Capítulo 8

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Envié al señor patata con una carta dirigida al hermano menor del señor Rengoku  para solicitarle ayuda respecto a los apuntes de los pilares de fuego, con la excusa de que logre dominar una de las posturas, y necesitaba saber más al respecto.

observe como se perdía en la inmensidad de aquel cielo despejado.

- De seguro te citará luego en casa para entregarte el libro - dice Rengoku muy confiado.

- espero que así sea - le respondí

- bien ahora vamos a entrenar, salgamos -

tome de la habitación la espada de entrenamiento, me acerque al señor Rengoku y le tome la mano.

- estoy lista -

( cc a quien corresponda)

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( cc a quien corresponda)

su sonrisa iluminó más la habitación.

lleno de energía me pidió que lo siguiera, si hubiese estado vivo, de seguro esa orden la escuchaban hasta el otro lado de la mansión de Oyakata sama, tenía poco tiempo  para entrenar, mientras hacía ejercicios de técnicas, debía mantener la respiración de concentración por lo que terminaba exhausta.

- El camino es duro,  pero tu cuerpo se adaptará rápido - me dijo mientras intento recuperar el aliento.

sé que mi cuerpo se adaptará rápido, con solo verlo pude imitar la primera de sus posturas, sólo debo recordar esa sensación, sentir el fuego de mi alma y la determinación por cumplir el deber, he ahí el secreto de esta respiración, la convicción del usuario es importante.

El señor Rengoku era bastante calmado para enseñar, de a poco me empezó a exigir que mantuviera la respiración hasta adaptarla como natural, recuerdo que El pilar del viento, me dijo mientras estaba entrenando

- eres extraña, acaso un ser invisible te instruye que pareciera que sigues órdenes -  me miró con cara de pocos amigos y continuó su camino.

pues así era justo en ese momento Rengoku me había pedido que retomara el ejercicio de la respiración mientras caminaba de manera natural.

y claro escuchar a su amigo dirigirse tan despectivo, en vez de alentarme, se fue tras el para decirle unas cuantas cosas. 

claramente Shinazugawa Sama no lo escucharía pero si logre notar que sintió el peso de la mano de Rengoku sobre su hombro ya que se quejo de una leve molestia en esa zona.

- Oye, Cazadora - me gritó desde el otro extremo del pasillo

volteo a verlo  - Si, Shinazugawa sama? - le pregunte

- tu perfume, es bastante fuerte, modera eso - luego de decir esas palabras, Rengoku se alejó de él.

hice un gesto de que entendía su instrucción, y cuando el pilar de fuego regreso a mi lado, le dije

- pueden que no lo oigan, o sientan, pero tiene un aroma bastante peculiar que los demás logran percibir - 

- Ya lo note Miyu chan, tendré más cuidado, no quiero causarle .... oiga, y su respiración - cambiándome la conversación.

solté un suspiro, pero debía seguir con el entrenamiento.

a la hora del almuerzo, siempre esperaba a ser la última atendida ya que se nos hizo costumbre que cada final de comida el me besara con la excusa de sentir sabor, lo enfrenté preguntando si realmente era necesario.

- en realidad, con una vez me bastaba, se me hizo costumbre darte afecto - me respondió mirando a otro lado, continuó hablando - se que no es correcto, no volveré a hacerlo, hasta encontrarte en otra vida -

iba a responder en ese momento, pero entró más gente al comedor por lo que tuve que dejar pasar mi respuesta, como me distraje, me di cuenta que se fue de mi lado, se me escapó un largo suspiro.

claramente lo que me dijo es una especie de declaración, pensé, sonreí tome una bocanada de aire, cogí la bandeja, fui a dejarla a la cocina, para luego ir a solicitar acceso a la biblioteca que mantiene oyakata sama, necesito buscar algún escrito de algún pilar del fuego, mientras más información pueda recopilar, podría entrenar mejor, mientras espero la respuesta del hermano de Rengoku san.

al pensar en él inmediatamente sentí como se me calentaban las mejillas,de  camino a la biblioteca

Lamentablemente los únicos registros que encontré son los reportes de las misiones, me entregaron tres libros referentes al último pilar, no era lo que buscaba, pero en cierta parte la curiosidad por saber que era lo que escribía en sus informes me contaría algo mas de su vida.

se que los informes a veces son escuetos pero algunos, eran bastante detallados, ahi logre encontrar pistas de cómo enfrentar un combate complicado,  cuando el oponente claramente te supera en fuerza y habilidad.

y bueno el último informe que estaba en ese registro que fue firmado por los cazadores y Kakushis que acudieron a la misión del tren infinito.

Leer las palabras que Tanjiro le gritó al demonio en el momento en que la tercera luna superior me llegaron al alma, debió ser una batalla impresionante de ver y dura de aceptar, recordé que debía mantener la respiración por la que me concentré y salí un rato a tomar aire para despejar mi mente.

Nuevamente se me paso la imagen de Rengoku san, imagine si esa declaración del comedor me la habría dicho en vida, luego de leer el libro con los informes,la respuesta era bastante clara, nunca hubiera hecho eso, en ese instante levanto mi vista,  veo al Señor patata regresar con una respuesta.

me entregó la carta, ansiosa, la leí 

"Claro que ayudaré con gusto, la recibiremos en casa" 

me llamó la atención lo escueta de la respuesta pero más aún, estaba hablando en plural, recordé lo mal que me trato el padre del señor rengoku en ese entonces, se ve que cambio.

Siento el aroma a cerezos otra vez, miro de re ojo y ahí estaba su rostro cerca al mío viendo atento la información de la carta.

me puse nerviosa, de un salto me aleje un par de metros de él, hay momentos que olvido que solo yo lo puedo ver.

- de quien te estas escapando - dice el  pilar de la niebla.

voy a responderle cuando habla nuevamente

- no me importa, sólo correte de mi camino - 

inmediatamente le doy el paso, al parecer estaba de mal humor.

Rengoku lo noto bastante raro, por lo que se fue tras el pilar, luego de darme ese susto, unos cuantos Kakushis me corretearon del pasillo, salí a ver que sucedía, había una reunión de emergencia....

















Hasta aquí dejo la actualización

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