunas pistas en dirección a Peter, o incluso a Felicia. Se había disculpado por ser mala, era solo su forma de sobrellevar la situación y, como MJ se había derrumbado, también lo había hecho Felicia y compartieron un momento, los padres autoritarios parecían ser un tema recurrente en el almacén.

Entonces ella había estado emocionada por una entrevista. Un productor de teatro real la había visto en fotos y le había dado una oportunidad. Ella había hecho la prueba de sonido, demostrando que no era una idiota babeante y que podía pronunciar sus líneas, pasó por todos sus aros y luego llegó a la reunión. Mientras recordaba su sonrisa viscosa, golpeó una de las bolsas que Peter preparó para que entrenaran, Felicia les mostró a ella y a Gwen al menos algunos movimientos básicos y cuando se balanceó hacia atrás por la fuerza del golpe, no pudo evitar. escucha sus palabras

"Sabes cariño, a veces, para salir adelante, tienes que dar un poco de cabeza, ¿sabes a lo que me refiero?" y luego esa sonrisa, esa estúpida y engreída sonrisa suya. Gah, golpeó la bolsa una y otra vez. Se había ido, tenía muchas ganas de golpear al tipo, pero con Muse, le habría roto la mandíbula. Es mejor ser conocido como un mojigato en un negocio basado en el sexo que un alborotador, arremetiendo contra los cabrones que se aprovechan de los objetivos más fáciles.

Le pidió a Muse que dejara que algunos de los sentimientos se filtraran, para asegurarse de que no se adormeciera, y en lugar de miedo y conmoción, sintió repulsión e ira, lo suficiente como para que si Muse no la hubiera calmado, lo habría hecho. lastimado, y hecho lo suficiente para enfrentar la prisión. Mientras caminaba a casa, se aseguró de que Muse mantuviera esos impulsos bajo control y quería entrenar más.

Trabajó la bolsa, como dijo Felicia, y se sintió mejor, dejando que Muse saliera y trabajaron juntas para superar sus frustraciones. Si bien no era una luchadora y no tenía intención de serlo, estaba de acuerdo con Peter, si ese tipo tuviera compañía o hubiera sido más contundente, habría tenido que confiar en Muse para salvarla. Mientras entrenaban, era evidente que ninguno de ellos estaría cazando en el corto plazo.

Y luego, para colmo, Peter había desaparecido después de enviarle un mensaje críptico sobre el temblor del suelo. Había tenido una tía May furiosa, preguntándole dónde estaba, por teléfono, ya que habían planeado una cena juntos para celebrar el cumpleaños de Peter, pero él no contestaba su teléfono y tampoco Gwen o Felicia. MJ tuvo que escuchar un sermón severo de ella sobre las responsabilidades de los adultos, a pesar de que MJ estaba tan enojado como ella. Incluso habían planeado una pequeña reunión aquí, MJ había pedido varias pizzas, Gwen abrió un poco de sidra y cerveza recién hechas de las que estaba tan orgullosa e incluso después de que MJ llegó a casa no había nadie aquí.

Que se jodan, pensó y profundizó, tomando un trozo, mirando su reloj y se suponía que él estaría aquí, la pizza apenas por encima de la temperatura ambiente. Había tenido un mal día y se iba a divertir aunque no hubiera nadie más aquí,