Escándalo

Capítulo VI

Barcode recordaba perfectamente la ocasión en la que le preguntó a Jeff si le gustaban los chicos. Se sentía como un intruso al dejar escapar aquella duda pero solo estaba siendo él mismo, lo que significaba que a veces no había un filtro entre lo que pensaba y lo que decía.

—Si sabes que no todos los actores de BL gustan de chicos, ¿verdad?

—Sí, sí. Pero no me interesan los otros actores, te pregunto a ti, P'. Entiendo si no quieres...

—El género, Barcode, es una construcción social. Durante siglos la sociedad lo ha usado para encasillar a las personas, decirles que si son hombres deben actuar fuertes, usar pantalones y jugar con carritos. Si son niñas, entonces, usaras falda, serás delicada y jugarás con muñecas.

—Eso lo entiendo, pero que tiene que ver con lo que pregunte.

—Mucho. Porque sin darse cuenta, también han encasillado el amor. Como hombre debes amar a las mujeres; si eres mujer, ama a los hombres. Por fortuna, ya nadie está dispuesto a tolerar ese constructo. —Jeff, que había estado inclinado sobre una hoja de papel se puso de pie y caminó hasta Barcode con una sonrisa—. Yo no necesito que la sociedad me diga como actuar o a quien querer solo por haber nacido con pene. Tampoco necesito etiquetar mis sentimientos, si me gusta una persona será por su forma de ser, por lo que hay más allá de su aspecto.

Jeff se sentó frente a Barcode y con la punta de su dedo acarició la mejilla para quitar un rastro de polvo que había allí. Ese gesto, acompañado de esa conversión, sólo dejaron una sensación de nerviosismo en todo el cuerpo del niño, incapaz de dejar ver lo que sentía, Barcode sonrió y aparto la mirada.

» Así que sí, Nong, en mis diez años de experiencia, en comparación contigo, he estado con mujeres y hombres. Y me la he pasado muy bien con ambos. Tú sólo eres un niño así que es normal que tengas curiosidad.

—P', ya no soy un niño.

—Dudo que alguna vez pueda dejar de verte como mi hermanito, Barcode.

Si tan solo Jeff se hubiese amarrado la lengua esa tarde, tal vez Barcode no hubiese actuado como lo hizo la noche en cuestión. Cuando sucedió esa conversación Barcode ni siquiera era consciente de sus sentimientos, se alegró porque Jeff había dicho que lo miraba como un hermano, aunque algo había revoloteando en su interior cuando le dijo que los hombres también tenían una oportunidad.

Mucho tiempo después cuando los sentimientos de Barcode estaban más claros, y los de Jeff comenzaban a llenarle la cabeza de confusión, esa conversación apareció en sus cabezas para empeorar la situación.

Barcode sabía que Jeff tenía un pasado, no era tan estúpido como querían hacerlo ver. Tampoco era del todo inocente, así que tenía muy claro que Jeff había tenido muchos años acuestas para hacer y deshacer a su antojo.

Pero jamás pensó que tuviese que enfrentarse a ese pasado, y que tendría que enfrentarse a ello en medio de su trabajo.

La fiesta sólo era una mera formalidad, los artistas de BOC estaban ahí para recaudar fondos y aunque Barcode debía estar en cama durmiendo, y preparándose para el examen que tenía al día siguiente, asistió a la reunión con el único propósito de torturarse.

Una de las invitadas, Manaow, fue compañera de trabajo de Jeff por varios años. Sólo era unos pocos años mayor que Barcode pero despedía un aura de autoridad, sabiduría y belleza que no hacían más que romperle la cabeza con dudas.

—Desde aquí puedo ver los celos.

—No sé de qué hablas, P'.

Tong compartió una mirada con Pong pero ninguno dijo nada más. Barcode concentro la poca estabilidad que le quedaba en su plato, era mejor comer y tener algo que hacer que observar al otro lado del salón donde Jeff coqueteaba descaradamente.