Capítulo 16: Golpe De Realidad

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Todavía lo recuerdo... no hay un sólo día que no piense en lo que sucedió hace varios años... antes de conocer a Buchou.

Cuando me dijeron que poseía algo especial que me hacía parte de un reducido grupo de personas y que entraría a una especie de programa que sería beneficioso para la iglesia, creí que por fin podría encontrarle valor y sentido a mi vida... pero todo fue una farsa.

Resultó ser un auténtico martirio... prueba tras prueba, poco a poco iban siendo más riesgosas tanto para mi como para los demás involucrados, los cuales se volvieron mis primeros amigos... para mí, ellos eran el único rayo de luz en un amplio mar de oscuridad; a pesar de que habían días difíciles, ya sea por hambre, sed o incluso por enfermedad, siempre hallábamos la manera de seguir en pie, porque pensábamos que al final todo valdría la pena... no fue así.

Tengo muy claro ese suceso en mi memoria; ninguno consiguió ser compatible con Excalibur, por ende supimos que el experimento fracasó, así que decidieron que ya no éramos útiles y ordenaron que se deshicieran de nosotros.

Sujetos usando trajes protectores aparecieron y utilizaron gas venenoso sobre mi y mis compañeros, pero de alguna forma escapé de ahí, a pesar de que me carcomía la culpa de haber dejado atrás a los demás.

De seguro ya estaban muertos cuando me adentré en el bosque.

Así fue como perdí a todos mis amigos en una sola noche... y todo por ese maldito viejo y su perverso proyecto; caminaba apenas consciente, hasta que ya no pude más y me desplomé en la fría nieve.

Podía sentir los estragos tanto del veneno como de la baja temperatura en todo mi ser y estuve a punto de resignarme a morir... recuerdo que había luna llena y, en mi lecho de muerte, apareció ella... Rias Gremory, cuya atención atraje lo que la llevó a reencarnarme como su sirviente.

Con el paso del tiempo, varios habían tratado de convencerme que ya era momento de que lo superase, que avanzara y dejara todo en el pasado... pero ellos no entienden nada.

No saben qué es perderlo todo.

Entrené y entrené hasta partirme los huesos para ser más fuerte y cumplir mi ambición... pero con el tiempo fui distanciándome de esa idea hasta casi haberla olvidado, de no ser por él.

Hyōdō Ise-kun... la única persona que quiso ser mi amigo en mucho tiempo es, al mismo tiempo, la razón de que haya decidido reflexionar seriamente lo que quiero hacer, principalmente por lo ocurrido esta mañana.

¿Por qué iba acompañado por esas exorcistas? ¿De que forma está relacionado con ellas? Si no lo conociera, lo consideraría un imán de problemas... primero los ángeles caídos, luego Raiser Phoenix y ahora dos portadoras de espadas sagradas... en ese momento, dejé de creer que era una casualidad.

Así que me dejé llevar y apenas estuvimos solos, intenté interrogarlo para saber más de esas dos chica; sus nombres, su propósito aquí en Kuoh, sus habilidades, cualquier dato útil, pero se paralizó y empezó a tartamudear, lo que solo me desesperó más... si tenía que sacarle la información a la fuerza, lo habría hecho.

Pero antes de que hiciera semejante tontería, aparecen Buchou y las demás; tampoco dudé en descargar toda mi frustración en mi ama, y lo que recibí fue una cachetada... ahí supe que me excedí, por ello me disculpé con Ise-kun y fui a sentarme en un árbol cerca del viejo edificio a esperar la dichosa junta de la que nos "habló" Buchou.

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⏰ Última actualización: Oct 19, 2023 ⏰

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