𝕸𝖆𝖌𝖊 𝕬𝖓𝖉 𝕯𝖊𝖒𝖔𝖓 𝕼𝖚𝖊𝖊𝖓: 𝕱𝖆𝖑𝖘𝖊 𝖗𝖎𝖛𝖆𝖑𝖗𝖞

𝙴𝚙𝚒𝚜𝚘𝚍𝚒𝚘 𝚇𝚇𝙸𝚇

Malori a partir del engaño de Leora, empezó a ver los frutos de su atención ante los demás, a pesar de aplicar la ley del hielo a su esposa, nadie cuestionaba a Malori y todos le daban la razón a excepción de Axel, quien aún indignado por no haberse dado cuenta antes de la biología de Leora, estaba mas que humillado y deseaba desquitarse, pero cuando llegó el día de la coronación de Leora

Los rumores se expandieron por todos los reinos, algunos murmuraban lo noble que era Malori al tener tanta humildad como para ayudar a los demás y soportar a esa clase de esposa, otros especulaban que Malori no hacía del todo feliz a Leora y ésta en cambio necesitaba su harem; también había quien decía que quizás la culpa era de Leora por que no era lo que se esperaría realmente de una princesa que aparentaba mucha bondad.

A pesar de ello, muchos apoyaban a Malori, en especial la plebe, la guardia y la servidumbre, pues Malori había ayudado y dado mucho de sí desde que se le dió su primer poder como consorte.

Y al ascender como Reina Consorte, Malori también comenzó a ser bastante popular entre los nobles, incluso más de lo que ya lo era, comenzó a mandar su apoyo a varios reinos, a crear tratados de paz, y a hacer varias reuniones y consejos con otros nobles, mientras Malori se volvía mas fuerte en estatus social y comenzaba a ser reconocida como una buena reina, Leora comenzaba a perder todo su estatus debido a que Malori la apartaba ya sea directamente o indirectamente de todas sus conexiones.

Ahora aquella rubia era solo una sombra en comparación de Malori

— Majestad, Reina Malori... —

— Majestad, Reina Leora... —

Ambas solían encontrarse de vez en cuando por los pasillos del castillo, sin embargo, apenas se mostraban respeto y después de ello pasaban de largo ignorando a la otra y distanciandose más.

— Mi reina, ¿está segura de esto? —
Preguntó Cerik

— Si, este lugar nos servirá de mucho, aquí armaré el consejo secreto, ni si quiera Leora sabe de este lugar. La entrada secreta da al jardín trasero, un área al cual Leora nunca se atreve a ir debido a las espinas de los rosales abandonados —
Dijo Malori

— ¿Quienes vendrán al consejo? —
Preguntó Cerik, el cual ahora era guardia personal de Malori, pues Malori le había ofrecido un alto puesto a cambio de ayudarle en lo que pidiera y proteger a su familia. Nadie podría rechazar la propuesta de Malori, en especial el azabache, pues Cerik pensaba en tener una vida tranquila y estable haciendo lo que le gusta, como pelear con la espada.

— Reyes de otros países, archiduques, duques, condes, consejeros, visires... Todo aquel que acepte aliarse conmigo. Por supuesto que algunos de ustedes estarán para informar a los plebes y demás guardias de los acuerdos, tú, mi querido amigo, serás mi representación en la guardia y los héroes, y mi maestra Cecilia, será mi representación con la plebe y los magos —