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Tiró desesperado todas sus prendas con las del Alfa que sostenía con fuerza las sábanas

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Tiró desesperado todas sus prendas con las del Alfa que sostenía con fuerza las sábanas.

Severus metía sus dedos por su culo intentado satisfacer la comezón placentera de su interior.

Harry observaba esto con deseo, su Omega estaba asiendo un espectáculo cinco estrellas para el y no podía estar más complacido.

Pero a la vez se molestó por un razón tan egoísta que asta el mismo se reía.

Tumbo al Omega en la cama y restringió sus manos contra el cabezal.

No tienes permitido tocarte me escuchaste? —algo muy dentro de Harry gruñó satisfecho cuando el Omega gimio mostrando su cuello donde su marca reposaba.

Sus feromonas junto con las del Omega bailaban en el aire creando un ambiente de fragancias extremadamente exitantes, si antes Severus olía bien ahora el alfa podía jurar que su Omega era el aire mismo en sus pulmones.

Viendolo tan sumiso se dedicó un momento en admirar su delicado cuerpo, poseia unas perfectas caderas anchas y sus pezones rosados estaban parados como dos botones rosados, el interior de sus muslos eran cremosos y sin poder evitarlo quedó entre sus piernas acariciandolas.

Lo escucho llamandolo, sonrió feliz, su Sev lo necesitaba y el se encargaría que hasi fuera para siempre.

El miembro del Omega erá pequeño en comparación de su larga y gruesa polla que por cierto necesitaba de urgente atención.

—a-alfa ha!...Harry porfavor, p-porfavor métela ya! —suplico fuera de sus instintos enrollando sus piernas en el alfa atrapandolo.

—Paciencia Sev quiero que nuestra primera vez sea memorable.

Con magia sin varita separó las piernas del Omega que se quejo molesto, se permitió dar unos pasos atrás para ver el culo resbaladizo con el que había jugado todo este tiempo.

Y lo culpan? Era solo curiosidad con lujuria juntas, se levantó y fue rápidamente al gabinete privado de su Omega sacando un par de pociones especialmente hechas para sus juegos.

Nunca las había probado todas juntas pero su Omega le había advertido que todas eran seguras.

—N-No alfa porfavor seria demaciado yo...!!!—Harry lo obligó a tomar cada una de las pociones al Omega que sin fuerzas solo pudo tragar.

No pasó menos de un segundo asta que Harry pudo admirar los cambios.

Los pechos perforados de su Omega salieron disparados en alto viéndose malditamente apetecibles con su nueva textura más grande como si almohadillas se tratase expulsaban un líquido sospechosamente blanco de ellos, la entrada de su Omega estaba bien lubricada tanto que manchaba las sábanas, podía ver cómo está se abría un poco ansiosa cómo si estubiera esperando algo.

El aroma de su Severus era una droga ahora y no quería parar de aspirarla, quitando sus restricciones el Omega se retorció en su sitio.

Sus ojos desenfocados junto con la sonrisa oscura y lujuriosa características de su omega le hicieron saber que "esa poción" había funcionado.

𝐕𝐨𝐮𝐥𝐨𝐢𝐫 || SnarryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora