Entrenando a Exo (D.O Kyungsoo)

Primer beso

Gina había visto como D.O se dormía poco a poco, el cansancio pudo con él, ella se recostó en la cama de a lado, a pesar de todas las emociones del día no tenía sueño, estaba cansada pero no quería dormirse, quizá si se dormía tendría pesadillas y era lo que ella menos quería.

Miraba hacía la figura de D.O, le pareció hermoso verlo recostado, vio la habitación, pensó en varias cosas y luego poco a poco quedó dormida. No tuvo pesadillas, soñó con cierta sonrisa gentil.

Se despertó luego de unas horas, algo la despertó, se levantó y lo primero que vio fue a un D.O que la observaba, rápidamente salió de la cama y fue hacia él.

—Perdón me quedé dormida, ¿necesitas algo? — Gina estaba apenada, debía cuidarlo, no dormirse

—Tranquila, estoy bien, tú también has de estar cansada —le contestó con una voz dulce que ella adoró pero D.O cambió de expresión y arrugó el ceño al fijarse bien en el rostro de Gina

—¿Sucede algo?— preguntó ella al ver su cambio de humor, él levantó su mano izquierda y tocó su mejilla —¡auch!— soltó ella del dolor

—¡Malditos!—exclamó con rabia él

—No importa, estoy bien—le dijo para tranquilizarlo

—Está morado— le contestó con angustia

—Se irá en unos días—le dijo restandole importancia—mejor dime cómo te sientes

—Estoy mejor, aunque si me duele mover el brazo— le contestó con un sonrisa

En eso entró el medico, empezó a checarlo y ella observaba cada movimiento que el doctor hacía, revisó su presión, y luego su vendaje. El reloj de la habitación marcaba las 8 a.m era temprano y al fin domingo, el doctor dio su veredicto al 

—Estás bien, te daremos ya de alta— dijo el medico, Gina estaba feliz al igual que D.O —iré a llenar los papeles, de mientras su prometida puede ayudarle a cambiarse, que suerte de tener a tan bella joven de futura esposa—ella se puso roja al instante, no podía creer lo que decía el medico, D.O se inmutó por un instante y luego sólo le sonrió al medico

—Sí, soy muy afortunado de tener a una hermosa futura esposa— le contestó, el medico salió del cuarto y Gina se tapó la cara con las manos, tenía tanta vergüenza—Futura esposa, ¿Por qué te escondes?— le preguntó en tono burlón

—Le dije que era tu prometida para que me dejaran quedarme— le contestó apenadisíma, él soltó una ligera risa

—Tranquila, no dijiste ninguna mentira— le contestó a lo que ella no pudo más que sonrojarse

'Una vida con D.O, ¿Eh? no suena nada mal' pensó ella pero luego quiso darse una cachetada, él comenzó a reírse al ver su sonrojo y ella no pudo evitar reírse también.

—Bueno, creo que te ayudaré a cambiarte—dijo Gina parando de reírse, buscó su ropa en una maleta que los chicos le habían dado, sacó la ropa de D.O— que bueno que los chicos me dieron esto —señaló las prendas