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—Firma Toyokawa, parece que hay una competencia de planificación.

—¿Todos los empleados son candidatos?— murmura Yoongi tras leer el texto amarillo que más llamaba la atención del póster.

—Sí, tal parece que esta vez no se limita solo al personal de planificación y desarrollo. Parece que va a ser algo grande.— al no recibir respuesta, Seokjin voltea a mirarlo, este seguía concentrado en el contenido del póster. —¿Estás interesado en participar?

—¿Eh?— Yoongi reacciona algo tarde a la pregunta —No, no, no, los concursos no son para mi.— Y antes de que Seokjin volviera a tocarlo, Yoongi hace lo que mejor se le da, huir.

Una vez de regreso en su lugar en la oficina, dando vueltas en la silla, no deja pensar. Es que, no es que no estuviera interesado, pero nunca ha creado, ni siquiera imaginado, algo que resultara siendo un producto innovador, agregando el hecho de que se siente incapaz de hacerlo.

Desde su sitio logra observar a Seokjin, piensa que tal vez si él lo intentara lo lograría, él luce como una persona presta a lanzarse a cualquier objetivo.

—Yoongi.— de pronto, un golpe abrupto sobre su escritorio lo hizo volver en si. —Tu amigo, el de lentes, necesito hablar con él.

Yoongi no sabía si sorprenderse porque Jimin no había usado honoríficos con él esta vez, o porque Jimin lucía verdaderamente enojado, o porque ahora mismo se sentía asustado por su causa.

Logró contactar por teléfono a Namjoon, pero Jimin alegó que necesitaba resolver sus pendientes con él en persona. Entre asustado y sorprendido reservó una mesa en una cafetería cercana, de todas formas ya estaba por culminar el horario laboral.

Seokjin terminó colándose para acompañarlos y Yoongi agradeció eso porque justo ahora Jimin no lucía como una persona sociable, mucho menos después de que la camarera trajera su café helado y él lo haya bebido de golpe.

—¿Estás seguro que me quede?— Seokjin murmura cerca de su rostro —No sé qué está pasando.

—No te preocupes, yo tampoco entiendo muy bien qué está pasando.— responde de la misma manera.

—Porqué me obligaste a venir tan de repente, no estoy de humor para bromas.— Namjoon llegó a la mesa, sin saludar y con su tono más cansado de lo normal.

—Tú, ¡maldito cuatro ojos!— antes de que Yoongi siquiera procesara que Namjoon había llegado, Jimin ya se había abalanzado sobre él sujetando el cuello de su camisa con fuerza.

Yoongi trató de separarlos antes de que sucediera algo grave, ya todos en el lugar tenían la vista sobre ellos.

Seokjin en cambio solo tapaba su boca con su mano, para él, el insulto que usó Jimin puede ser todo menos ofensivo una vez pasado los veinticinco años.

—¿Por qué heriste a Hoseok?— Jimin gritó.

—¿Herir?, ¿Hoseok está herido?, ¿dónde está?

—¡No te hagas el idiota, lo estás evitando!

—Yo...

—¿Por qué lo apartaste de pronto?, ¿solo porque es gay?, ¡maldito imbecil!

—¿Qué?

—Hoseok ha dicho que no volverá a acercarse a ti, que no te preocuparas.

Namjoon no sabía qué debía hacer o decir, Yoongi no entendía qué estaba sucediendo aunque pudo ver recuerdos donde Hoseok conversaba con Jimin sobre eso no terminaba de procesar cómo la situación termino en esto, Seokjin por su lado bebía de su café mientras escuchaba todo con atención.

—Hace unos días.— continuó hablando Jimin —Le dijiste a Hoseok que continuara con su baile, él... él me dijo que sentía que por primera vez alguien lo entendía, sentía que estabas de su lado. Esa vez, nunca había visto su rostro brillar como esa vez, sin embargo, y por una razón estúpida, ¿lo estás evitando?

—Esperen, esperen.— trató de intervenir Yoongi cuando Jimin quizo abalanzarse de nuevo. —Namjoon es como yo, se agobia muy rápido y se esconde en su caparazón, pero él no evitaría a Hoseok, él no es esa clase de persona, ¿verdad Namjoon?

—Veo que me tienes muy alta estima.— Namjoon sonríe un poco —pero es verdad, estaba evitando a Hoseok. Pero no es porque sea gay.

Namjoon coloca su mano sobre el hombro de Yoongi para agradecer sus palabras de manera que sólo él escuchara. Luego, sin despedirse, se echó a correr sin mirar atrás. Él no creía que Hoseok se lo iba a tomar de esa manera, ahora se sentía muy culpable, todo por su tonta timidez.

Dejó de correr y de lamentarse cuando llegó a la plaza donde sabía que Hoseok practicaba, como suponía, sólo estaba él ensayando. Entonces se armó de valor y caminó hasta él interrumpiendolo, hizo una reverencia estando totalmente sobre el suelo.

—¡Lo siento mucho!— repitió varias veces.

—¿Namjoon?

—Yo...  todo este tiempo... no lastimarme, así que fingí que no estaba en casa. Te estaba evitando porque... estaba sorprendido. Vi a la persona que me gusta besando a alguien más. Yo... me gustas, Hoseok. Me gustas mucho, no puedo evitarlo, me gustas tanto que me duele.

El valor que le quedaba se había agotado, su vista estaba en el suelo, pequeñas lágrimas corrían por sus mejillas y Hoseok seguía sin emitir respuesta.

—Eres adorable.— respondió después de unos minutos, agachandonse sujetó su rostro para ver a sus ojos. —Tú también me gustas mucho.

Namjoon no sabe cómo ha llegado tan lejos. Ahora está en su casa con Hoseok sentado en un extremo del sofá jugando con Udon mientras él en otro extremo no hace más que sudar y pensar si lo que está sucediendo es un sueño.

—Deja de actuar como un psicópata y dime algo.— le dijo Hoseok luego de que el gato se cansara de jugar.

—Pero. Es que... no puedo creerlo.

—¿El qué?

—Quiero decir que, pensaba que mi amor era unilateral. Y, en realidad, aunque... aunque ya tenga treinta años, el amor es algo nuevo para mi. Yo no estoy acostumbrado a este tipo de cosas. No creí que yo también te gus-

—Silencio.— Hoseok colocó su mano sobre sus labios para que no continuara hablando.

"Al principio, creí que era un buen tipo, eso es todo, pero... después de hablar con él y aunque es malo con las palabras y actúa de forma sospechosa, no podía dejarlo solo. Sin darme cuenta me enamoré de él".

Pequeñas lágrimas volvieron a acumularse en sus ojos luego se escuchar eso, segundos después los labios de Hoseok estaban sobre los suyos, moviéndose suavemente solo durante unos segundos que fueron suficientes para que ambos estuvieran sonrojados.

—Hoseok...

—No te preocupes, seré gentil.

—Sí.

Una vez más sus labios se habían unido, tal vez no estaban ni en la mejor posición ni en el mejor lugar, pero se sentían cómodos él uno junto al otro y de momento, solo eso era suficiente.

Esa noche, Kim Namjoon había renunciado a sus poderes de mago.





el capítulo terminó siendo
más largo de lo normal,
pero no quise cortarlo, skfjsk.

tómenlo como disculpas por
mi demora con los caps.

espero y lo hayan disfrutado.

buen fin de semana
para ustedes. <3

Mago [Jinsu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora