REPITES LAS CANCIONES... -LUMITY & HUNTLOW-

Is It Wicked Not To Care?

Me encantaría reacomodar cada pieza de tu roto corazón. Siempre me verás como un amigo más, capitana. No tienes idea de lo mucho que me gustaría a ser algo más para ti. 

No me gusta verte sufrir por alguien que siempre juega con tu corazón. Jamás llegaría a ese punto y lo sabes bien.

¿Sabes qué me gustaría hacer, capitana? Me gustaría entrar en tus pensamientos. Déjame entrar a tu mente justo como lo haces en la mía.

Desde hace tanto tiempo que dejó de importarme lo que ocurría a mi alrededor. Prefiero llenarme la mente con escenarios que jamás sucederán. Tengo las esperanzas puestas en algo que simplemente no tiene cabida. ¿Es tan malo?

Cuando almorzamos en compañía de Gus en la cafetería de la dama búho para después marcharnos a la universidad, sólo te observo a ti y los pequeños movimientos que realizas al llevar tus labios los pastelillos que hornea el señor Hooty en compañía del pequeño hijo adoptivo de Eda y Raine. 

Me encantaría tanto saborear tus labios, me muero por morder tu labio inferior para así profundizar todos esos besos prohibidos que anhelo cada día que pasa.

Pero... ¿por qué no puedo ser yo el merecedor de probar tus labios? ¿por qué no puedo acariciar tu suave y largo cabello? Solo puedo tocarlo cuando me pides que lo peine antes de un partido. No sé peinarlo bien y te consta, sin embargo insistes en que continué haciéndolo. A veces pienso que te gusta jugar conmigo, pero no. No puede ser posible. Soy tan perfecto imitando el papel de mejor amigo que no tienes bases para sospechar nada. 

Pero todo esto es injusto.

Tu corazón es un verdadero desastre, capitana. ¿Cómo puede él escoger estar a lado de una persona como Boscha Banshee? Es una chica que aunque dice que te ama, en varias ocasiones ha demostrado lo contrario.

No importa. Siempre estaré allí para ti. Justo ahora recuerdo una ocasión en donde llegaste a casa a altas horas de la noche. Apestabas a alcohol y tu rostro estaba manchado por horribles manchas color púrpura. Mamá te atendió y al no estar Luz en casa, me pidió a mí que te cuidara por esa noche. Te llevé a mi cuarto, nos sentamos al borde de la cama. Te mirabas tan triste y de a poco me contaste que había sucedido. 

Sentí un rencor que me corrió por cada vena de mi cuerpo. 

Inesperadamente me abrazaste, te correspondí el abrazo. Te arrepentiste de muchas cosas, te aferraste más y más a mi pijama de aquella noche. Escuché atentamente cada susurro, cada lamento, cada lloriqueo que pronunciaste. Las horas pasaron y acabamos recostados viéndonos frente a frente. 

Cuando estabas por caer dormida, dijiste algo que me sorprendió. Dijiste que estabas harta de lamentarte y que me amabas. Caíste rendida después de confesar tal declaración.

Tus palabras fueron una condena. Me odié una vez más por haberme enamorado de una mujer ajena. 

A la mañana siguiente despertaste y me preguntaste si habías dicho algo vergonzoso, negué con la cabeza y te sonreí para poder transmitirte confianza. No debes enterarte jamás de lo último que me compartiste. Esas dos palabras que me hicieron volar por un instante.

Te amo

La llave de mi corazón la tienes y ya no sé si esperar por más tiempo, capitana. ¿En algún momento la utilizarás o dejarás que se oxide? 

El tiempo pasó y la llave se oxidaba más y más. Seguías a lado de la chica Banshee y tú y yo ya no hablamos como antes. Te alejaste de pronto de todos. Gus y yo respetamos esa decisión. No había nada por hacer. 

Cuando las esperanzas estaban por marchitarse. Llegaste a casa una tarde con tus mejillas sonrojadas por el frío que hacía afuera. Estaba solo en ese instante. Papá había salido en compañía de mamá a ver la obra de teatro que había organizado Luz en compañía de su novia Amity. Era una obra que adaptaba una de las tantas novelas que leía de pequeña... de una tal bruja Azura. 

No comprendía del todo que hacías allí, pero mis dudas callaron cuando sentí tus labios sobre los míos. Iniciamos así un beso que hasta hoy no he sido capaz de olvidar. 

Nos dirigimos a mi habitación en donde me contaste todos los motivos que te habían hecho distanciarte de nosotros. Escuché atentamente cada palabra. Te conforté tal y como siempre lo había hecho en todos estos años. Te abracé. 

Me dijiste al oído que lo sentías, pero ya no quería escuchar más lamento. Ya todo estaba hablado y perdonado. Me separé solo para poder iniciar un lento beso. Con éste ya sería mi segundo beso en la vida. Sé que lo hice fatal porque te separaste de mí después de un rato. 

No tienes que esforzarte, Hunter... iremos paso a paso. 

Mi felicidad era tanta que podía morir en cualquier momento. 

Por fin estabas a mi lado y me animé a decirte aquellas palabras que tanto dije en sueños y que moría por pronunciar desde hace tanto tiempo... te amo tanto, capitana.