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¿Y si Malori intentara cazar la cabeza de Vel a igual que los demás?
En este universo alternativo los recuerdos de Malori a cerca de su pasado, son un tanto diferentes, sin embargo puede que aún en lo más profundo se encuentren emociones difere...
¿Quién diría que aquel pasadizo en el pequeño cuarto de escobas llevaba a una profunda mazmorra que ni el mismo rey anterior conocía?
— (Hace mucho tiempo no venía a este lugar, casualmente lo descubrí mientras jugaba con Leora a las escondidas... Era fácil ganarle) — Pensaba Malori mientras recorría aquel pasadizo que parecía un laberinto, siguiendo unas pequeñas marcas apenas visibles en la pared, avanzaba adentrándose cada vez mas a las profundidades de aquel castillo.
Una vez llegada a la puerta de entrada a aquella prisión abandonada, Malori giró una palanca abriendo las puertas y así encontrándose a dichoso aventurero engreído encadenado
— ¡¿Q-Quien eres?! — Preguntó Axel gritando
— (Que conveniente... Le dejaron cegado con un veneno) Ja... Jaja... ¡¡¡JAJAJAJAJAJAJAJA!!! — Se reía Malori de una manera un tanto macabra
— ¡E-ERES UNO DE LOS PERROS DE CROWETT! ¡¿NO ES ASÍ?! — Decía Axel quien parecía estar ligeramente temeroso
Malori fingiendo una voz un poco más sombría, comenzó a hablar — MЄ ƤƦЄƓƲƝƬƠ ƢƲƖЄƝ ЄƧ ЄԼ ƤЄƦƦƠ ƊЄ ƢƲƖЄƝ... ЄƦЄƧ ƲƝ ƖƊƖƠƬƛ ƤƠƦ ƤЄƝƧƛƦ ƢƲЄ ƤƠƊƦíƛƧ ƁƲƦԼƛƦƬЄ ƊЄ ƬƠƊƠƧ ƤƠƦ ƧƠԼƠ ƧЄƦ ƲƝ MƛԼƊƖƬƠ ƖƝƔƠƇƛƊƠ —
Axel estaba todavía mas asustado debido a la desagradable voz que hacía Malori — ¡¿Q-QUÉ MIERD# PIENSAS HACERME?! —
— Ƴƛ ԼƠ ƧƛƁƦÁS, ƬЄ ƔЄƦÁS ӇЄƦMƠƧƠ ƇƲƛƝƊƠ ƬЄƦMƖƝЄ MƖ ƬƦƛƁƛʆƠ, MƛԼƊƖƬƠ ƁƛƧƬƛƊƠ... ƬЄ ƔЄƦÁƧ MƛƧ ӇЄƦMƠƧƠ ƢƲЄ ЄƝ ƬƠƊƛ ƬƲ MƖƧЄƦƛƁԼЄ ƔƖƊƛ, MƛԼƊƖƬƛ ЄƧƇƠƦƖƛ ƔƖƔƖЄƝƬЄ — Dijo Malori mientras miraba la mesa de herramientas — ¿ƤƠƦ ƢƲЄ ƝƠ MЄʆƠƦ ЄMƤЄȤƛMƠƧ ƤƠƦ ƛԼƓƠ ƁÁƧƖƇƠ? — Decía Malori con una linda sonrisa tomando una navaja — ЄMƤЄƇЄMƠƧ ƤƠƦ ƊЄƧƠԼԼƛƦƬЄ —
— Q-Qué es eso? —
— ¡¡¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!!! — Malori se reía mientras tomaba uno de los pies de Axel — ƔÁMƠƧ ƛ ƢƲƖƬƛƦƬЄ Լƛ ƤƖЄԼ —
— ¡¡¡AYUDA!!!— Gritaba Axel
Malori comenzaría a pasar lentamente la navaja por los pies de Axel, escuchando la bonita melodia de los gritos de su víctima