𝙴𝚙𝚒𝚜𝚘𝚍𝚒𝚘 𝚇𝚇𝙸𝚅

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La misma noche de bodas, Leora no resistió dormir en camas separadas lejos de Maloridespués de haber visto aquello, por lo que les pidió a los sirvientes que prepararan a Malori para que durmiese con ella

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La misma noche de bodas, Leora no resistió dormir en camas separadas lejos de Maloridespués de haber visto aquello, por lo que les pidió a los sirvientes que prepararan a Malori para que durmiese con ella.

Los sirvientes rápidamente obedecieron, fueron por Malori, la cual estaba confundida y la arreglaron para que dicha mujer se viese hermosa para ver a Leora, mientras cierta albina veía lo que sucedía desde la bola de cristal de su última general.

Cuando Malori llegó a la puerta de Leora, tocó levemente y Leora abrió rápidamente, lanzándose hacia Malori sin consentimiento alguno para besarla, algo que a la albina que observaba, la llenó de furia, al punto de querer romper la bola de cristal, pero al ser un artefacto útil, no podía hacerlo.

Malori apartó a Leora con un evidente rubor, algo que hizo sonreír a Leora, pues creía que realmente le gustaba a Malori, pero que aquella mujer sólo quiso seducir a "su peliroja"

- L-Leora... -
Dijo Malori mirando a otro lado
- D-Dijiste que no haríamos n-nada h-hoy -
Malori estaba confundida y no sabía que pasaba pero aquel beso, definitivamente le había dejado un sabor amargo a diferencia del beso de Velverosa, el cual había sido el primer beso de su vida, el más dulce de aquellos dos

- Sé lo que dije, pero mínimo podríamos dormir juntas. ¿No te parece? -
Dijo Leora ofreciéndole su mano a Malori

La cual sabiendo que no le quedaba de otra, aceptó dormir con ella para no levantar sospechas.
Leora acostó a Malori en la cama y la abrazó para dormir, sintiendo que claramente la maga estaba hirviendo, la princesa se sintió orgullosa, pero sabía que no era suficiente si quería que Malori se alejara de aquella mujer seductora, así que pensó en un pequeño plan para poner celosa a Malori.

Al día siguiente, Malori estaba adolorida de pies a cabeza, ya que no había podido dormir bien esa noche, mientras que Leora resplandecía más que el sol por su orgullo.

Cuando ambas bajaron a desayunar, el rey y la reina vieron a ambas, Malori claramente seguía nerviosa, pero esta vez no por Leora, si no, porque no había tenido nada con Leora la noche anterior y sabía que los reyes preguntarían, pero entonces el rey habló

- Ejem... Un sirviente me dijo que anoche ustedes dos durmieron
juntas... -
Dijo el rey Albert

- B-Bueno a-a-
Y antes de que Malori pudiera contestar algo, la princesa interrumpió

- Si, dormimos juntas, alguien se veía tan hermosa que no pude resistirme -
Dijo Leora

El rey y la reina al ver a su hija más que orgullosa y a Malori adolorida y nerviosa, se echaron a reír creyendo que ambas habían tenido una noche interesante

- No vayan a perder mucho el tiempo y denme un nieto lo antes posible -
Dijo el rey

A lo que ambas contestaron
- S-Si Señor -

Antes de que pudiesen si quiera tocar otro tema más, el rey empezó a escupir sangre como de costumbre, pero esta vez era exagerada

- ¡Albert! -
Gritó la reina Eleonor

- ¡Padre! -
Gritó Leora

Y Malori solo se limitó a acercarse de una manera preocupada para aparentar que le importaba
- ¡Rápido, llamen al médico real! -
Ordenó Malori

Los sirvientes obedecieron y fueron por el médico, lo cual fue en vano, ya que cuando el médico llegó, el rey había muerto en brazos de su esposa e hija, mientras que cierta peliroja ocultaba una enorme sonrisa.

Al pasar dos días, Malori fue a visitar a Velverosa, con el pretexto de que necesitaba distraerse un poco por el dolor que le había causado cierta muerte.

Y nadamas llegar, la reina al verla sola, se abalanzó directamente contra Malori, haciendo que esta cayera al suelo, Velverosa la acorraló y sin dejarle alternativa, la empezó a besar de igual manera como había visto que había hecho Leora, pues jamás lo diría, pero detestaba aquellos celos y el hecho de que "lo suyo" alguien más lo tuviese sin restricción alguna.

Malori le correspondió alguno que otro beso, pero al darse cuenta de lo que estaba sucediendo apartó a Velverosa

- N-Necesito hablar contigo -
Dijo Malori seria

- ¿Qué sucede? -
Preguntó Velverosa extrañada, ya que creía que Malori la amaba

Lo cual, era verdad pero Malori tenía cierta inquietud
- No podemos hacer esto -
Dijo la peliroja

- ¿No podemos? ¿Entonces porque me correspondiste esa noche? ¿Acaso no me amas? -
Preguntó la albina

- C-Claro que si te amo, pero si lo haré quiero que sea un amor puro y sincero, no un engaño de parte de ambas... Quiero tener algo digno contigo, así que por el momento, tengo que respetar las reglas de un verdadero matrimonio y ser justa con Leora -
Dijo Malori

Velverosa estaba enojada, pero tras pensarlo un poco, vió a que se refería Malori y le dió ternura
- Entonces si no podemos avanzar en ello, al menos déjame que te bese sin consentimiento -

- ¿Que-

Interrumpiendo a Malori, Velverosa la volvió a besar y Malori la apartó, y no pudiendo aguantar el rubor y sus ganas por corresponderle se volteó a otro lado cubriéndose el rostro

Velverosa se rió viendo tal actitud, comprobando que realmente le gustaba a Malori, la cual solo terminó recargandose un poco en su hombro teniendo un ataque de pánico gay muy evidente.

Ambas deseaban profundamente corresponder el amor de la otra, pero hasta que Leora no hiciera algún movimiento, ellas no podían corresponderse.

Así pasaron los días, Malori frecuentaba a la torre muy seguido, Velverosa la llenaba de cariño y coqueteo.
Y mientras en el castillo Leora estaba centrada en Malori a pesar de la muerte de su padre, Malori parecía estar interesada en ella y en el cuidado de los guardias y el pueblo, ganándose un gran respeto y admiración por parte de todos;
Pero la reina, exigía justicia, y tomando al noble que parecía más evidente y más culpable, lo mandó a decapitar, su salud mental, iba disminuyendo y al cabo de unos días cayó en depresión, Leora estaba al tanto, pero ahora debía centrarse en Malori.

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𝕸𝖆𝖌𝖊 𝕬𝖓𝖉 𝕯𝖊𝖒𝖔𝖓 𝕼𝖚𝖊𝖊𝖓: 𝕱𝖆𝖑𝖘𝖊 𝖗𝖎𝖛𝖆𝖑𝖗𝖞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora