tell me you Love Me [KAGEHINA] [FINALIZADA]

Llamada

—Ya no llores Hinata... Kageyama no te merece.

—Noya tiene razón Hinata, ese idiota no te merece, tienes a muchas chicas y chicos que están detrás de ti, no vale la pena.

—No lo entiendes... Duele pensar que fui el único tonto que mantuvo su maldita promesa en pie, y más cuando creí que me amaría solo a mi, cuando se muy bien que hay gente haya afuera que es mejor en que yo en casi todo.

—¡No es cierto!... Tu eres en verdad genial, esa chica puede que sea linda, pero no tanto como tu. Solo... Olvida eso y empieza tu vida amigo, verás que te pasará.

—Tanaka tiene razón, Hinata... Ven conmigo mañana para ir a comer a una cafetería.

—¿Yachi?... Yo no lo se...

—Vamos... Prometo que haré que olvides tus pena.

—¡Si amigo ve! También podemos ir a una fiesta todos y divertirnos.

—¡Es verdad!... Podríamos conocer a cualquier chica.

—¡Noya!...

—Solo bromeó asahi... No te pongas celoso.

—¡No es por eso, también hay que considerar lo que Hinata quiere!

—Ahh... Yo, creo que estaría bien distraerme un poco...

—¡Así se habla!... Bien, entonces hagamos fiesta un viernes por la noche. ¿Les parece este viernes?

Todos asintieron, Hinata se limpio el resto de lagrimas que tenía en su rostro y fue al baño, se lavo la cara y se quedó unos segundos mirándose em aquel espejo pensando.
—¿Si fuera una chica, fuera más bonita?— Hinata se toco su rostro y lo examinó, empezaba a pensar en que si kageyama ya no lo quería es porque era un chico y no una chica, ella si le podía dar una familia, tal vez eso era lo que buscaba kageyama y el no tenía.

—Ojalá y pudiera cumplir tus estándares tobio...
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KAGEYAMA

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—¡Aiko!...

—Si, dime cariño

—Publicaste la maldita foto.

—Ooh... ¿La del beso?

—Esa misma...

—Si, bueno... Quería que el mundo supiera que estamos juntos.

—Todo el mundo ahora lo sabe eh...

—Si... ¿Pasa algo?

—No es nada...

—¿Acaso... No querías que alguien en específico la viera?

—No es eso... Solo olvídalo...

—Mmmh bueno, te veo luego, mientras preparo la cena.

—Bien.

. . .

—Maldición... Seguro ya la vio... ¡Mierda!... Hinata, no sabes como te extraño, maldita naranja con patas. Quisiera poder estar a tu lado en este mismo momento, oler tu aroma y tocarte, besarte y darte mimos...

Mis pensamientos se fueron al oír mi celular sonar, un número desconocido, lo mire curioso y solo contestes, con el típico —Hola— una voz familiar me respondió... Con la misma frase, era suga-san, este se escuchaba deprimido y llego directamente a la situación de la foto, un sabor amargo se formo en mi boca, suga-san solo siguió hablando explicandome todo a detalle, lo de Hinata y como se sentía. Me quede boquiabierto cuando suga-san menciono lo de la promesa, el si la había cumplido...

—Hinata... El te sigue amando, tanto así que esta sufriendo...

—Yo... Lo lamento mucho... No quiero hacer que se sienta así o que llore, todo por mi culpa, yo... No se lo que siento ya, tengo que estar comprometido con Aiko... Por obligación de mis padres.

—Entonces no la amas...

—No lo se...

—Kageyama, ¿cuando Volverás?

-Eso.. Dentro de un año.

—Ya veo... Hay una chica que está interesado en Hinata, es nueva aquí y kioyoko se irá y hará una carrera, así que ella será la nueva manager. Hará lo imposible para conquistar a Hinata, ella es muy diferente a ti, ella fue la primera en consolar a Hinata cuando llego llorando al gimnasio por la foto que vio con tu chica...

—... ¿Hinata esta interesado en ella?

—No lo se... Pero ella fue la única que lo ha hecho sonreír como tu lo hacías, Hinata estaba muy deprimido cuando te fuiste y Yachi hizo lo imposible para animarlo y funciono, ahora sonríe como antes otra vez...

—Mierda...

—Solo te dare un consejo Tobio... Si realmente amas a una persona no la sueltes por nada del mundo, si la amas de verdad no te sentirás confundido cuando otra persona aparezca en tu vida, aprecia a la persona que te quiere y nunca se ha ido de tu lado...

—Suga-san... Gracias, en verdad aprecio que estes a mi lado en esto.

—No hay de que, ¿Quieres el número de Hinata?

—Eeh... Si por favor.

—Bien te lo pasaré, adiós.

—Si... Adiós.

Suga colgó la llamada y solo me recoste en mi cama, pensando en lo que me dijo, de pronto oí el teléfono sonar, había llegado el mensaje de suga-san, vi el número que me mandó, era Hinata, tenía una foto de el de perfil con esa sonrisa... Esa sonrisa que me invadía y llenaba cada vacío que tenía yo... Me enamoraba aún más... Hinata la única persona que en verdad amo, y no puedo amar a nadie más.

Decidí llamar a Hinata, una decisión que me tomo mucho tiempo pensar... Pero igual lo hice. Aún que el miedo me invadiera, lo hice y espere unos segundos y me contesto...
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HINATA

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—¿Uhmm?... Número desconocido... Eeeh, ¿Si buenas?

—Hinata...

—Kageyama...

Me quede unos minutos sin habla, era en verdad kageyama... No lo podía creer, pero ahí estaba yo como un idiota, sin poder decir nada más, agarrando mi teléfono con fuerza y mi corazón palpitaba demasiado, Kageyama también no decia nada a lo que me puse más nervioso... Ya no sabía que hacer, ¿Debería colgarle?... No, no lo se... Por fin decidí hablar.

—Kageyama... ¿De verdad eres tu?...

—Si... Soy yo... Hinata.

Mis lágrimas empezaron a salir, ya no podía evitarlo, ¿por que me hacía esto, cuando intentaba superarlo?... No era justo, sentía que me rompía cada vez más y dolía... Dolía demasiado.

—Hinata... Por favor no llores...

—Callate... No tiendes derecho a decirme que no lo haga... Maldito... Te odio, en verdad te odio...

—Se muy bien lo que puedas sentir en este momento, pero yo...

Colgué la llamada, no quería oirlo más, ni saber nada de el, aún que muy en el fondo sabía que lo amaba aún... Y ese sentimiento no se iría en mucho tiempito, odiaba esto... Ya no sabía que hacer.

Justo en ese momento, Hinata recibió una llamada, era Yachi, lo había llamado para invitar a Hinata a salir y tomar un café mañana, este acepto, tal vez eso lo ayudaría a olvidar sus malos momentos y el sabor amargo que tenía en su boca ese mismo momento.

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